Julio López
está desaparecido
hace 6424 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Ex asesor de la CIA: las estrellas de Hollywood espían rodando en el extranjero
Por Comandante Brutus - Monday, Jan. 20, 2014 at 12:34 AM

Un alto exfuncionario de la CIA (ex-asesor legal) afirma en su libro recién publicado que muchas celebridades de la industria del entretenimiento, sobre todo de Hollywood, llevan a cabo actividades de inteligencia mientras están en el extranjero.


A Hollywood le encanta una buena historia de espionaje. Pero también es cierto que los encargados del 'show business' regularmente realizan actividades de espionaje en la vida real, según un nuevo libro de memorias del ex asesor legal de la Agencia Central de Inteligencia de EEUU (CIA) John Rizzo.

"La CIA siempre ha tenido una relación especial con la industria del entretenimiento, dedicando considerable atención al fomento de las relaciones con los integrantes más influyentes de Hollywood: estudios, productores, directores, actores famosos", afirma Rizzo en su nuevo libro 'Hombre de la compañía: Treinta años de crisis y controversia en la CIA' ('Company Man: Thirty Years of Crisis and Controversy in the CIA').

Aunque el exfuncionario tiene prohibido dar nombres, porque están clasificados, y la CIA se negó a comentar la reciente obra, escribe el rotativo, el autor sí proporciona algunos detalles sobre los tipos de ayuda que la Agencia solicita a Hollywood. A veces, les pedía a los cineastas el permiso para que un agente de la CIA se hiciera pasar por un miembro del equipo de la película, sobre todo, si se filmaba en un país donde la inteligencia norteamericana tenía dificultades para operar.

La CIA también recluta agentes (dentro del mundo artistico) para dar más visibilidad a los proyectos de propaganda en el extranjero. Así, por ejemplo, fue producido en secreto un documental por parte de la Agencia, dijo Rizzo.

Además, la CIA se aprovecha de que muchas estrellas del cine norteamericano disfrutan de poder abrir muchas puertas, que están cerradas al resto. "Las personalidades de Hollywood son glamorosas. Tienen acceso a personas en el extranjero, a las cuales el Gobierno de EE.UU. no puede acercarse", aseveró el abogado, quien trabajó en la CIA durante 34 años. Algunas de estas celebridades, incluso, ofrecen sus servicios gratuitamente, movidos por sus sentimientos "patrióticos", escribió Rizzo.

Según el autor, el ente terrorista oficial de los EEUU tiene funcionarios asignados a tiempo completo para el cuidado y alimentación de los activos de Hollywood. "Esto estaba pasando cuando llegué allí y continuaba sucediendo cuando me fui", señaló el ex alto cargo, que dimitió en 2009, agregando que las actividades de inteligencia realizadas por las personalidades de la industria del entretenimiento continúan.

agrega un comentario


Un caso emblemático
Por Productor de Hollywood fue espía israeli - Monday, Jan. 20, 2014 at 12:42 AM
brutusmania@argentina.org


Los rumores sobre la doble vida del productor de Hollywood Arnon Milchan han circulado por años.
Pero el empresario israelí detrás de éxitos como "Pretty Woman", "Fight Club" y "L.A. Confidential" se ha sincerado finalmente, haciendo una revelación sorprendente: por años fue un espía israelí que compraba armas a nombre del país e impulsaba su supuesto programa nuclear.

En una ámplia entrevista con el Canal 2 de Israel para el programa de investigación "Uvda", Milchan detalló una serie de asuntos clandestinos en los que estuvo involucrado y especialmente cómo ayudó a comprar la tecnología que Israel supuestamente necesitaba para operar bombas nucleares.

"Lo hice por mi país y estoy orgulloso de ello", dijo Milchan, quien dirigía una exitosa empresa de fertilizante en Israel antes de tener éxito en Hollywood.

Incluso ahí, dijo, siguió con su trabajo clandestino mientras que mantenía una relación cercana con los líderes israelíes.

De acuerdo con una biografía no autorizada, publicada hace dos años, Milchan trabajó para el ahora desaparecido Buró de Relaciones Científicas de Israel, conocido como Lekem, que buscaba información para programas de defensa secretos. El buró fue disuelto en 1987 después de que quedara implicado en un asunto de espionaje por el cual Jonathan Pollard (un analista civil de inteligencia para la armada estadounidense) fue sentenciado a cadena perpetua.

