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Otra vez la violencia permitió la aprobación de una ley a favor del fracking
Por reenvío red eco alternativo - Saturday, Sep. 21, 2013 at 9:49 AM

La Legislatura de Chubut sancionó el acuerdo de la provincia con la empresa Tecpetrol, que pertenece al Grupo Techint, para la exploración de hidrocarburos no convencionales. Vecinos e integrantes de las Asambleas Ciudadanas fueron desalojados violentamente del recinto por la policía y una patota del Sindicato de Petroleros Privados a la que sí se le permitió presenciar el debate. Red Eco Alternativo.

(Red Eco) Chubut – Esta tarde un grupo de vecinos y asambleístas se había acercado a la Legislatura para manifestarse pacíficamente en contra del proyecto de ley que avala el contrato que otorga a Tecpetrol la extensión hasta el 2027 de la concesión de los yacimientos "El Tordillo", "La Tapera" y "Puesto Quiroga". En medio del tratamiento del proyecto, las autoridades de la Legislatura provincial dieron la orden a la policía para que se desaloje del recinto a vecinos y miembros de las Asambleas Ciudadanas, advirtiéndoles que si no se iban la patota del Sindicato de Petroleros Privados “los iba a cagar a palos”. Las agresiones se produjeron tanto dentro como fuera de la Legislatura. Como es habitual en estos casos, algunos medios locales afirmaron que “los ambientalistas fueron desalojados por causar disturbios en la sesión”. Luego del violento desalojo, los ciudadanos se refugiaron en el Superior Tribunal de Justicia, donde permanecieron rodeados por el GEOP (Grupo Especial de Operaciones Policiales). Entre los ciudadanos agredidos está César Antillanca, candidato a diputado nacional del Frente Unidad Sur y papá de Julián, por cuyo asesinato se acusa a efectivos provinciales.
Ya sin la presencia de los manifestantes, la ley que prevé la ampliación de las concesiones para fractura hidráulica en el Área de Trébol en Comodoro Rivadavia fue finalmente aprobada gracias a los 23 votos a favor de catorce legisladores del Frente para la Victoria, seis de Modelo Chubut de Mario Das Neves, y tres del PJ. En contra de la norma votaron Anselmo Montes (Partido Socialista Auténtico, enrolado en el FpV) y Oscar Petersen (Polo Social), mientras que el radical Roberto Risso (UCR) se ausentó del recinto al momento de la votación aunque había manifestado su negativa al acuerdo.
El gobernador de la provincia, Martín Buzzi, calificó la aprobación de esta renegociación como “una gran noticia para los chubutenses”. En tanto, los vecinos y asambleístas denunciaron que la violencia sindical tiene larga historia en la provincia, sobre todo en vinculación con los contratos petroleros.
Hace pocos días, el Foro Ambiental y Social de la Patagonia había expresado su enérgico rechazo a este contrato. Al respecto señalaba: “El contexto en el que se enmarca es el de un país avasallado por las empresas petroleras. Decididamente esto se muestra ante nuestros ojos como una verdad impune e invariable, bajo la utilización de la fuerza pública, como en la provincia de Neuquén, la engañosa y extensa publicidad en los medios masivos o la utilización de las necesidades de la sociedad, cooptándola a través de la distribución de pasantías, la tan manipulada filantropía de sus fundaciones y hasta el ofrecimiento de trabajo para quien sea sujeto de presión funcional al gobierno de turno. Ni hablar de la Responsabilidad Social Empresarial convertida en ordenanza municipal, que se enmarca en un modelo propuesto por y para las grandes empresas, que deben enfrentar la competencia internacional, los daños ambientales, o la falta de cumplimiento con las pequeñas y medianas empresas. De esta manera tanto los sindicatos como los entes que deberían regular a las transnacionales se convierten en socios que reciben parte de sus dádivas, en lugar de plantear en nuestra sociedad no sólo para quién y para qué son los bienes naturales con los que contamos, sino que ni siquiera se plantea su escasez y la necesidad de afrontar nuevos caminos que generen energías menos destructivas. El agua es una de las víctimas de este desarrollo impuesto, ya que los yacimientos que forman parte del contrato firmado por Tecpetrol, el gobernador Martín Buzzi, el ministro de Hidrocarburos Ezequiel Cufré y el presidente de Petrominera Oscar Cretinni están emplazados sobre un acuífero interprovincial que contiene agua apta para consumo humano. El método que extraerá la última gota de petróleo es el modo en que estos gobiernos consideran que nuestra provincia debe ser tratada: la fractura hidráulica masiva, la fractura de nuestro territorio en cientos de parcelas explotadas intensivamente para beneficio de los accionistas y sus cómplices locales, mientras en la actualidad Comodoro se abastece de agua que traslada desde el Senguer a través de un acueducto de casi 200 km”.
Esta tarde, la Legislatura de Chubut avaló este contrato utilizando, una vez más, la violencia y la represión contra quienes se manifestaban en defensa del agua y la vida.

Fuentes: ACTA-CTA / Puerta E / Radio Kalewche / Observatorio Petrolero Sur

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