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Quilmes. Vaciamiento y quiebra en el Sanatorio Perpetuo Socorro
Por reenvío agencia walsh - Wednesday, Jan. 30, 2013 at 12:22 PM

Los trabajadores de la Clínica Privada Sanatorio Perpetuo Socorro de Quilmes se encuentran ante una futura e inminente quiebra declarada por sus dueños. Desde hace una semana unos diez trabajadores mantienen una guardia en la clínica para resguardar los bienes de la misma.

Buenos Aires, 30 de Enero de 2013 (http://www.marcha.org.ar/).-


La familia Castillo es una sociedad anónima que se hizo cargo de la Clínica desde sus inicios. El sanatorio Perpetuo Socorro atendía pacientes de la obra social PAMI, lo que da cuenta de la importancia de los cuidados médicos que allí se realizaban. La planta de trabajadores llegaba a unos 70, o al menos ese es el número de trabajadores que estarían por perder su trabajo. Los más de 60 pacientes que estaban internados ya fueron evacuados a otros nosocomios.

La familia Carrizo, según relata una de las trabajadoras despedidas, ahora está representada por los hijos de quién había fundado la clínica y manejaba la clínica con dos socios, a quienes acusan de haberlos estafado. A partir de esto la clínica comenzó a atravesar una fuerte crisis -donde ya habían comenzado a adeudar sueldos, aumentos, vacaciones, a los trabajadores- y los dueños piden una capitalización a PAMI. "La Clínica recibió arriba de $700.000, pero al venir con descuentos propios de gastos de la clínica se cobró aproximadamente la mitad, de los cuáles los dueños repartieron $2000 a cada empleados (entre unos 50 y 60) y el resto se lo quedaron para ellos", relata Débora una trabajadora del sanatorio.

Los trabajadores explican que después de esta situación quisieron comenzar con el vaciamiento de la clínica, "la semana pasada vino la hija de él (una de las dueñas), a llevarse los equipos de odontología, porque ella es odontóloga. A insultarnos porque no le dejábamos sacar más cosas", comentó Elsa Basualdo, trabajadora histórica del establecimiento. El grupo de trabajadores que resisten el abandono del Perpetuo Socorro se hizo cargo de echar al fletero y de resguardar bajo "siete llaves" el material más caro para que no puedan llevárselo, pues su intención es reanudar cuánto antes el trabajo en el sanatorio. "Nosotros queremos que venga alguien y ponga la plata y podamos hacer funcionar de nuevo la clínica", señaló Elsa.

Por su parte PAMI se comunicó con los trabajadores y les ofreció no sacarles las cápitas (es decir los pagos por los pacientes que atiendan día a día) durante el mes que viene. En un caso así ellos deberían buscar algún tipo de representación legal para funcionar. Igualmente, en diálogo con Elsa y con otros trabajadores, ellos manifestaron la necesidad de que alguien llegue con el capital necesario para hacer funcionar el sanatorio, ya que sólo con la capitalización (el pago por los cada uno de los pacientes) no sería suficiente.

La situación judicial es compleja, la quiebra está presentada al 1ro de febrero de este año, pero por la feria judicial el juez aún no dicto la misma. En ese sentido el FATSA, el gremio de los trabajadores de la sanidad, estaría ayudando en la cuestión legal para que decenas de trabajadores no queden en la calle. La situación se estaría definiendo esta semana en la justicia. "El sindicato va a venir con el Ministerio a ver si la gente tiene las declaraciones hechas y nosotros cobrar el cobro de desempleo. Lo único que necesitamos es un milagro de Dios y que alguien ponga plata", comentó Elsa a Marcha.



Quiebras en la salud



Con la crisis que vivió el país hace un poco más de 10 años, el sector de la salud -entre tanto otros- fue uno de los más vapuleados por la situación económica y dejó a miles de trabajadores en la calle. El sistema de salud privada que se desarrolló en gran manera gracias al desmantelamiento de la salud pública, tuvo su límite entre los años 2001 y 2002, donde se vieron expresiones similares a las que viven ahora los trabajadores del Santísima Trinidad.

El caso paradigmático fue la recuperación del edificio de la Clínica Portuguesa en el barrio de Flores. Sucedió por septiembre del 2002 en un intento por reimpulsar el movimiento de asambleas populares y empresas recuperadas, se decidió tomar el predio -que estaba casi intacto- y hacerlo funcionar autogestivamente. El movimiento acarreó cientos de militantes y de trabajadores de la salud, que se sumaron al proyecto de construcción de este hospital.

El predio donde ahora funciona la Asamblea de Flores, ubicado en Gavilán 537, fue una primera aproximación a la autoorganiación en el ámbito de la salud, más allá de los resultados que haya tenido, marcó un antes y un después.

Hoy existen proyectos autogestionados o cooperativas de salud funcionando. Tal es el caso del Sanatorio ADOS de La Rioja, recuperado en 2010, y el Hospital Israelita, recuperado por sus trabajadores en 2004 después de su quiebra.

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