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Fernanda Chacón: “Si mi marido sale en libertad me mata a mí y a la nena”
Por reenvío red eco alternativo - Friday, Apr. 17, 2015 at 9:36 AM

El ex marido de Fernanda está preso, pero fue beneficiado por el mecanismo de juicio abreviado y podría quedar en libertad en cualquier momento. Si esto se concreta, ella teme por su vida y la de Celeste, la hija que tienen en común. Red Eco Alternativo

(Fabiana Arencibia - Red Eco) Ciudad de Buenos Aires- Fernanda tiene 39 años, es ama de casa y madre de cuatro hijos de 20, 12, 7 y 3 años. Hoy está sin trabajo pero en poco tiempo tiene expectativas de conseguirlo en una organización contra la violencia de Género.
En ningún momento Fernanda dudó en denunciar, no una sino muchas veces, a su ex marido por la violencia física ejercida contra ella, aunque asume que previamente soportó la violencia psicológica.
Daniel Castro está preso desde hace un año en la cárcel de Devoto. Tiene prisión preventiva por un delito anterior y está imputado por nueve más, en perjuicio de Fernanda, por violencia de género (amenazas, lesiones, coacción y desobediencia, entre otros).
El 21 de marzo pasado Fernanda recibió una llamada de su ex marido desde el penal, amenazándola de muerte a ella, a Celeste, la hija de tres años que tienen en común y a toda su familia. Es que Castro se crispó porque un juez de menores dictaminó una cuota alimentaria que causa la retención de su sueldo.
Cuatros días después, el 25 de marzo, Fernanda se presentó en el Tribunal Oral Nº5 de la Ciudad de Buenos Aires, que es el que lleva la causa, para denunciar estas amenazas, de las ya había radicado la denuncia en la comisaría. “Me dijeron que ellos no pueden hacer nada y me fui a ver al Fiscal Ariel Yapur, quien me dijo que el caso es peligroso. Entonces libra un oficio al Tribunal por el cual se me asignan tres consignas policiales, una en mi domicilio, otra en el de mis padres y la tercera en el de mi hijo de 20 años que no vive conmigo” explicó a Red Eco Fernanda.
Solo cinco días después, el lunes 30 de marzo, Fernanda recibió una llamada de la misma Fiscalía para anoticiarle que a su ex marido le darían el privilegio de tener un juicio abreviado que se firmaría al día siguiente. Este tipo de juicio lo que hace es unificar las penas cometidas por diferentes delitos en una pena única que resulta ser más corta.
“El tenía ya una pena de 3 años por delitos anteriores y por los 9 delitos que cometió contra mí le están dando una pena de 1 año y seis meses. Él se hace cargo de todos los hechos y dice: yo le pegué, le fisuré la costilla, yo le puse un cuchillo a mi hija en el cuello. Se hace cargo de todos los delitos que se le imputan. Y se le baja la pena. No le dan la pena por cada delito, lo unifican todo y en esa unificación sale libre con un año y seis meses porque los otros tres son de la pena anterior, por la que tenia libertad condicional. O sea que si esto se confirma puede quedar libre en cualquier momento”, detalló.
“Si mi marido sale en libertad me mata a mí y a la nena”, afirmó con certeza Fernanda y comentó que el lunes de esta semana ratificó las denuncias por las amenazas en el Juzgado de Instrucción Nº 8.
Fernanda dice que la cárcel ha sido la única limitante para las agresiones que ella denunció una y otra vez. “Tengo presentadas quince denuncias de las cuales nueve se comprobaron y que son los delitos que le imputaron”.

