Julio López
está desaparecido
hace 6401 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

La economía argentina en inestable equilibrio
Por Fabiana Arencibia-Red Eco - Friday, Dec. 06, 2013 at 12:14 PM

Inflación, déficit fiscal, escases de dólares, caída de reservas internacionales, deuda, son signos preocupantes de la economía argentina actual. ¿Cuáles son las causas y sus consecuencias? Red Eco Alternativo.

La economía argentin...
equilibrista.jpg, image/jpeg, 188x170

(Fabiana Arencibia-Red Eco) Argentina-  Las respuestas a estas preguntas son abordadas por el economista Claudio Katz, integrante de EDI (Economistas de Izquierda) en sus artículos "La economía desde la izquierda I y II" (1). La síntesis que haremos de sus aspectos esenciales persigue el objetivo de adentrarse en las primeras reflexiones que también formaron parte de diversas notas que hemos publicado en Red Eco. Sin embargo, recomendamos su lectura completa a quienes les interese profundizar en el análisis.

  El por qué de la Inflación

En febrero de este año, afirmábamos en "Inflación y concentración económica" (2) que el problema de fondo de la inflación es la concentración y extranjerización de la actividad productiva y que el capital concentrado no resigna utilidades y opera en la formación de los precios.

También decíamos en ese artículo que la medida tomada por el gobierno de controlar los precios al final de la cadena de comercialización no iba a solucionar los aumentos futuros y que para que la inflación sea contenida es imprescindible que los controles costos-utilidades se concentren donde se inicia su formación: en las grandes empresas oligopólicas.

La culpa de la inflación no es del salario, decíamos en otro de nuestros artículos publicados (3). En él dábamos cuenta, sobre la base de datos oficiales elaborados por el INDEC, que un trabajador produce en Argentina una riqueza dos veces y media mayor al salario que se le paga.

Claudio Katz desmenuza en sus notas, las causas de la inflación como problema acuciante de la economía: “Ya se acumulan seis años con promedios que superan ampliamente la media global o latinoamericana”, afirma. 
Analiza además cómo los economistas del oficialismo buscan las causas del aumento de precios en lo que llaman “puja distributiva”. Esto significa poner a los empresarios (el capital) y a los trabajadores (el trabajo) en igualdad de condiciones en esta disputa. “Los capitalistas aumentan primero los precios y los trabajadores deben atenuar posteriormente ese impacto. Esta inequidad se reforzará con la tendencia a inducir un techo de los salarios en torno al 20% en la negociación de un Pacto Social”, dice. Así, explicar la inflación por la puja salarial significa pensar en una política antiinflacionaria a costa de los salarios.

Entonces, ¿cuáles son las causas de la inflación?

“Inflación por oligopolio” es como la define Katz: “Los capitalistas recurren a la inflación cuando enfrentan obstrucciones a la generación corriente del lucro”. Para sintetizar esta idea podríamos decir que las grandes empresas que manejan la economía aumentan sus precios para no resignar ganancias. La falta de inversión para ampliar su capacidad productiva hace que no puedan satisfacer la demanda y que produciendo 10 unidades busquen ganar como si produjeran las 20 requeridas por el mercado.

Otra de las causas planteadas por el economista es “la preeminencia de una estructura exportadora de alimentos, que encarece el consumo local al compas de la valorización internacional”. Es así que los productos que consumimos en el mercado interno los pagamos al valor que son exportados (contrarrestados de alguna manera con las retenciones que el estado les hace a los exportadores) y quedan sujetos, por tanto, a los vaivenes de esos precios.

Un último elemento que Katz suma al análisis es la creciente inflación en estos dos últimos años provocada ante “la decisión oficial de sostener el consumo a través de una intensa emisión” de moneda.  “Este ritmo de creación de moneda quedó divorciado del respaldo en divisas y del volumen requerido para la producción. Por esta razón se acentuó la depreciación del peso”.

  ¿Y los dólares?

“La corrida hacia el dólar es la arista más explosiva de la coyuntura actual”, afirma Katz. El dólar pasó en dos años de 4 a más de 6 pesos y en el mercado paralelo ronda los 10. “El gobierno ha intentado contrarrestar esta demanda vendiendo reservas, pero generó una hemorragia que reduce peligrosamente el respaldo de los pesos en circulación”, analiza el economista.

“Los exportadores retienen las ventas a la espera de un tipo de cambio más elevado (…)  los acaudalados mantienen sus fortunas en el exterior (...). Esta presión por una mega devaluación acentúa los temores de la clase media y el consiguiente acaparamiento de dividas, en un país con gran tenencia de billetes norteamericanos (1.300 por persona frente a 6 en Brasil)”, explica.

El gobierno usa las reservas internacionales para mantener la cotización del dólar oficial en el mercado local (este año el billete norteamericano recuperó su valor con mini devaluaciones del peso que suman un 30%), pagar deuda y cubrir los déficit energético y comercial de la industria.