Milchan también dijo que otras figuras importantes de Hollywood estaban relacionadas con sus asuntos secretos.

"Cuando vine a Hollywood me separé completamente de mis actividades para dedicarme a lo que realmente quería, producir películas", pero a veces todo se revuelve" dijo.

Milchan, de 68 años, fundó la compañía cinematográfica New Regency y ha producido más de 120 películas desde la década de 1970, trabajando con directores como Martin Scorsese, Roman Polanski, Sergio Leone y Oliver Stone. Tuvo una relación especialmente cercana con Robert De Niro, quien junto con actores como Russell Crowe y Ben Affleck, aparece en el programa de Uvda.

"Había escuchado algo, pero no estaba seguro", dijo De Niro sobre las actividades de Milchan. "Le llegué a preguntar alguna vez y me dijo que era israelí y que claro que haría esas cosas en su país"

agrega un comentario


Bien ahí Brutus
Por Morenista - Monday, Jan. 20, 2014 at 2:42 AM

Por fin denunciando a los espías sionistas.....ya era hora.

agrega un comentario


espias no dead
Por Wotan - Tuesday, Jan. 21, 2014 at 5:05 PM


en esta te doy la derecha brutus.

agrega un comentario


...
Por Wotan - Tuesday, Jan. 21, 2014 at 10:17 PM

o triunvirato es el novio culorroto de brutus que quiere hacerse pasar por mi o son la misma persona con multiples personalidades que se pajea por si mismo..

yo ya estoy decidido a romperte la cabeza imbecil malnacido, que me queres citar en santa fe y esmeralda en plaza san martin, pedazo de nabo, un comunista de zona norte..
pase hoy ahi y no habia nadie.
y encima pones una foto vieja de antes de que sta fe tuviera doble mano.
yo no estoy para jugar a las escondidillas con un pelotudo fantasma desconocido...

son la lacra de indymedia. se creen los dueños y amos dle sitio que pedantes..
si son dos haceme un favor, sobale el pito a tu amigovio brutxs y se dejan de joder.
se nota a la legua que son unos homosexuales encubiertos y reprimidos.
los tendrian que matar.

agrega un comentario


Antonio Hortelano: confesiones de un espía del Mossad en el Vaticano
Por Cura espía del MOSSAD y Vaticano se confiesa - Saturday, Jan. 25, 2014 at 12:00 AM
Agencia Brutus Fans Club


Estas “confesiones” de un sefardita sionista infiltrado en la Curia son de suma importancia para entender y confirmar la realidad de la "Nueva Iglesia Conciliar". La infiltración Israelí en el Vaticano es un tema ampliamente tratado por varios autores católicos, protestantes y ateos. En realidad, trabajó para los dos, con pleno consentimiento del Vaticano, segun se desprende de sus propias declaraciones
Pero este testimonio, sin parcialidad “antijudía”, difundido por el diario Español "El mundo", echa gran luz al lector y verdades contundentes para abrir los ojos ante la podredumbre que padece la Roma Cristiana en su infame alianza secreta con el imperialismo y los militares genocidas que azotaron a Latinoamérica.
Lo que sigue es copia (casi fiel) del reportaje a Hortelano, realizado por José Manuel vidal para el diario elmundo.es.

EL CURA ESPÍA del MOSSAD LO CUENTA TODO


Religioso redentorista, especialista en Moral. Trabajó como espía para los principales servicios de inteligencia del mundo capitalista. Los médicos le han diagnosticado un cáncer terminal de pulmón. Antes de fallecer, en el año 2009, escribió sus memorias. Cuenta todo «El abuelete», un libro donde recuerda, con toda su crudeza, su experiencia como ESPÍA DEL VATICANO Y DE ISRAEL.

«Soy espía y no lo niego», reconoce a sus 90 años sin rubor. Y lo cierto es que, según revela a Crónica, perteneció a los servicios secretos vaticanos, fue miembro del Mossad israelí, quiso ficharlo la CIA y estuvo detenido por el KGB. Parece el retrato de un 007, pero Antonio Hortelano Alcázar es un religioso redentorista, especialista en Moral y con un extraordinario recorrido evangelizador a sus espaldas. Y una historia de película. Porque el cura espía vivió de cerca, directa o indirectamente, todos los grandes acontecimientos de los últimos tiempos y se codeó con los grandes personajes que han pasado o pasarán a la Historia. Desde Golda Meir o Moshe Dayan a Salvador Allende o monseñor Romero. Y, por supuesto, los papas de las últimas décadas.