Historia de violencia
Fernanda conoció a Daniel en agosto de 2010 y se casaron en setiembre de 2011. “En marzo de ese año yo quedé embarazada. En noviembre nació nuestra hija Celeste y ahí comenzaron varios problemas. El primer hecho de violencia fue en 2012 cuando yo no quise tener relaciones sexuales. Él la agarró a la nena que tenía solo tres meses y le puso un cuchillo en el cuello diciendo que la iba a matar, que él era el padre y tenía todo el derecho a hacerlo”, relató.
Este fue el primer hecho de violencia que ella recuerda aunque previamente Daniel Castro había roto una ventana de un departamento en que vivían. “Tenía la costumbre de hacer como que se iba a matar. Se ponía el cinturón en el cuello y decía que se iba a suicidar”.
Hay patrones en las conductas de los hombres que ejercen violencia contra las mujeres que se repiten como los celos y el ejercicio a través de ellos del control sobre la mujer. Fernanda no fue una excepción: “No me dejaba salir a comprar si no era acompañada con alguno de los nenes, ni siquiera a la esquina. No me dejaba trabajar. Cada vez que iba a la casa de mi mejor amiga me llamaba constantemente y más de una vez apareció en el lugar para ver si estaba ahí. Y las salidas tenían que ser con él y adonde él decía”.
También las mujeres que son objeto de violencia de género albergan durante un tiempo la esperanza o el deseo de que no vuelva a suceder. Así lo relató Fernanda: “Luego que pasó el hecho con Celeste yo pensé que iba a cambiar. Pero en 2013 en una discusión en mi casa me empuja, yo me caigo contra la bañadera y me fisuro una costilla. Él agarra algo de su ropa y se va. Entonces yo voy a la Oficina de Violencia Doméstica (de la Corte Suprema) y hago la denuncia y se dispone la medida cautelar y la exclusión del hogar. En una semana no supe nada más de él pero al regresar un día del colegio con mis hijos, me estaba esperando dentro del departamento. Me fui con los chicos y llamé al 911; vino el patrullero y lo notificó de las medidas (de exclusión). Luego no supe nada más por 15 días, hasta que me empezó a mandar mensajes de texto. El 13 de junio de 2013 subo por un ascensor a mi departamento y cuando bajo él baja del otro y, yo con la beba a upa, me da una trompada y me abre el labio de punta a punta”. Mientras Castro le gritaba que él se estaba drogando porque Fernanda lo había dejado, ella le pide que la lleve al hospital porque estaba sangrando del golpe. Salen a tomar el ascensor y ella, aprovechando que había gente en el pasillo, pidió que la ayuden. Castro Salió corriendo por las escaleras.

Antes que sea demasiado tarde
Pasó un año entre el momento en que Fernanda hizo la denuncia en la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) y el día en que quedó preso. “Hubo más denuncias luego de esa; cuando me fisura la costilla en mayo de 2013, la del golpe en la cara de junio de 2013, pero hubo otras más no sólo en la OVD sino también la comisaría por desobediencia (a la medida de exclusión) y porque llamaba y me amenazaba. Me llegó a sacar a la nena teniéndola yo a upa y tuve que activar el botón anti pánico y la Policía Metropolitana tardó más de 30 minutos en venir. Y a pesar de que él sabía que yo tenia el botón anti pánico se acercaba igual”
Que Castro llegara a la cárcel no tuvo que ver con la violencia ejercida contra Fernanda sino por presunción de que podía fugarse. “Cuando lo citaban a declarar al único domicilio que tenía registrado -que era el de su trabajo- no se presentaba. Lo fueron a buscar con la fuerza pública y cuando lo llevaron a declarar le pidieron un domicilio para acreditar su lugar de residencia. El que dio resultó ser un lugar donde negaron conocerlo. Por eso evaluaron que por la causa anterior y todos los delitos que le estaban imputando era una persona que se iba a profugar. Es por ello que dictaron la prisión preventiva en abril del año pasado”, comentó.
Luego de cada denuncia que Fernanda hacía, Castro intentaba volver y la amenazaba. “Porque estamos casados legalmente se cree que yo soy su propiedad y que tengo que estar con él y que lo que hace está bien y que tengo que aguantar lo que sea”, reflexiona.
El pasado 8 de abril Fernanda volvíó a denunciar a Daniel Castro ante la OVD, que finalmente confeccionó un informe de alto riesgo que fue remitido a las instancias judiciales donde está asentada la causa: el Tribunal Oral Nº5 de la Ciudad de Buenos Aires y al Juzgado de Instrucción Nº 8. El objetivo es que no le den el beneficio de Juicio Abreviado.
Al final de la entrevista Fernanda quiso dar un mensaje para las mujeres que pasan cotidianamente por situaciones similares de violencia de género y que por diversos motivos, entre ellos el miedo, no se atreven a tomar la decisión de denunciarlas y pedir ayuda: “Lo primero que les diría es que denuncien. Y que se presenten como querellantes porque a mi me está perjudicando no haberme presentado como querellante porque ahora no puedo apelar a todo lo que se decida en el marco de esa causa. Si se quedan solamente en el ámbito de lo civil, las medidas que se les imponen a ellos siempre terminan violándolas, hacen una desobediencia, se los llevan demorados dos o tres horas y vuelven a salir. Les diría que denuncien penalmente y que traten de que se caratule siempre como violencia de género porque entonces va a juicio y no tienen posibilidad de que se les de un juicio abreviado”.
En los últimos días se dio a conocer el informe 2014 que elabora anualmente la Comisión sobre temáticas de género de la Defensoría General de la Nación. Del informe se desprende que en 9 de cada 10 denuncias el agresor es la pareja o ex pareja de la víctima. Y que en 3 de cada 10 casos se incumplen las medidas de protección, entre otros datos alarmantes.
El programa “Las víctimas contra las violencias” de la Ciudad de Buenos Aires registra desde su creación en octubre del año 2006 hasta febrero 2014 haber atendido en terreno 20.225 víctimas de violencia. Por este mismo Programa, en febrero de 2015 se atendieron 1.036 llamadas, de las cuales 636 lo hicieron por primera vez. De este total un 65,5 % fueron mujeres.
Datos aportados por la Casa del Encuentro hablan de 277 mujeres que murieron por violencia de género en 2014. Si tomamos el período 2008 - 2014, las mujeres asesinadas ascienden a 1.808 mujeres, un promedio de una cada 32 horas.
Fabiana Tuñez, titular de La Casa del Encuentro señaló: “La violencia de género es una cuestión política, social y de derechos humanos básicos (…). La violencia de género no es una cuestión de las mujeres, es una cuestión de justicia”.

