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Llegó la hora del juicio a los acusados por el triple crimen de villa Moreno
Por Fuente: La Capital -
Sunday, Nov. 09, 2014 at 9:12 PM
Domingo, 09 de noviembre de 2014 | Unos 80 testigos desfilarán ante el Tribunal que echará luz sobre las muertes de Jeremías Trasante, Claudio Suárez y Adrián Rodríguez Cuatro hombres se sentarán en el banquillo.
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Jere Mono y Patom quedaron en la memoria de Villa Moreno.
El miércoles próximo comienza el juicio oral y público en el cual se juzgará la conducta penal de los implicados en el triple crimen de villa Moreno, hecho ocurrido la madrugada del 1º de enero de 2012 cuando fueron asesinados Jeremías Trasante, Claudio Suárez y Adrián Rodríguez, tres jóvenes militantes sociales cuyas injustas muertes pusieron bajo sospecha una compleja trama de complicidades y poder entre la delincuencia, el narcotráfico y la fuerza policial. Cuatro personas estarán sentadas en el banquillo de los acusados por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y por la intervención de un menor en concurso real, con portación ilegal de armas de guerra. Los debates se extenderán al menos 10 días en doble turno, durante los cuales la fiscalía y la querella presentará más de 80 testigos, cientos de escuchas telefónicas y cuantiosa prueba acumulada durante dos años y once meses de instrucción.
Ya no queda más tiempo para las especulaciones, se llegó a la instancia decisiva. En 72 horas y desde las 9 de la mañana del 12 de noviembre comienza el debate final para determinar las responsabilidades penales en la muerte de Jere, Mono y Patom, acribillados a las 4.30 de la madrugada del primer día de enero de 2012 en una canchita de fútbol barrial ubicada en Dorrego y Presidente Quintana, corazón de la villa Moreno.
En ese territorio, los tres jóvenes desarrollaban su tarea social identificados con el "Movimiento 26 de Junio" alistado en el Frente Darío Santillán, agrupación que desde aquel mismo día se movilizó incansablemente a los Tribunales provinciales para exigir justicia, recordar el hecho en cada aniversario y apuntalar la investigación.
El día del crimen los tres jóvenes esperaban a unos amigos para ir a una fiesta de Año Nuevo, cuando cinco hombres, uno de ellos menor, arribaron al lugar a bordo de un utilitario Renault Kangoo color blanco.
La gavilla la emprendió a balazos para vengar un ataque a tiros contra Maximiliano "Quemadito" Rodríguez (hijo del principal acusado) ocurrido horas antes en barrio Alvear. Al parecer, los agresores buscaban a Ezequiel Villalba, apuntado por ese ataque, pero terminaron matando a Jeremías, Claudio y Adrián.
"Quemadito" encontraría la muerte más tarde, en febrero de 2013, tras ser ejecutado de un certero balazo en la nuca en la céntrica esquina de Corrientes y Pellegrini.
Tras una investigación judicial cuyo expediente acumuló 24 cuerpos con 500 fojas cada uno, con sensibles connotaciones sociales que logró sacar a la luz múltiples sospechas de encubrimiento policial, fueron imputados y procesadas las cuatro personas que estarán en el banquillo de los acusados.
Se trata de Sergio Gustavo "Quemado" Rodríguez, imputado como autor intelectual y ejecutor de los disparos fatales; Daniel Alejandro "Teletubi" Delgado, Brian Ismael "Pescadito" Sprio, ambos procesados en mayo de 2013 por el juez de Instrucción Juan Andrés Donnola como coautores del hecho, y Mauricio Ezequiel "Maurico" Palavecino, como partícipe necesario por ser chofer del grupo.
El chico identificado como Gerardo "Jeta" M., en tanto, fue desvinculado de la causa por ser menor de edad e inimputable. Además, hay que recordar que ya hubo una sentencia por el caso: Brian Damián "Damiancito" Romero, acusado de ser partícipe secundario, recibió una pena de 8 años de cárcel en un juicio abreviado.
Bajo el antiguo sistema escrito (ya que uno de los acusados se negó a ir a juicio oral)transita la etapa de pruebas en el Juzgado de Sentencia Nº6, a cargo de Julio García, el juicio a tres policías sospechados de encubrir el triple crimen. Ellos son el comisario inspector Eduardo Ismael Carrillo, el suboficial Norberto Claudio Centurión y el agente Lisandro Jesús Martín, procesados por el delito de "encubrimiento agravado e incumplimiento de los deberes de funcionario público". Se les achaca una cadena de "acciones negligentes y omisiones" anteriores y posteriores a los asesinatos que, según el juez Juan Andrés Donnola, constituyeron "un oscuro cúmulo de sospechas" que componen la trama de ocultamiento.