Este año las reservas internacionales bajaron 11.000 millones de dólares, quedando cercanas a 32.000 (importe que solo alcanzaría para cubrir cinco meses de importaciones).

Cuando en marzo de 2012 se modificó la Carta Orgánica del Banco Central, en nuestro artículo "Reformas y reservas para el modelo", decíamos (4): “ Uno de los puntos relevantes es la facultad del Directorio de determinar el nivel de reservas del Banco Central para lo cual el Gobierno también ha enviado la modificación de la llamada Ley de Convertibilidad, a través de la derogación de los artículos que obligan a que las reservas del Central sean las mismas que la base monetaria (o sea que por cada peso circulante o depositado a la vista en cuentas de entidades financieras, haya un dólar de reserva en el BCRA). Aumentaría entonces la cantidad de reservas de libre disponibilidad que podrá utilizar el Banco Central. El punto está en para qué serán usadas”. Hoy se comprueba lo que entonces analizábamos.

Tal como lo explicábamos en "Re-endeudamiento: de la negación a la realidad" (5), la solución que se plantea el gobierno ante la falta de dólares es el regreso al mercado de capitales, lo que significa volver a endeudamiento externo. Por eso ha decidido: el pago a cinco empresas que tenían juicios contra Argentina en el CIADI (otros 30 reclamos nos esperan en el tribunal del Banco Mundial, además del pago al Club de París), avanzar en su relación con el Fondo Monetario Internacional como condición previa para cerrar acuerdos por litigios y deudas pendientes, y de acercar un acuerdo a los hold-outs reabriendo por tercera vez el canje de deuda. 

Pero también hacen intentos de obtener divisas a través de blanqueos de fondos declarados y no declarados y de otorgar gratificaciones a los grupos locales. “Los  bonos ofrecidos a los exportadores de cereales por 1.000 millones de dólares se suscribirían cerrando los ojos ante viejas denuncias de fraude fiscal. Un privilegio semejante tendrían las empresas petroleras eximidas de pagar el impuesto al cheque. Ambos sectores podrían liquidar las divisas a un tipo de cambio más próximo a la cotización del dólar paralelo”, comenta Katz en su artículo.

Déficit Fiscal


“Como cierta solvencia de las cuentas públicas es la condición de cualquier pedido de crédito, el re-endeudamiento vendrá acompañado de un ajuste fiscal. El superávit primario se extinguió hace rato y el déficit se aproxima al 3% del PBI”, reflexiona el economista de EDI.

¿Cómo solucionar el agujero fiscal? El plan, opina Katz, incluirá podas en los subsidios al transporte y la energía que encarecerán los servicios y por lo tanto afectarán en mayor medida a los sectores de menores ingresos.
Si  bien los que añoran la vuelta al neoliberalismo presionan para que se realice un fuerte recorte en el gasto, es difícil pensar en que el gobierno achicará los costos del asistencialismo. Sin embargo, la inflación seguirá deteriorando el poder adquisitivo tanto de los planes sociales y asignaciones “universales” como de los salarios de trabajadores formales e informales.

Claudio Katz afirma, con razón, que tanto los neoliberales como el gobierno silencian que la salida para generar recursos y palear el déficit es una reforma impositiva progresiva muchas veces prometida. “Esa carencia explica la falta de recursos que afronta el fisco. El Estado ha incrementado su presencia económica sin modificar la estructura de recaudación de los ‘90”, dice. Por eso el gobierno utiliza los fondos del Banco Central y de la ANSeS para financiarse.

Perspectivas

Las estimaciones que el economista realiza para el 2014 hablan de menor crecimiento del PBI,  del freno en el nivel de actividad por falta de inversión, de estancamiento en la creación de puestos de trabajo y la permanencia de niveles de desempleo y alta informalidad laboral, todo en un marco de inflación y devaluación elevadas.

Desde el kirchnerismo se asegura la continuidad de la política económica que se viene desarrollando. “Por eso apuestan a una nueva auto-corrección del modelo, renovando la demandas. En los últimos dos años este aliento (de aumentar la capacidad de consumo) ha requerido incentivos inflacionarios, elevado gasto público y emisión superior al 30%”, afirma Katz.

¿Cuáles son las propuestas?

Katz plantea que la mejor forma de evitar reproducir el discurso neoliberal contra el “intervencionismo”, el “cepo” o la “patota anti-empresaria” es formulando propuestas nítidas:

1-Oposición frontal al ajuste encubierto que promueve la derecha y al ajuste dosificado que intenta el oficialismo. Ambas estrategias se plantean a través de fijar un techo de aumento salarial, con el argumento de facilitar una paulatina reducción de la inflación. En ambos planteos se oculta que esa disminución exige comenzar por el recorte de los beneficios del capital.