Pelo blanco, nariz aguileña («de judío», dice con orgullo), encorvado por el peso de los años, el padre Hortelano sigue conservando una mente absolutamente lúcida, una gran capacidad dialéctica y pedagógica y unos ojos azules que las vieron de todos los colores. Hasta la radiografía de su propia muerte, que le diagnosticaron hace unos meses, de improviso. «Como llegaba de México, me llevaron al Carlos III y me hicieron todo tipo de análisis para ver si tenía la gripe A. Cuando terminaron, el médico me dijo: ‘Tengo que darle dos noticias. Una buena y otra mala. La buena es que no tiene la gripe A. La mala, que tiene un cáncer de pulmón en fase terminal’». «Me muero. Me quedan unos dos meses de vida. Pero no he querido quimio ni radio. Sólo cuidados paliativos», le dice al periodista que lo entrevista.
Lo que sigue es copia casi fiel del reportaje a Hortelano, realizado por José Manuel vidal.

-¿Sin miedo a la muerte?

-Ninguno.

-¿Por qué?

-Porque tengo fe y creo en el más allá.

-¿Cómo le gustaría morir?

-Con una sonrisa en los labios.

-¿Y de epitafio?

-La frase de Zubiri: «Pienso, luego existo y existo, no colgado de la nada, sino de Dios».

El padre Hortelano nos recibe en su habitación del convento redentorista de la calle Félix Boix de Madrid. Se sienta en su sillón, se pone su mantita en las rodillas y se prepara para anticiparnos parte de sus memorias que ya están casi terminadas. Se va a titular "El abuelete".

-Un título poco comercial.

-Sí, pero como voy a contar en él cosas duras, prefiero revestirlo de un halo de ternura. Como algo entrañable y familiar.


En general, el padre Hortelano dice no tener mucho de qué arrepentirse. «A veces, no he tenido demasiadas vivencias religiosas y, en ocasiones, he sido egoísta y muy terco». En cualquier caso, no teme al juicio de Dios en absoluto. «Dios cuenta con eso. Pronto llegaré ante él y le diré: ‘Aquí está Antonio reportándose’». Además, en su vida también hubo infinidad de cosas buenas. «De lo que más orgulloso me siento es de lo que he trabajado por los demás».

Una vida entregada y repleta de traiciones y crimenes, como corresponde. Al echar la vista atrás, recuerda que nació en el número 80 del paseo de Colón de Irún. «A 500 metros de donde vivíamos estaba Francia». En el seno de una familia acomodada.

Y en Madrid vivióla época de la República. «En el instituto, donde fui compañero de Fernando Fernán Gómez, los jóvenes católicos llevábamos una cruz en la solapa y los rojos, un diablo con cuernos y rabo». Después vino la Guerra Civil y en su casa, se celebraban «eucaristías clandestinas con el padre Ibarrola».

El padre Hortelano habla pestes del poeta comunista Rafael Alberti: «Metía a los prisioneros en cabinas de teléfonos con las paredes electrificadas con alta tensión». Y de Santiago Carrillo, que mandó fusilar a su tío fascista. En cambio, alaba «la genialidad estratégica de Franco».

Excelente estudiante, Antonio Hortelano profesa en los redentoristas el 24 de agosto de 1939. Y con sus dotes de orador religioso extremista, pronto se convierte en una de las estrellas de la congregación. «Siempre fui muy popular entre los alumnos, porque, en mis clases, nunca leía. Siempre era esquemático, corto y creativo». Y, encima, sabía seis lenguas. Entre ellas, el alemán a la perfección.

ESPÍA DEL VATICANO

En la Curia romana se fijaron en él y entró a formar parte de los servicios secretos vaticanos. «Con misiones especiales y de una forma eventual», dice. Pero la verdad es que el propio cardenal Montini, entonces secretario de Estado del Vaticano y futuro Papa Pablo VI, le encomienda muchas misiones "especiales". Un día le llama al Vaticano y le dice: «Sospechamos que el cardenal Mindszenty de Budapest ha sido drogado y, por eso, ha hablado por radio a la población a favor del comunismo. Queremos mandar "orientaciones" a los responsables de la Iglesia. Sabemos que es valiente y arrojado y quiero saber si podemos contar con usted para esta misión».