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Cada 32 horas muere una mujer como consecuencia de violencia de género.
Por reenvío red eco alternativo - Friday, Apr. 17, 2015 at 9:48 AM

El dato surge del informe anual 2014, que elabora el Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano” de la Asociación Civil Casa del Encuentro. Entre 2008, año en que se comenzó a realizar este estudio, y 2014 se registraron 1808 femicidios. Red Eco Alternativo.

(Red Eco) Argentina – La Casa del Encuentro presentó este miércoles 4 de marzo en su sede el estudio que elabora anualmente a partir de las informaciones sobre muertes de mujeres, adolescentes y niñas que publican agencias de noticias y 120 diarios de todo el país. Esta actividad se lleva adelante desde 2008 ante la falta de estadísticas oficiales.
Según los datos del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano”, que dirige Ada Beatriz Rico, en 2014 fueron asesinadas 277 mujeres. Esto implica que se cometió un promedio de 20 femicidios por mes. Sin embargo, en comparación con los datos de 2013 (295), este año hubo 18 muertes menos.
En su mayoría (92 casos), las víctimas tenían entre 31 a 50 años. Desde el Observatorio, remarcaron que en el último año aumentó la cifra de los femicidios adolescentes, ya que fueron asesinadas 23 mujeres de entre 13 y 18 años.
Al igual que otros años, el ámbito privado fue el lugar donde se cometieron mayor cantidad de femicidios. En más de la mitad de los casos, las víctimas fueron asesinadas en su hogar: 74 mujeres murieron en sus viviendas y 69 en viviendas compartidas.
La mayor cantidad de muertes se registró en la provincia de Buenos Aires (91), seguida por Córdoba y Salta (21). De todos modos, si se toma en cuenta la cantidad de femicidios por mil habitantes, encabeza la lista Tierra del Fuego con 2,36, secundada por Salta con 1,73, Santiago del Estero con 1,48 y Misiones, 1.45.
De las 277 mujeres asesinadas, 21 estaban embarazadas y 39 habían realizado denuncias por malos tratos. A su vez, cuatro habían obtenido órdenes de exclusión o restricción para los denunciados. El 80% de las víctimas tenía un vínculo conocido con el femicida; el 34% era esposo, pareja o novio, mientras que el 22% era ex. A su vez, diez de los homicidas registrados pertenecían o eran ex miembros de las fuerzas de seguridad.
Los femicidios de 2014 dejaron a 200 niños sin madre. Si se toman en cuenta los casos de hijos menores y mayores de edad, los casos de huérfanos ascienden a 330.
Además de presentar estos datos, desde La Casa del Encuentro reclamaron que se elaboren y difundan estadísticas oficiales sobre violencia de género, que se ofrezca patrocinio jurídico especializado gratuito en todo el país; que no se quite del Código Penal el agravante por violencia de género; que se reglamenten los artículos pendientes de la Ley Nº 26.485 (Ley de Protección Integral a las Mujeres); que se cree una comisión de seguimiento e información en el ámbito de las Cámaras Legislativas Nacionales y Provinciales para el cumplimiento efectivo de las normas existentes en materia de violencia de género; que se abran Oficinas de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia en todas las provincias, tendientes a agilizar las medidas cautelares de protección; más hogares/refugio en la emergencia, Hogares de Día para víctimas, con una asistencia interdisciplinaria desde una perspectiva de género; que se asigne un subsidio económico equivalente a una jubilación mínima por tres años; que se cree un Ministerio de Igualdad de oportunidades y trato, al que se le asigne un presupuesto acorde.
A su vez, se dio a conocer un proyecto de ley que apunta a que los femicidas condenados pierdan la patria potestad de sus hijos.
Durante la presentación, Fabiana Tuñez, titular de La Casa del Encuentro, señaló: “hemos avanzado en la legislación y en la visibilización de la temática, pero todavía nos falta más. Por eso hacemos un llamamiento para que en este año de elecciones (el femicidio) sea un tema de esa agenda”.
En este marco, Túñez agregó: “La violencia de género es una cuestión política, social y de derechos humanos básicos (…). La violencia de género no es una cuestión de las mujeres, es una cuestión de justicia”.