Puntualmente, Carrillo estaba a cargo de la Inspección de Zona 3, Centurión trabajaba como su secretario y Martín en el destacamento del Heca. Otro policía, el comisario de la seccional 15ª, Abel Osvaldo Santana, quedó desvinculado del hecho.
En su momento, y al confirmar esos procesamientos, la Cámara Penal de Rosario también remitió copias de las transcripción de las escuchas telefónicas a los Tribunales Federales ante la presunción de participación de personal policial de la comisaría 19ª (hasta marzo de 2012), "encubrimiento y participación" en actividades vinculadas al narcotráfico.
Los requisitos para asistir
Para presenciar las audiencias orales y públicas del juicio por triple crimen de villa Moreno hay que asistir con DNI media hora antes de los debates. Desde la segunda jornada se restringirá el ingreso a las salas con teléfonos celulares, grabadores o cualquier dispositivo tecnológico con el cual se pueda registrar audio o video. El ingreso será limitado a la capacidad de las salas Nº 1 y Nº 2, para 36 y 21 personas respectivamente, y por razones de seguridad.
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“Tengo pruebas para que haya cuatro condenas”, dijo la fiscal Nora Marull
El primer día son alegatos y después siete días de audiencias de testigos. La Fiscalía tiene 70 testigos más o menos, y los que aporta la querella.
“Este fue un hecho de violencia bisagra en la ciudad por lo atroz, por lo duro, por las víctimas, porque eran tres chicos jóvenes totalmente ajenos a esta venganza errada. Estamos a un paso de que comiencen las audiencias. El primer día son alegatos y después siete días de audiencias de testigos. La Fiscalía tiene 70 testigos más o menos, y los que aporta la querella. Las cuatro defensas habían aportado 12 testigos pero podrían incorporarse algunos más, eso lo vamos a saber cuando arranque el juicio”.
Así comenzó el viernes la fiscal de la causa del triple crimen, Nora Marull, un breve contacto con los medios. Hizo mención al trabajo de investigación y repasó las pruebas y testimonios que tiene para sostener la acusación contra los cuatro imputados. Apeló a la “responsabilidad social de los testigos” y dijo que para la sentencia definitiva espera “cuatro condenas” y que pedirá “penas altas”.
“Me entrevisté con casi todos los testigos. Les dije que vengan a decir la verdad, no a distorsionarla ni a mentir. En la medida que podamos no vamos a permitir ni encubrimiento ni falso testimonio. Para los testigos esta causa tiene una responsabilidad social”, remarcó, en medio de carpetas rotuladas con nombres propios con pliegos de preguntas para el juicio que comienza el miércoles.
La fiscal recordó que se intervinieron líneas telefónicas de las que surgieron más de 500 CDs y 340 casetes. “Los escuchamos a todos, con mi equipo, uno por uno. De ello obtuvimos más pruebas. Vamos a tratar de mostrarlas de manera práctica”.
Al entrar de lleno en el juicio y sus probables sentencias, adelantó que pedirán “penas altas. Eran chicos sanos, buenos. La banda que actuó se relaciona con el narcotráfico, una primera línea de bandas conocidas. Pero no es dónde nosotros hacemos foco. Todo eso está en el Tribunal Federal. Lo nuestro es probar que se bajaron de una Kangoo y cometieron el delito, tergiversaron la prueba, desviaron la investigación y huyeron”.
Sobre sus expectativas, se mostró confiada. “Tengo pruebas suficientes para que haya cuatro condenas. No dudo de mi estrategia y la prueba. Es un juicio y se verá el resultado. Para mi no hay fisuras. Este juicio lo defiendo con convicción. Yo sé que fueron cinco personas, lo escuché, lo vi. Espero estar a la altura de las circunstancias”.
Por último, bregó para que las defensas litiguen de manera “responsable y de buena fe. Como mensaje es importante destacar que los familiares y amigos de las víctimas confiaron en la Justicia. Se movilizaron y nos apoyaron, porque trabajamos de buena fe. No hicieron Justicia por mano propia, confiaron en el fiscal y en todos los jueces que intervinieron”.
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