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Hacia la Asamblea Universitaria de la UNC/Una lectura desde el Movimiento Estudiantil
Por Fuente: Desde Abajo - publica((i)) -
Tuesday, Mar. 19, 2013 at 9:33 PM
Un nuevo rectorado será elegido por la Asamblea
Universitaria a realizarse el 23 de marzo de este año. La
Asamblea Universitaria se compone de todxs lxs miembrxs de los Consejos
Directivos de las 13 Facultades de la UNC, más lxs Decanxs de cada
Facultad. Esto da un total de 247 miembrxs, en una comunidad de más de
120mil universitarixs. La Asamblea Universitaria reproduce a su interior la
misma desigualdad que los órganos de co-gobierno universitario, en
dónde lxs distintos miembrxs tenemos derechos políticos desiguales, de
acuerdo al claustro al que pertenecemos. Lxs docentes
poseen más del 50% de lxs representantes, lo que no es proporcional a
la composición real de la comunidad universitaria. A su vez, la única
forma de participación en esta decisión es a través de nuestros
representantes, elegidxs un año atrás, sin que hayan presentado ninguna
propuesta con respecto a esta coyuntura y sin bajar a las bases la
discusión y de ese modo llevar un voto que refleje una decisión
democráticamente definida con sus compañerxs. Lxs estudiantes que participamos en Desde Abajo y a la
Izquierda, creemos que este escenario nos obliga a realizar balances
estructurales sobre el gobierno universitario, en lugar de ser
meros comentaristas de disputas de poder coyunturales, mientras nos
vemos excluidos de las decisiones trascendentes de nuestra Universidad.
Para hacerlo, debemos comprender cuál es el proyecto histórico en el
que se inscribe hoy la UNC, cómo impacta eso en las mayorías
universitarias y en la sociedad, y cuál es el proyecto que pretendemos
construir desde el movimiento estudiantil. A continuación, compartimos
una lectura sobre el gobierno universitario saliente, que nos permita
dar pasos seguros en los desafíos que esperan más acá y más allá de la
Asamblea Universitaria del 23 de Marzo. Hay que admitir que la promesa más pretenciosa de Cambio
Universitario sobre este ámbito no iba mucho más lejos: la elección
directa de autoridades unipersonales. El mecanismo de elección
de Rectores y Decanos actualmente es indirecto, a través del voto de
los consejeros directivos. Esta promesa, que no se cumplió,
deja mucho que desear: mantiene el voto ponderado, en el que
el voto de los distintos miembros de la comunidad universitaria tiene
valores diferenciales y desproporcionados (el voto de estudiantes y
no-docentes vale varias veces menos que el de lxs docentes). Esta
forma de elección directa ponderada, no llega ni siquiera a emular las
elecciones estatales, en las que el voto de cualquier ciudadano vale lo
mismo, sea cual sea su condición académica, social o laboral.
La Universidad se erige así en modelo de gobierno elitista, basado en
la jerarquía del saber académico y la superioridad del trabajo
intelectual sobre el trabajo manual, algo que la mayoría de nosotrxs no
estaríamos dispuestos a admitir en el gobierno de nuestra sociedad. Por
otro lado, la elección directa ponderada pone el énfasis en las
autoridades unipersonales y no en la democratización del cogobierno
universitario, donde lxs estudiantes seguimos teniendo una
representación minoritaria, a pesar de ser el claustro mayoritario y el
sujeto de transformación histórico de la Educación Superior. Algunos datos estadísticos. En los diez años
comprendidos entre 2001 y 2011, la matricula estudiantil en la
UNC disminuyó de 113.651 a 107.364 estudiantes regulares,
siendo 2008 el año de menor cantidad de estudiantes de la década.
Aumentó la cantidad de nuevos inscriptos, pero esto no se reflejó en la
cantidad de egresos, que no varió significativamente en diez años: en
el periodo comprendido entre 2007 y 2011, la tasa de egresos en
la UNC registró un decrecimiento de alrededor del 1%. Así, la
relación entre nuevos ingresantes y cantidad de egresos es la peor
desde 2001 y está muy por debajo del promedio histórico de la UNC en
este punto. El contraste entre el aumento anual de la cantidad de
ingresantes, la sensible disminución de la matrícula y la baja cantidad
de egresos, sólo puede explicarse por una mayor deserción estudiantil.