Aceptó de mil amores. Viajó con pasaporte italiano a la Hungría comunista y cumplió su misión. Pero cuando va a tomar el tren de vuelta a Viena, lo detectan agentes del KGB, lo detienen, lo someten a un interrogatorio de horas y lo acusan de espionaje. Pero, a las 48 horas y «tras tocar los palillos adecuados, me soltaron y pude regresar». Los palillos son el Vaticano e Israel, los dos Estados para los que trabajaba.

- HE TRABAJADO INCLUSO MÁS CON EL MOSSAD QUE CON EL VATICANO.

-¿Por qué con los judíos?


-Se ve claro en mi cara: soy descendiente de judíos.

-¿Se casa bien el sacerdocio católico con el ser un espía judío?

-Perfectamente. Jesús fue judío de raza y de religión. Y nunca se salió del judaísmo. No se puede ser cristiano sin ser judío.

A través de Roma y del Mossad recibió información privilegiada. Mucha y muy abundante. Cuenta, por ejemplo, que el almirante Canaris, jefe del espionaje de Hitler, era «descendiente de judíos sefarditas expulsados de España en 1492, que se refugiaron en Salónica. Se infiltró en los servicios secretos alemanes y le dictó a Franco la estrategia a seguir en el famoso encuentro con Hitler en Hendaya».

Un encuentro del que también tiene información privilegiada. Por el Mossad y porque el traductor que acompañaba a Franco, Antonio Tovar, era amigo íntimo de los Hortelano. Canaris había convencido a Franco de que «sería un desastre para todos que Hitler ganase la guerra, y le aconsejó lo siguiente: ‘Usted dígale amén a todo, pero pídale lo que no tiene. Es decir, cañones de costa para defenderse de los ingleses, petróleo y alimentos. Como es muy orgulloso, no le dirá que no lo tiene, pero no lo obligará a entrar en la guerra’. Y Franco, con esa estrategia, nos salvó de la guerra».

Para hacer frente a "el peligro comunista" que se extendia en toda Europa y, sobre todo, a Latinoamérica, Hortelano se dedica a «aprender las técnicas subversivas». De la mano del ex agitador francés G. Sauge. A su lado, se infiltra en las juventudes comunistas alemanas y austriacas y vive, en París, la revolución de mayo del 68, donde conoce al que después sería cardenal de París, Jean-Marie Lustiger, el primer purpurado católico de origen judío.

Por sus contactos e influencias, asume para si aquella idea de la guerra fria segun la cual «para conquistar Latinoamérica, los soviéticos iban a aplicar la teoría de Gramsci: ni bombas ni elecciones, sino infiltraciones en la Universidad y en la Iglesia. Y de ahí, segun él, nace la Teología de la Liberación».

-¿Una teología marxista?

-En la Teología de la Liberación hay gente buena, como el cardenal Pironio o Helder Cámara. Pero otros, como Hugo Assman, son totalmente marxistas y partidarios de la lucha armada.

-¿Y Gustavo Gutiérrez, el llamado padre de esa teología?

-Cambió y ahora somos amigos.

-¿Y Leonardo Boff?

-Es un bluf, que preconizaba el comunismo científico.

Cuenta el cura buchón que una vez se le acercó una monja en Bolivia y le dijo: «Los problemas de Latinoamérica se arreglan con la Biblia en una mano y con la Biblia en la otra». Y Hortelano le contestó: «Cómo se nota que no ha estado usted en la guerra, porque la metralleta hay que agarrarla con las dos manos y no queda mano libre alguna para la Biblia». Y, tras la anécdota, concluye: «es encomiable la opción por los pobres de la Teología de la Liberación, pero su pecado ha sido coquetear con el comunismo y la violencia».

Por tenerlo así de claro, lo quiso fichar la CIA. «El jesuita Veeckmans se me acercó para contratarme para la CIA con un importante sueldo. Pensaron que era el candidato ideal para denunciar a los teólogos radicales.Dice haber rechazado la oferta. Eso sí, pasó más de 30 años "paseándose" por Latinoamérica, uno de los principales teatros de operaciones del cura espía. Y participando en todos los grandes acontecimientos del continente.