2-Defensa del salario real y  su ajuste al nivel de la canasta familiar para enfrentar el argumento que el freno a la escalada de precios es el salario. Defender el salario formal es una forma de limitar el empobrecimiento de los trabajadores precarizados.

3-Frenar primero la escalada de precios para poder actuar luego sobre la inversión, la comercialización, la exportación o la emisión.

4-Fiscalizacion de costos y ganancias para desactivar la espiral inflacionaria. Para ello control de los precios en la ecuación costo-beneficio de quienes son sus formadores originales. Esto requiere intervención popular genuina y aplicar leyes que existen para evitar el desabastecimiento.

5-Control de cambios eficaz que actúe sobre los peces gordos y no sobre el pequeño ahorrista o el viajero.

6-Suspender los pagos de deuda para distinguir los compromisos genuinos de las simples estafas producto de reestructuraciones y canjes de deuda que nunca fueron investigadas en cuanto a su legalidad (excepto el fallo del juez Ballesteros en la causa presentada por Alejandro Olmos).

7-Reforma impositiva progresiva que grave la renta financiera, agro exportadora, el juego, las actividades minero-extractivas, que recomponga los aportes patronales a las cajas de previsión social. Esta sería la principal fuente de recaudación de dinero que necesita el Estado.

8-Control estatal sobre las divisas en cuanto a que sea el Estado el que controle las operaciones que generan y que consumen dólares.

9-Monopolio estatal del comercio exterior para frenar la expansión de la frontera sojera y diversificar las actividades, recuperando la vitalidad de otros cereales y de las economías regionales.

10-Constituir un sistema financiero que permita canalizar el créditos hacia las actividades prioritarias. Nacionalizar los bancos o el control de los depósitos.

Todas estas medidas significan pensar en salidas diferentes a las planteadas desde el gobierno y desde la oposición que añora el regreso a la libertad de mercado. Sin embargo, ambos tienen en común sostener una estructura económico-productiva que permanece sin cambios desde hace décadas. Transitar por otro camino significa abandonar la idea de lo posible para adoptar la de lo necesario para beneficio de las mayorías populares.

Notas: (1) La economía desde la izquierda: coyuntura y ciclo (I)

La economía desde la izquierda: modelo y propuestas (II)

 (2) Inflación y concentración económica

(3) La culpa de la inflación no es del salario

(4) Reformas y reservas para el modelo

 (5) Re-endeudamiento: de la negación a la realidad

agrega un comentario


La única salida parea el fgobierno será la de siempre "DEVALUAR
Por pep - Friday, Dec. 06, 2013 at 10:15 PM

Estaba viendo un programa en canal 26

Siempre se quiere mantener un "equilibrio"

Ni el timido economista de pag 12 respondió

se va a devaluar como se viene haciendo.

Solo quieren que la gente siga gastando sus pesos porque si le quedan 100 pesos el gobierno avala que se haga propaganda de planes 0% de interes cuandoi ya esta incluído o tienen cláusulas de actualización.

No se puede ahorrar . Tamaño insulto para quienes no pueden ni parar la olla. pero si te quedas un peso llo tenes que gastar porquer el ritmo de la inflaciuón asi lo dice.

El nuevo presidente del gabinete solo habla de economía . Poque la anterior presidenta no era una interlocutora válida?

Para que podamos ser "competitivos " tenemos que devaluar como en 2001 eramos un país con sueldos caros.

Como sea la crisis en puerta la pagaremos los trabajadores como esta acostumbrado.

El peronismo una vez mas entregará a la close que dice representar.
van setenta años así, usan a los trabajkdores hasta para desestabilizar los mandan como carne de cañon.

Es hora de que se caiga es enorme CARETA que usan.

No ser puede seguir pisoteando al obrero que los apoya y seguir llenandose la boca:

crearon una burocracia sindical de las que solo se escapa con otra burocracia.

Siguen entregando recursos de la nación a sus grupos económicos amigos. petroleras ,Mineras,Industriales afines, empresarios amigos, industria del JUEGO, obra pública, pauta oficial, planes sociales que forman las cajas de sus punteros.

Se quejan del menemismo y formaron parte de esa fiesta interminables que pagamos todos.

Ahora se sumaron los policias a la repartija no les basta con sus kioscos, la mayoría ilegales. Los peronistas saben muy bien de este tyipo de operaciones. Algunos se quejan porque ahora son victimas.

Se acxerca fin de año y lejos de obtener un bono los trabajadores se van endeudar gracias a este circo consumista.

Festejar es algo que no se puede objetrar pero los comerciantes y demas usureros se estan relamiendo ante el fetín que les espera. deberíamos poder ser inmunes a la incitación de poseer algo que merecemos pero en realidad no necesiitamos!!

agrega un comentario