Esto se confirma cuando observamos que desde 2007 la
permanencia durante el primer año de la carrera disminuyó del 73% al 64%.
Según estos datos, no hay mejoras en la permanencia y el egreso de lxs
estudiantes, e incluso se registra un empeoramiento de estas variables
desde el Rectorado de Carolina Scotto. El Comedor Universitario. Otra de las políticas que
suelen destacarse desde el oficialismo es la gestión del Comedor.
Durante el gobierno de Cambio Universitario, la política más
significativa en esta materia fue congelar el costo de las
raciones en $4 y aumentar levemente la cantidad de raciones, que
actualmente alcanza las 2700 diarias. Esta cantidad de
raciones, representa apenas el 2% del total de estudiantes,
y contrasta con los datos del informe de calidad de vida estudiantil
realizado por la UNC en 2009, donde se revela que el 22% de
lxs estudiantes universitarixs no dispone de los fondos necesarios para
alimentarse adecuadamente y sostener su carrera universitaria.
A su vez, el aumento paulatino de las raciones se realizó a costa de la
precarización laboral de lxs trabajadorxs: mientras que en
2006 el Comedor se sostenía con 87 trabajadores en planta permanente y
39 contratados, en 2012 se sostuvo con 37 trabajadorxs en planta
permanente y 16 contratadxs. Recientemente, la lucha de
lxs no-docentes agremiadxs en ATE, que incluyó paro, ollas populares y
movilizaciones al Consejo Superior, logró el pase a planta de más
trabajadorxs. Por último, cabe señalar que la situación del Comedor Universitario
está muy lejos de equiparar su situación previa a la última dictadura
militar, en que se producían 11mil raciones diarias y había doble turno
(actualmente sólo se cubre el almuerzo). Suele sostenerse que el costo
del Comedor representa una gran erogación para el presupuesto, pero lo
cierto es que sólo se destina el 2% de los fondos anuales de
la UNC. Entendemos que esto refleja un orden de prioridades
del actual gobierno universitario alejado de las problemáticas
estudiantiles y de aquellas políticas de mayor impacto material en el
ingreso, la permanencia y el egreso de nuestras carreras. El cupo en Medicina. Una de las políticas más
abiertamente mercantilistas y privatizadoras de la UNC es el cupo al
ingreso de la carrera de medicina. Símbolo del neoliberalismo en la
Universidad, el cupo tomó su actual configuración en 2005, siguiendo
los lineamientos establecidos por la Comisión Nacional de Evaluación y
Acreditación Universitaria (CONEAU) dependiente del Ministerio de
Educación de la Nación. La restricción al cupo es un gran negociado para institutos privados
– ligados económicamente a camarillas docentes - que cobran altísimas
cuotas a quienes quieren ingresar a la carrera, estableciendo una
barrera infranqueable entre quienes disponen de los recursos económicos
para acceder a estos cursos y quienes no. El beneficio privado es mayor
si se considera que, mientras se restringe el ingreso a la
Educación Pública, el Gobierno Nacional aprueba la creación de
institutos privados de educación superior, como el nuevo
"Instituto Universitario de Ciencias Biomédicas de Córdoba". La
contradicción aparente entre restringir drásticamente la matricula de
de medicina de la UNC y habilitar un nuevo instituto privado de
formación superior en ciencias médicas no es más que la aplicación lisa
y llana del mandato histórico de privatizar la Educación Superior en
Argentina. El paradigma de Educación Superior. Mediante las acreditaciones se avanza en el recorte de los
contenidos del ciclo de grado, que pasan a posgrado, en la mayoría de
los casos pagos, y diversificados en función de los requerimientos del
mercado. Así, el perfil de graduado está cada vez más adaptado
a las necesidades de grandes empresas, ell gobierno de turno y los
organismos internacionales de crédito, que no en vano diseñaron la Ley
de Educación Superior vigente. Para legitimar esta dirección,
el kirchnerismo universitario pone en discusión el concepto de
Autonomía Universitaria, que hace diez años defendían, argumentando que
“habiendo un gobierno que representa los intereses nacionales y
populares, la Universidad debe ponerse en sintonía con las
orientaciones estratégicas del modelo de país en marcha”, justificando
así lo que no pueden defender: que la Universidad no es autónoma del
puñado de empresas que tienen las riendas de la economía nacional. La creación del Polo Científico-Tecnológico en la UNC es
paradigmático para este asunto. El Polo, puesto en marcha en 2011 es,
nada más y nada menos, que la instalación física de empresas privadas
en Ciudad Universitaria, fomentando que lxs investigadores de nuestra
Universidad tengan participación en el sector privado, ya sea
trabajando para estas empresas como convirtiéndose en sus accionistas.