Vivió de cerca, por ejemplo, todo el proceso que condujo al asesinato de Monseñor Romero, obispo progresista de San Salvador. «Había dos candidatos para el arzobispado salvadoreño: Rivera Damas, abierto, y Romero, conservador. Roma eligió al conservador, que pronto se pasó con armas y bagajes a la izquierda». Además, «sus misas se convirtieron en auténticos mítines revolucionarios contra el gobierno militar y por eso lo mataron».

De ahí que Hortelano crea que monseñor Romero «nunca será canonizado». Y añade: «Como tampoco subirán a los altares Ignacio Ellacuría y sus compañeros jesuitas de la UCA. Demasiada política de por medio».

Hortelano estuvo en Chile desde la llegada de Allende al poder hasta su derrocamiento y asesinato. Recuerda que a su toma de posesión «llegaron Castro y los demás dirigentes de la izquierda marxista leninista del continente». El redentorista español, sentado al lado del cardenal Silva Henríquez, carismático arzobispo de Santiago de Chile, le comentó:

-Monseñor, debe de ser muy interesante ser cardenal de Santiago en estos momentos.

-Ojalá, padre Hortelano, no lo fuese tanto. Replicó el purpurado.

El cura español sionista sostiene que «el Chile de Allende se fue convirtiendo en el imán de todos los revolucionarios del continente y, cuando estalló el golpe de Pinochet, mi impresión es que el 70% de los chilenos estaba a favor. Eso sí, creían que los militares iban a poner orden y se irían. Hortelano estuvo también en el estadio nacional «donde había más de 5.000 personas detenidas».

En su condición de agente secreto, Hortelano "se relacionaba" con todos los bandos. Tanto civiles como eclesiásticos. Se hizo "amigo" de Camilo Torres, el cura revolucionario colombiano, posteriormente asesinado por el ejército.
Y también tuvo trato preferencial con dictadores como Fujimori o Videla:
«Un día, el entonces presidente de la Junta Militar argentina asistía a una boda que celebraba yo y se acercó a comulgar. En el convite me tocó a su lado y le pregunté a bocajarro»:

-Presidente, ¿cómo se atreve a comulgar?.

-No sea ingenuo, padre Hortelano. Si Rusia ataca con bombas atómicas, Estados Unidos responde con bombas atómicas. Si los montoneros nos atacan con el tiro en la nuca, nosotros les respondemos con el tiro en la nuca. Ustedes, en cambio, dentro de 30 años seguirán soportando a los asesinos de la ETA con el tiro en la nuca.

-¿Qué haría usted para acabar con ETA ?

-Cinco por uno, incluidas mujeres y niños y el embargo de sus bienes.

Como cura que es, el padre Hortelano no está de acuerdo con el cinco por uno de Videla. Pero propone una «receta» no menos sorprendente para acabar con la banda terrorista: «Llevaría a todos los presos de ETA a Fuerteventura. Nada de acercamientos. Y si la banda comete atentados materiales, los presos aislados a agua y bananos. Y si mata a alguien, a pan y agua durante cuatro meses».

Hortelano dice admirar a los vascos, pero se muestra muy crítico con los obispos vascos y con la Iglesia católica del País Vasco. «ETA la fundó la Iglesia. Y, tras tantos años de terrorismo, es lamentable que no haya muerto ni un solo cura. Mientras ETA no mate a un cura, no creo en los curas ni en los obispos ni en la jerarquía vasca». Lo dice el cura al que el entonces obispo de San Sebastián, Jacinto Argaya, quería que fuese su obispo auxiliar. Y se lo propuso en una reunión secreta que celebraron en el santuario de Loyola.

-Quiero que seas mi auxiliar con derecho a sucesión

-No puedo, Don Jacinto. No sé vasco y, además, no soy sacerdote diocesano.

-Eso no importa. El vasco se aprende. Y eres el único que puede parar la sangría de mis curas, que se están pasando a los abertzales revolucionarios y a ETA.

-Lo siento mucho, monseñor, pero no puedo aceptar. No soy la persona idónea.

