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20° Jornada Sin Trabajo Digno no hay Pan ni Paz
Por Convocatoria -
Monday, Dec. 23, 2013 at 5:37 PM
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20 MARCHA
Durante la década del 90 enfrentamos la avanzada neoliberal que auguraba la muerte de las rebeldías, de los ideales de justicia y dignidad humana y pretendía que los pueblos aceptaran mansamente el pensamiento único, la economía de mercado y las relaciones carnales con el imperio.
Marchamos para no resignarnos. No bajamos los brazos ante la predica globalizante y su modelo de “apertura” y “desregulación” de la economía, que transformaba regresivamente la estructura social y económica de nuestra región y de nuestro país. Marchamos y alzamos nuestra voz contra este proyecto que conducía a la ruina a un enorme abanico de pequeñas y medianas empresas, y que favorecía los negocios e intereses de los grandes grupos económicos, extranjeros principalmente. Denunciamos la concentración y desnacionalización empresaria, la implementación de políticas fiscales regresivas que gravan el
consumo y no las enormes ganancias de las multinacionales. Nos solidarizamos y compartimos las luchas de los trabajadores que resistieron la pérdida de miles de fuentes de trabajo por la privatización de las empresas públicas, contra la precarización laboral y la implementación de nuevas formas de esclavitud en el trabajo asalariado. Fuimos parte de las Marchas Federales, los paros del cordón y sumamos nuestro protagonismo a la revuelta popular del 2001 señalando a los culpables de la crisis y a los responsables políticos del asesinato de muchos hermanos, en especial, de ocho santafecinos entre los cuales resaltamos al entrañable compañero “Pocho” Lepratti. Impulsamos el debate de los temas de la agenda popular orientados por aquel “que se vayan todos”, llamando a impedir que las desobediencias
populares no fueran castradas de toda perspectiva de cambio político real. Criticamos las manipulaciones y maniobras oficiales para “cauterizar” los caminos abiertos por la rebelión popular y para empujar otra vez a los sectores movilizados a la pasividad mediante el “nos quedamos todos”.
Enfrentamos el plan de persecución y hostigamiento hacia los que luchan. Repudiamos las directivas políticas de judicializar a dirigentes y luchadores populares, movilizándonos y señalando los métodos de intimidación, amenazas y la agresión física contra aquellos. Rechazamos la “propuesta Blumberg” y la criminalización de los pobres porque promueve la manufactura del miedo en la población y justifica la penalización de los oprimidos y no de los causantes del genocidio extractivo y ambiental.
Revelamos el crimen que el hambre comete contra nuestros niños en una región y un país productor de alimentos.
Cuestionamos el fortalecimiento de una nueva estructura productiva exportadora ligada a los recursos naturales y su procesamiento, con muy baja incorporación de valor agregado, alto contenido de materias primas y escasa industrialización. Hemos alertado sobre las nocivas consecuencias que provoca la expansión descontrolada de la soja transgénica reflejadas en la pérdida de soberanía alimentaria, la liquidación práctica de decenas de actividades vinculadas a la producción de alimentos y el consumo popular, la concentración y extranjerización sobre la propiedad de la tierra, y lo más preocupante aún, la desertificación biológica por el alto uso de agro tóxicos que está poniendo en situación de peligro real la supervivencia de nuestra biodiversidad y salud de la
población.
Consideramos que el escenario político abierto por las elecciones del 2003 hasta la fecha -y que algunos definen bajo la consigna de “la década ganada”- aporta datos y realidades que muestran a las claras que lejos de operarse “rupturas” con lo acumulado por el neo-liberalismo, se afirma y consolida una clara línea de profundización de lo ya conocido. Por más que las clases dirigentes se esfuerzan en sobredimensionar el impacto de algunas medidas parciales adoptadas sobre temáticas muy sensibles al sentimiento popular (DDHH, Justicia, integración regional, asignación universal y otras), aparecen los contramensajes
de las conductas políticas concretas de un gobierno pagador serial de la ilegitima deuda externa, preservador de la tasa de ganancia de los poderosos, ajustador con inflación y carestía, perseguidor de los luchadores populares, promotor de la ley antiterrorista y del proyecto X para recrear el control político y social.
Rechazamos también el repicado slogan electoral que pregona “un País normal”. Seis años de gestión del supuesto “gobierno progresista” bastan para tomar debida nota sobre los argumentos de dicha proposición.
No habrá país normal sobre la falacia de “la inserción internacional de la provincia de Santa Fe”. Esta estrategia supone mantener un modelo agrario insustentable que produce forraje, combustibles y enfermedades en lugar de alimentos, la expansión del complejo molinero-oleaginoso y el gerenciamiento de semillas, herbicidas y tecnología en manos de un puñado de multinacionales.
No habrá
país normal con pueblos
despojados de los bienes comunes, con exportación a gran escala y fuga de divisas.
No es normal una provincia con empresas de ganancias obscenas y pueblos empujados a la desesperanza y el empobrecimiento.
No habrá país normal seduciendo a las corporaciones bajo juramento de ser pioneros de la siembra directa en el mundo, tal como lo hiciera un eufórico Bonfatti en Nueva York ante el Concejo de la Américas
No habrá país normal bajo la cultura pragmática y posibilista de “administrar” la miseria congénita del capitalismo con “buenos modales y de modo decente”.
No es un país normal el que exhibe opulentas multinacionales, 4X4 y autos de alta gama, turismo-shopping pasatista y espectaculares “fortalezas” urbanas en contraste con territorios de descarte, degradación y violencia.
Por más que quieran disimular bajo la apariencia de “políticos normales” con discurso de “renovación y modernización”, desnudan sus reales posturas derechistas afirmando sueltos de cuerpo que “en Venezuela votarían por Capriles”.
No habrá país normal conciliando con la expansión del narco negocio. Tampoco tapando el accionar criminal y mafioso de “la santafecina” o siendo permisivos con el blanqueo de grandes masas de dinero ilícito.
Este 28 de Diciembre convocamos a confirmar y fortalecer esta insistencia militante que defendemos desde hace muchos años. Será un nuevo esfuerzo por articular todas y cada una de las expresiones de las resistencias de nuestro pueblo y para abonar la unidad entre aquellos que, desde diversas identidades, hemos sembrado confianza y amistad en el hacer compartido de cara a los más profundos dolores de los oprimidos. Anhelamos que sea un momento para avanzar en acuerdos y caminos que permitan pensar un proyecto de cambio de nuestra sociedad. Ese será el mejor “plan anticrisis”.
La convocatoria no tiene propietarios, pero sí “necesidad y urgencia”. La gravedad del escenario nos interpela. La vida reclama.
Primeras firmas:
Parroquia Santa Catalina de Alejandría
Partido Socialista Autentico
Partido Comunista Revolucionario
Asamblea por la Vida – S. Lorenzo
MULCS (Mov. De Unidad Latinoamericana y el Cambio Social)
Comisión Regional de DD.HH. – S. Lorenzo
Mov. Pro Encuentro de Mujeres – San Lorenzo
Amas de Casa del País
ATE (S. Lorenzo)
Casa de la Memoria – Rosario
Liga Argentina por los DD. Del Hombre – Filial Rosario
MAIZ (Mov. Amplio de Izquierda)
La
Asamblea (Gro. Baigorria)