Esta iniciativa se explica en las propias palabras de la Presidenta
Cristina Fernandez: “La alianza estratégica entre economía,
conocimiento y educación, nos tiene que preparar fundamentalmente para
lo que ya se dio en muchos países desarrollados, que es la articulación
entre el sector universitario público, privado y el sector empresarial
económico”. La Universidad al servicio de las empresas no es un
fantasma para agitar conciencias jóvenes, es la Universidad que tenemos
y que defienden los grupos que gobiernan la UNC hoy, más allá de sus
colores políticos. Si queremos una universidad al servicio de la emancipación de
nuestro pueblo debemos luchar para que deje de seguir los dictados de
los gobiernos y los grupos de poder que se encargan de explotarlo y
oprimirlo. Por eso rechazamos cualquier forma de injerencia
gubernamental y empresarial en la definición de los planes de estudio,
las líneas de investigación y las decisiones políticas de nuestra
universidad. Carrera docente. Nosotrxs creemos que una política emancipatoria en la Universidad
debe romper con los circuitos cerrados del poder y la información;
afirmando el derecho de todxs y cada unx de nosotrxs a participar
activamente en la vida académica y política de la Universidad, para lo
cual es indispensable garantizar el derecho de lxs
trabajadorxs a concursos públicos, limpios y transparentes; a un
trabajo no precarizado, bien remunerado y sin persecución política. Espacios Públicos y Medios de Comunicación. *Los datos estadísticos pueden contrastarse en el Anuario
Estadístico de la UNC 2011, el último publicado: http://www.unc.edu.ar/estudios/programas-saa/estadisticas/anuarios
Sintomático de ello es que, estando a pocos días de un hecho relevante
para el conjunto de lxs universitarixs, la mayoría desconoce
cuáles son las opciones en juego, y los sectores que disputan la
elección no muestran ni dan a conocer públicamente su proyecto de
Universidad, ni las medidas que llevaran adelante para
cumplirlo.
Ya han pasado seis años desde que Cambio Universitario, una coalición
entre radicales (Franja Morada) y kirchneristas (La Bisagra), conquistó
con la candidatura de Carolina Scotto el Rectorado de la Casa de Trejo.
Esta coalición, que asume en el 2007 bajo la consigna de revertir las
políticas neoliberales impulsadas por el menemismo, se ha roto
recientemente, por no llegar a un acuerdo en la distribución de los
cargos del próximo rectorado. Ambas fracciones son las más
poderosas de la UNC, y las alianzas en la Asamblea Universitaria se
desarrollaran en torno a los candidatos de uno y otro espacio político.
Ninguno de los dos sectores posee en la actualidad votos propios
suficientes para ganar la elección (124), por lo que sus marcos de
alianzas van a negociarse hasta último momento. El kirchnerismo, que
candidatea al Decano de Famaf Tamarit, tiene 85 votos propios, mientras
que la Franja Morada, que candidatea a Blanco, Decano de Cs.
Económicas, tendría poco más de 50. Sin embargo, Franja Morada contaría
con el apoyo de Irico en Medicina, la ex Decana de Psicología, Patricia
Altamirano, y Gabriel Tavella, Decano de Cs. Exactas, aportando muchos
votos de sus respectivas Facultades. El scottismo, por su parte,
estaría negociando un acuerdo de última hora con el ex Decano de
Derecho, el menemista Yanzi, un viejo adversario del progresismo
universitario.
El co-gobierno y la democratización de la UNC.