Don Jacinto le confiesa, entonces, que «la alternativa es Setién». Y Hortelano precisa: «Entonces, Setién tenía fama de conservador y daba clases en Salamanca. Pero el conservador Setién les salió abertzale».

-¿Qué tal se lleva con monseñor Setién?

-Fatal, cada vez que me ve me mira con ojos de hiena.

El padre Hortelano aprovecha el caso para criticar la política de nombramientos episcopales de la Iglesia. «Se hacen muy malos nombramientos de obispos. Por eso son tan malos y tan grises los que tenemos. Además, deberían elegirse sólo para nueve años. Lo que no se hace en ese tiempo, ya no se hace».

Profundo conocedor de los entresijos más ocultos de la Santa Sede, Hortelano habla sin pelos en la lengua de los papas.

-¿Su Papa preferido?

-Juan XXIII.

-¿Qué opina de Benedicto XVI?

-Es un profesor de teología sin chispa ni carisma.

-¿Y de Juan Pablo II?

-Teológicamente, era malísimo y, además, relegó a los religiosos.

Aunque reconoce los méritos reaccionarios de Wojtyla. «El Muro de Berlín cayó gracias a Juan Pablo II, aliado con Reagan». Y desvela un secreto de su pontificado. En su intento por acabar con el comunismo, «el presidente de los EEUU y el Papa se intercambiaban a diario todos los informes más reservados que cada uno de ellos recibía. Todas las mañanas, Reagan mandaba sus informes al Papa y éste le enviaba la información más caliente que recibía de todas las nunciaturas». A juicio del sacerdote-espía, «ése fue un gran error de Juan Pablo II».

SECRETOS VATICANOS

Y sobre todo le reprocha el escándalo del IOR, el Banco del Vaticano y el haber confiado las finanzas de la Iglesia a monseñor Marcinckus. «Se lo ofreció el arzobispo de Baltimore, pero ya en USA Marcinckus estaba relacionado con la mafia. Por eso, cuando se produjo la quiebra del Banco Ambrosiano, que dejó un agujero en el IOR de más de mil millones de dólares, Marcinckus quiso taparlo negociando la deuda con la mafia. Al final, tras varios muertos, el Vaticano pidió a los religiosos que se hiciesen cargo de la deuda. Aceptaron pero con la condición de quedarse con la gestión de las finanzas vaticanas. El Papa no quiso y, entonces, apareció el Opus Dei que, a través de Rumasa, tapó el agujero de Roma a cambio de la prelatura personal y de la canonización del fundador de la Obra».

Pasadas esas turbulencias y desde su atalaya eclesial, el padre asegura que la institución «necesita cambios estructurales, pero sin dinamitarla». Es decir, «hay que hacer lo mismo que con las viejas catedrales: limpiarlas, pero conservando todo lo demás».

En esta clave se atreve a escribir una «última carta al Papa». En ella le propone «con humildad» una serie de consejos concretos para reformar la Iglesia. Entre ellos, le pide que «promueva la integración de la Iglesia con el judaísmo».

Base USA de ROTA, GIBRALTAR Y LAS MEMORIAS

Torrente inagotable de informaciones, el padre Hortelano deja la Iglesia y pasa a asuntos de la actualidad. Y asegura que «Gibraltar, ahora de moda por el viaje de Moratinos, es una bobada, que se solucionaba haciendo esperar ocho horas diarias en la frontera a los llanitos que pasan a España, donde suelen vivir». A su juicio, el problema es la base de Rota.

-¿Por qué?

-Porque Rota es un enorme almacén de bombas nucleares, por si estalla una guerra atómica en Oriente Medio.

-¿Con qué datos asegura eso, padre?

-Con las bases documentales del Vaticano y del Mossad, y con la información privilegiada de muchos servicios secretos.

Posa con paciencia para las fotos, nos estrecha la mano a guisa de despedida, no sin antes mencionar que su testamento saldrá pronto en forma de libro de memorias "para conseguir algo de dinero para la niña de sus ojos": el kibutz que fundó hace años, en Querétaro (México), llamado comunidades EAS.

agrega un comentario


che, wotan
Por antiwotan - Thursday, Feb. 06, 2014 at 6:20 AM

supongo que te debés sentir muy solo y resentido en este mundo para chorrear tanto veneno y discriminacion;

que vida al pedo la tuya!

agrega un comentario