Julio López
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La sojización de Uruguay
Por reenvío red eco alternativo - Saturday, Apr. 13, 2013 at 11:35 AM

Durante los últimos diez años el precio internacional de la soja viene siendo favorable para aquellos países productores del grano, debido principalmente a la demanda de China por materias primas. Existieron también otros factores como la preparación de raciones para ganadería intensiva (en el caso europeo, debido al virus de la vaca loca se sustituyó la proteína animal por la vegetal, proveniente de la soja) y la producción de agro-combustibles.

(Ángela Garofali Patrón – Rebelión) Uruguay - El precio de la oleaginosa ha crecido 2,5 veces en 10 años. En marzo de 2003 era de 210 U$S/ton (en promedio) y en febrero de 2013 se ubicó en 536 U$S/ton (en promedio). Esta realidad no escapa al Uruguay, donde los productores apuestan cada vez más a la soja y, consecuentemente, le asignan más hectáreas a su cultivo, el cual pasó de ocupar 10.000 ha en la zafra 2002/03 a 865.000 ha en la zafra 2010/11.
Las exportaciones uruguayas de soja en el 2001 eran insignificantes: representaban apenas un 0,1% del total. Posteriormente se van tornando más importantes: en 2005 significan el 3% del total de las exportaciones, en 2008 el 5,5% y en 2010 el 10,5%. Ya para 2012 las exportaciones de soja representaron el 16% del total, alcanzando en ese año a las tradicionales exportaciones de carne bovina (y aquí se considera la suma de carne bovina congelada y carne bovina fresca o refrigerada), que también representó un 16%.
Podemos alegar entonces que la soja se afirma como principal producto de exportación, desplazando a la carne bovina a un segundo lugar. En 2005 la suma de las exportaciones de carne bovina (congelada y fresca) representó un 21,8% del total, en 2008 cayó para un 20% y en 2012 para un 16%. Es decir, la producción de carne cae -relativamente- en detrimento de la soja.
El principal destino de estos dos productos “uruguayos” de exportación es China, que representa el 42% de las compras de soja y el 47% de las de carne bovina. Y pongo uruguayos entre comillas porque si bien son producidos en territorio nacional, sabemos en ambos casos que la propiedad de las empresas productoras no son necesariamente orientales (lo cual implica la consecuente remesa de lucros a las casas matrices). En el caso de las carnes es evidente la propiedad de algunos frigoríficos en manos de brasileros y en el caso de la soja la presencia de varios productores argentinos, que utilizan nuestro territorio como extensión de los suyos.
También existen otros datos que incomodan. Veamos.
En 2012 se importaron U$S 12.5 millones de soja para siembra, U$S 31.2 millones en herbicida a base de glifosato (entiéndase agrotóxico), U$S 25.8 millones de otros herbicidas, U$S 21.1 millones de urea y U$S 14.8 millones de otros abonos minerales nitrogenados. Pues bien, acá sumamos unos U$S 105.4 millones... Un número relevante para una economía como la uruguaya.
Pero eso no es lo más sorprendente. Lo que sí es sorprendente son los valores de las importaciones de aceite de soja, sea en bruto o refinado. En 2012 se importaron U$S 11 millones de aceite de soja en bruto (en 2011 fue de U$S 13.3 millones y en 2010 de U$S 8.9 millones), sumado a U$S 12 millones de aceite de soja refinado (que en 2011 sumaron U$S 13.6 millones, y en 2010 U$S 10.7 millones).
A que quiero llegar con todo esto? A que da la impresión de que se está apostando a un modelo de re-primarización de la economía, donde el peso de los productos primarios como la soja, la carne y el arroz es considerable. Evidentemente la semejante producción de soja no está abasteciendo al mercado interno, ya que se gastan varios millones de divisas en comprar el aceite de soja desde los países vecinos, en particular Brasil (que también es gran productor sojero). Y para colmo, importamos además la semilla de la oleaginosa, porque como es bien conocido, de las cosechas no se “recicla” nada, a excepción de algunas veces que son destinadas a la “investigación” a centros de pesquisa norteamericanos. Queda claro que un modelo como el sojero solo genera dependencia de casi todos los insumos para el proceso productivo (semillas, herbicidas, maquinaria), además de provocar daños irreversibles sobre la sociedad y el medio ambiente.
Nota completa: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=166397&titular=la-tierrita-de-los-orientales-


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