Una de las consignas más importantes que levantó Cambio Universitario
fue la democratización política de la UNC. A seis años de gobierno
scottista, apenas se realizaron algunas reformas de bajo impacto:
la ampliación de los derechos electorales de docentes interinos; la
limitación de la re-elección de autoridades unipersonales; la
prohibición de que una misma persona ocupe cargos de gestión que
mantienen una relación jerárquica entre sí; y la sincronización de las
elecciones institucionales en las distintas facultades.
No hace falta decir el corto alcance de estas reformas reglamentarias:
la estructura de gobierno de la universidad se mantiene intacta,
una versión de la democracia universitaria menos igualitaria que el
co-gobierno conquistado por la Reforma de 1918.
Suele atribuirse esta falta de avances en la democratización a las
dificultades de consensuar medidas en la coalición gobernante, por lo
que su reciente ruptura abriría nuevos horizontes. Creemos que esto no
es así y que hay acuerdo entre ambos sectores en mantener el
actual régimen de poder en la Universidad. Una de las señales más
contundentes en este sentido es la imposibilidad de lxs estudiantes de
elegir mediante el voto directo a la Secretaría de Asuntos
Estudiantiles (SAE). Esta prohibición, impulsada desde el seno
del scottismo, fue la respuesta del Rectorado para impedir la elección
directa de la SAE en la FFyH, una medida aprobada por el Consejo
Directivo de nuestra Facultad en 2009 – con la oposición de Cambio
Universitario - y frenada inmediatamente después en el Consejo
Superior. Este gesto conservador y antidemocrático del scottismo, es
absolutamente coherente con su estrategia de poder hacia el
estudiantado, que reside fundamentalmente en tender a la sustitución de
los Centros de Estudiantes por las Secretarías de Asuntos
Estudiantiles, un invento de la dictadura que, aggiornado a
los nuevos tiempos, preserva su sentido original hasta el día de hoy.
La última medida respecto a las estructuras de gobierno en la UNC
confirma la poca voluntad de dar pasos progresivos hacia un gobierno
más democrático y participativo: Lxs estudiantes de la carrera
de Antropología han impulsado que el Consejo de la carrera, en proceso
de conformación, tenga una representación igualitaria entre estudiantes
y docentes. La respuesta de la UNC fue que esto atenta contra el
espíritu que prima en el gobierno de nuestra Casa de Estudios, donde
los docentes tienen siempre la mayoría de la representación.
Hay un espíritu en nuestra Universidad, y le teme al estudiantado.
Inclusión, permanencia y egreso.
Una de las razones que condujeron a muchas organizaciones
estudiantiles independientes a apoyar el primer rectorado de Carolina
Scotto, en 2007, fue su compromiso con avanzar en políticas de
inclusión, permanencia y egreso, y garantizar la gratuidad en el
ingreso a la educación superior.
Los aranceles. Una de las medidas con mayor
repercusión política en materia de gratuidad de la UNC fue la
eliminación de la contribución estudiantil, conocida como la 5/90, que
permitía a las Facultades cobrar aranceles a lxs estudiantes. Parte del
programa estudiantil que Scotto prometió en su primera candidatura fue
la eliminación de estas tasas. Durante el primer mandato de
Cambio Universitario el cobro de la contribución siguió vigente en
varias Facultades, entre ellas las de mayor matrícula estudiantil.
Recién en su segundo mandato resolvió derogar la 5/90, pero
simultáneamente aprobó un nuevo sistema de aportes voluntarios, que
amplió el alcance de las contribuciones a docentes, no-docentes y
egresados, y habilitó un canal reglamentado para que las Facultades
reciban dinero de personas externas a la UNC. Más allá de las
intepretaciones sobre la nueva reglamentación, en los hechos las
Facultades que cobraban aranceles antes de la derogación de la 5/90
continúan haciéndolo en la actualidad, mediante nuevos
mecanismos, que dificultan el ingreso de muchxs compañerxs y garantizan
fondos de uso discrecional para las cajas de lxs Decanxs. Una medida
para la tribuna que no modificó las prácticas privatistas y corruptas
de los Decanatos y que no mejoró las condiciones reales de ingreso y
permanencia de lxs estudiantes en la UNC.
