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El camino de hormigas que supera fronteras
Por Martín Stoianovich - enREDando.org.ar - Thursday, Aug. 07, 2014 at 7:09 PM

Inauguran en Misiones una delegación de ATE con el nombre de Pocho Lepratti. A cientos de kilómetros de la ciudad donde el militante social desarrollaba su trabajo, se presentó la primera sede del sindicato a nivel nacional que lo homenajea. Reflexiones sobre el recorrido que hoy caracteriza su historia.

El camino de hormiga...
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Foto: ATE Misiones

Cuando el trabajo, la solidaridad y la dignidad trascienden a la propia muerte, el paso del tiempo le da lugar a sucesos que dejan en claro que ni las balas represivas pueden callar un grito que se expande rompiendo fronteras. El nombre de Pocho Lepratti es bandera de lucha de las clases postergadas, de los olvidados, de los marginados, de los trabajadores y de los siempre desfavorecidos. Hace ya más de doce años su vida fue interceptada por un arma cargada de inoperancia, manipulada por un oficial sirviente de las órdenes que intentaban frenar el estallido de un pueblo sumergido en la crisis social, política y económica que los propios funcionarios habían construido. Pocho moriría en diciembre de 2001 en el techo de una escuela del barrio Las Flores, bien al sur de la ciudad.

Hoy esa misma escuela lo recuerda en sus paredes, como también sucede en distintos puntos físicos a lo largo del país, a través de expresiones artísticas de las más variadas y del trabajo diario de quienes intentan continuar su legado. La historia de Pocho quedará para siempre identificada con el camino recorrido incluso después de su asesinato. Recorrido que en estos doce años y medio ya tomó dimensiones infinitamente mayores al alcanzado por la mediocre Justicia que hoy conserva impune a los autores materiales e intelectuales del hecho. Una nueva muestra de este fenómeno se vio el sábado 2 de agosto, cuando a más de 800 kilómetros de Rosario, en Apóstoles, provincia de Misiones, una nueva delegación regional de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), se inauguró con el nombre del militante social que además fuera delegado de base del sindicato. De la mano de la agrupación rosarina Arte por Libertad, que viajó hasta el lugar junto a integrantes de ATE Rosario y familiares de Lepratti, la imagen alada de Pocho en su bicicleta quedó inmortalizada en la fachada del lugar.

Después de más de doce horas de viaje, la comitiva rosarina arribó a una Apóstoles que sorprendía por sus altas temperaturas. En la esquina de las calles Salta y Moreno se encontraba el nuevo local de ATE que hasta el momento dejaba ver su frente pintado de blanco, a la espera de la intervención de Arte por Libertad. Fue cuestión de unas pocas horas para que las paredes presentaran su nueva estética en vísperas de la inauguración del lugar que se realizaría alrededor de las seis de la tarde. Allí, dieron sus palabras Celeste Lepratti, hermana de Pocho, y representantes de Arte por Libertad, por parte de los rosarinos, y por otro lado dirigentes de ATE a nivel local y nacional.

“Pasaron muchísimos años de que en diciembre de 2001 Pocho fue asesinado por la policía santafesina que conducía Carlos Reutemann y seguimos reclamando justicia. En estos años son muchas las personas que nos vienen acompañando y con quienes vamos aunando luchas, porque lamentablemente son muchas las luchas que se llevan adelante. Está bueno esto de encontrarse y tratar de juntar fuerzas ahí”, expresó Celeste Lepratti en un principio. Luego resaltó la importancia de que una nueva delegación de ATE llevara el nombre de su hermano, y cómo esto superaba el simple hecho de recordarlo. “Las banderas que él levanto son las mismas que se quieren levantar hoy. Pocho era delegado de base de ATE y supo de la importancia que tenía la organización entre los trabajadores, creía en la construcción de la CTA, y en que los trabajadores tenían que tener fuerza para transformar y conseguir sus derechos”, explicó. Finalmente, Celeste añadió: “Este hecho nos permite decir una vez más que Pocho vive, que no lo mataron, sino que lo multiplicaron. Esta es una muestra más de esa frase que se viene repitiendo”.

En su turno, en representación de Arte por Libertad, Lucas García quien en su niñez y adolescencia formó parte de los grupos de trabajo barrial que Pocho llevaba a cabo en Ludueña, dejó en claro en qué consiste el trabajo de la agrupación de la cual forma parte. “Es una cuestión netamente de militancia, no sólo que no cobramos sino que muchas veces ponemos el mango que no tenemos. Desde Arte por Libertad lo que hacemos es lo que ven, y el mensaje que se deja con las pinturas”, sostuvo. Detrás suyo se veía la producción del trabajo colectivo que se había realizado ratos antes. Además de los logos institucionales de ATE y CTA, se lucían la clásica hormiga que identifica a la organización, el Pocho alado en bicicleta, y otra serie de consignas relacionadas a los pueblos originarios y los reclamos contra la construcción de represas que atraviesa hoy Misiones. El camino de Pocho se sigue recorriendo, y será cuestión de tiempo para que un punto más del país reconozca su historia y la identifique con su trabajo.

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