Julio López
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La Boca. El incendio fue desalojo y el desalojo, asesinato
Por reenvío agencia walsh - Friday, Oct. 25, 2013 at 8:40 AM

(AW) En una sociedad donde vivir es sinónimo de habitar, un desalojo es asesinato. Así lo confirma el incendio del domingo 12 de octubre en el conventillo de Carlos F. Melo 810 - La Boca, que terminó con la vida de 2 chicos y dejó 12 familias en la calle. Pese al intento de los medios de comunicación en responsabilizar por el incendio de las viviendas a una discusión entre vecinxs, es innegable que la tragedia vuelve a enmarcarse bajo la coyuntura habitacional en La Boca, donde acontecieron 12 incendios en los últimos 2 años y lxs vecinos denuncian intenciones de desalojo de al menos 300 familias en 21 conventillos.Ni lxs turistas pueden ser indiferentes al paisaje de exclusión que expone el barrio. Las paredes denuncian la ola de desalojos y frecuentes incendios que vive la población de rentas bajas y fuerte tradición inmigrante que resiste como puede a un proceso de transformación urbanística que los expulsa y criminaliza.

Por: Colectivo Destapiadas

Como eufemismo de la expulsión, el incendio sirve de herramienta violenta al desalojo, a veces intencional y otras indirectamente, a través del abandono por el poder público, con infraestructuras colapsadas.Según Martina Onalies, editora de Sur Capitalino, "solamente 3 conventillos se encuentran en estado de refacción, gracias a la orden judicial que obligó al Gobierno de la Ciudad a avanzar en las obras". Y agrega: "Cada vez que hay un incendio las tierras quedan vacías y sirven para realizar un negocio inmobiliario".

En un escenario de emergencia habitacional que el Gobierno de la Ciudad se niega a declarar, la falta de políticas de acceso a vivienda digna para sectores populares está forzando a muchxs vecinxs de La Boca a desplazarse a zonas muy distantes o a malvivir en albergues, hoteles familiares, viviendas colectivas, ocupaciones ilegales o asentamientos precarios.BARRIO GENTRIFICADOLos proyectos urbanísticos previstos para La Boca, un barrio históricamente identificado con la actividad industrial, han sido planificados y acordados entre autoridades y promotores a espaldas de los vecinxs y las organizaciones sociales, y han creado las condiciones favorables para diseñar un contexto de feroz especulación inmobiliaria y subejecución de presupuesto en el área de vivienda.Grupo Town House patrocina el arte en el barrio.

El Estado se dedica a intervenir en nombre del saneamiento y el progreso para el barrio, pero al mismo tiempo reduce el gasto social y su punto de vista defiende los intereses del poder económico. Las obras de mejoramiento de infraestructura se concentran estratégicamente en zonas cercanas a los polos turístico-culturales de mayor visibilidad como la Usina del Arte y Caminito. La escasa intervención pública en las áreas del barrio alejadas de circuito turístico donde viven únicamente vecinos, ha intensificado la presión sobre los sectores más desfavorecidos.

El Distrito de las Artes, un negocio inmobiliario disfrazado de iniciativa cultural que promete beneficios para el barrio y sus vecinxs, está enfocado a la extensión de beneficios impositivos a grandes empresas del sector cultural, en uno de los últimos barrios de la zona sur aún disponible para especular con el precio del suelo. La pretensión de situar a La Boca como zona de relevancia cultural y turística, permitirá que el proceso de expulsión y desplazamiento de vecinxs se profundice, como también está ocurriendo en barrios como San Telmo y Barracas.

En contacto con vecinxs y agentes locales durante marzo y abril del 2013 realizamos recorridos por las calles del barrio identificando viviendas desocupadas o tapiadas, solares vacíos, viviendas en alquiler o venta, áreas de explotación turística, sedes de organizaciones sociales, zonas donde se observan diversas tácticas de conquista de espacios ociosos y acciones de réplica al proceso de gentrificación en el barrio.Mientras en la Ciudad de Buenos Aires hay 17.000 personas sin techo y no dejan de sucederse desalojos como el que se produjo tras el incendio en la calle Carlos F. Melo; los datos relevados por el colectivo Destapiadas confirman que sólo en La Boca hay al menos 51 viviendas tapiadas y 20 terrenos baldíos. ¿Falta espacio para la vivienda popular?Destapiadas_Boca_8MAY13-A0

Más informaciones sobre este y otros relevamientos:
http://www.facebook.com/destapiadas
http://www.destapiadas.org
http://www.destapiadas.wordpress.com

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