Estas medidas fueron parte de una batería de acciones
tendientes a disminuir drásticamente la cantidad de estudiantes
regulares en la Facultad de Medicina en la última década. De
1650 estudiantes que ingresaban en 2002, se redujo el ingreso a 600
estudiantes.
Scotto se comprometió en su primer candidatura a terminar con esta
expresión del neoliberalismo en la UNC. Seis años después, el
cupo sigue existiendo, y la posición del oficialismo viró a un apoyo
explícito de la restricción al ingreso en medicina.
Recientemente, la propia Carolina Scotto impulsó una declaración
conjunta de todxs lxs Decanxs defendiendo la potestad de las Facultades
de decidir el tipo de ingreso a las carreras de grado de la UNC, dando
a entender incluso que no se opondrían a restricciones del
mismo tipo en otras Unidades Académicas, si así lo resolvieran sus
Consejos Directivos.
Cuando el Cambio Universitario asumió el rectorado de la UNC,
dejábamos atrás un rectorado menemista, pero no así el paradigma
neoliberal de Educación Superior que aún prima en nuestra Universidad.
En los años de gobierno de Carolina Scotto, en sintonía con la política
impulsada desde el Gobierno Nacional, se acreditaron ante la CONEAU más
carreras que durante toda la década anterior. El ejemplo del
cupo de medicina no deja lugar a dudas del tipo de Universidad que
impulsa la CONEAU mediante las acreditaciones de nuestras carreras
La LES, y en particular la CONEAU, atentan contra el principio de
autonomía universitaria. Su intervención en las universidades pretende
“controlar el acceso a la educación superior a cargo del Estado en
función de criterios de selección eficientes y equitativos; crear un
ambiente propicio para las instituciones privadas; establecer o
aumentar la participación de los estudiantes en el costo de su
educación y otras medidas de diversificación financiera.”
Cambio Universitario no se movió ni un tantico así de este modelo
educativo mercantilista. Además de las acreditaciones compulsivas de
carreras, que han tenido un evidente impacto en la matrícula
estudiantil, debemos atender a la orientación social que este proyecto
de Universidad imprime sobre nuestra formación y el conocimiento que
producimos.
Tal vez uno de los aspectos más destacados de la gestión de
Scotto ha sido la implementación de la carrera docente en la
UNC, que permitió concursar muchos cargos docentes que hasta entonces
eran cubiertos de manera interina, sin ningún tipo de estabilidad
laboral. Actualmente, el porcentaje de docentes concursados en
la UNC es del 65%, un 15% más que en 2008. A la par, hubo un
aumento de la planta docente, que pasó de 7986 docentes en
2001 a 9156 en 2011.
Esto implica, a su vez, que el 35% de los trabajadores docentes
de la UNC aún no tiene estabilidad laboral, algunos con más de 20 años
de antigüedad, aunque la normativa establece que no puede
haber designaciones interinas por más de dos años. A su vez, el
aumento de la planta docente no fue acompañado de una mejora de los
cargos en términos proporcionales. En 2007, de un total de 8326 cargos,
4421 eran simples, los de menor carga horaria y los peor remunerados.
En 2011, de 9156 cargos, 4826 eran simples, de modo que no se
modificó la proporción de cargos simples sobre el total, que se mantuvo
en el 53%. Un docente con cargo titular simple cobra al básico
$1700, con cargo adjunto simple $1400 y con cargo asistente simple
$1100. Esos son los salarios básicos de más de la mitad de nuestros
docentes, que dependen de otros trabajos fuera de la Universidad para
poder vivir, enseñar e investigar.
Hay que señalar también que, aunque los concursos públicos son
indispensables para una política que garantice la estabilidad laboral y
la calidad académica de nuestra formación, aún hoy estudiantes,
egresadxs, docentes y no-docentes no tenemos garantías de
concursos limpios y transparentes, ya que las autoridades
utilizan los cargos docentes y no-docentes para clientelismo
político, ubicando a “los suyos”, aún cuando ello requiera echar
mano a mecanismos ilegales y violar derechos laborales elementales. Los
grupos políticos en disputa por el Rectorado lo hacen en sus propias
Facultades, modificando el resultado de concursos públicos para
beneficiar a amigos y perjudicar a opositores.
La democratización de la UNC no es algo que ataña sólo a la forma de
gobierno. Nuestra Universidad es un espacio público que habitamos y
disputamos, en términos materiales y simbólicos. La UNC, además, cuenta
con un sistema de medios radiales y televisivos (SRT) desde los cuales
se construye un relato acerca de la situación Universitaria, y de la
realidad local y nacional. Por lo tanto, el espacio público y
los medios de comunicación forman parte esencial de la cuestión
universitaria, así como de nuestra relación con el conjunto de la
sociedad.
En lo que respecta a los espacios públicos, los últimos años hemos sido
testigxs de una creciente restricción. Mientras se embellecieron plazas
y edificios, los mecanismos de control y exclusión sobre el espacio
público universitario son cada vez más directos e invasivos. La
presencia de agentes de la Policía Provincial en Ciudad Universitaria,
que se ha integrado al paisaje cotidiano, data de 2008, por un convenio
firmado entre el Rectorado y la Policía de la Provincia, y constituye
una novedad no sólo en la UNC, sino que se destaca como una excepción
al común de la Universidades Nacionales del país. Las
detenciones de estudiantes, las requisas por portación de rostro en
Ciudad Universitaria, la suspensión de actividades culturales, fiestas
y reuniones, se han extendido sobre todo el territorio universitario.
El acuerdo del Rectorado de Carolina Scotto con el Gobierno Provincial
de Schiaretti de integrar territorialmente la UNC a Nueva Córdoba,
saturada de agentes policiales, ha profundizado esta política de
control sobre el acceso y la circulación dentro Ciudad
Universitaria.
Respecto a los medios de comunicación, si bien se ha mejorado el
equipamiento de los SRT, estos no se han integrado ni son expresión de
los procesos académicos y políticos de la Universidad. En cambio,
han sido utilizados ante todo como la maquinaria ideológica del
kirchnerismo en Córdoba; perder este control sobre los SRT es lo que
más preocupa a algunos en esta elección rectoral. Creemos
que, para recuperar realmente los SRT, deben dejar de ser el
botín de guerra del oficialismo universitario, sea cual sea
su pertenencia partidaria; estar a disposición de todxs lxs
estudiantes de la UNC que hoy necesitan y no tienen acceso a
esos recursos técnicos para aprender y divulgar su producción;
además de interpelar y convocar a los movimientos sociales y los medios
comunitarios a construir conjuntamente un sistema de medios
plural, alternativo a los monopolios mediáticos e independiente de los
poderes políticos y económicos.
EN LA CONSTRUCCIÓN DE UNA UNIVERSIDAD DIFERENTE
El balance de estos años de gobierno de Cambio Universitario, pero
también la lucha que hemos desarrollado desde las bases en este
periodo, enfrentando a las fracciones gobernantes en la consecución de
nuestras reivindicaciones, son elementos fundamentales para comprender,
en el marco de nuestro proyecto de Universidad, los desafíos que
esperan y las estrategias de construcción contrahegemónica que nos
conducirán mejor en la transformación que queremos. En ese marco, nos
proponemos debatir fraternalmente con nuestrxs compañerxs cómo
intervenir en la Asamblea Universitaria, evaluar colectivamente qué
intereses representan los candidatos en pugna y en qué medida sus
proyectos pueden o no beneficiar al movimiento estudiantil en la
búsqueda de esa Universidad que estamos debatiendo y construyendo en
nuestros espacios de base, en nuestras luchas reivindicativas y en el
encuentro con las organizaciones políticas y sociales del campo popular.
Por esa razón convocamos a todxs lxs estudiantes no agrupados de la UNC
que se sienten interpeladxs por nuestra apuesta militante, a participar
del Plenario Abierto de Desde Abajo y a la Izquierda, este sábado 15/03
a las 16hs. en el Pabellón Brujas, para responder colectivamente a
estos interrogantes y actualizar aquí y ahora el tipo de debates y
decisiones que nos permitirán construir una Universidad para la
emancipación, desde abajo, con toda la fuerza transformadora de nuestra
juventud.