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Al menos diez femicidios en 2015: piden la emergencia nacional por violencia de género
Por reenvío red eco alternativo - Friday, Apr. 17, 2015 at 9:51 AM

En las últimas semanas se conocieron varios casos de femicidios, en su gran mayoría cometidos por parejas o ex parejas de las víctimas. Algunos tuvieron mayor repercusión que otros pero lo cierto es que en lo que va de 2015 al menos diez mujeres perdieron la vida debido a la violencia machista. Red Eco Alternativo

(Giselle Scardilli - Red Eco) Argentina - El 1° de enero, en la localidad chaqueña de Castelli, Angel Klein asesinó a su novia Valeria Beatriz Anriquez, de 25 años. Contra él pesaba una restricción judicial para acercarse a la víctima, sin embargo la estranguló delante de su hijo de 5 años y posteriormente intentó suicidarse. Actualmente está detenido.
El 9 de enero, tras un mes de búsqueda, hallaron el cuerpo sin vida de María Eugenia Villafañe a la vera de una ruta entre las localidades de Canals y La Carlota, en el interior de Córdoba. La mujer, de 33 años, había desaparecido el 11 de diciembre. El ex concejal Walter Aragallo está detenido por homicidio calificado por violencia de género.
El mismo día pero en el partido de San Martín del conurbano bonaerense, Micaela González murió en un hospital luego de ser golpeada en la cabeza con un ladrillo por su ex novio, Brian Navarrete. Tenía 18 años y un hijo de dos con el femicida.
Valeria Borgiani, de 31 años, fue asesinada en su lugar de trabajo en Marcos Juárez, provincia de Córdoba, el 15 de enero. Su ex pareja, Gabriel Consol, está imputado por el delito de homicidio calificado por el vínculo y por violencia de género.
El 20 de enero, Angelina Quinteros, de 63 años, fue encontrada sin vida por familiares en su casa de la ciudad salteña de Orán. Su esposo Luis Añazgo la atacó con un cuchillo luego de una fuerte discusión.
Al día siguiente en Rosario, Joana Galarza, de 23 años, falleció tras recibir varias puñaladas de parte de su ex pareja, "Andy" Ruiz.
El 24 de enero se identificó el cuerpo calcinado de Luciana Inés Ferrer, que se encontraba desaparecida desde el 11 de enero cuando partió desde la ciudad de Rosario hacia Posadas, Misiones. Aún se desconocen los motivos de su muerte.
El 25 de enero, Luis Armando Luján asesinó a golpes a su ex pareja Beatriz Tinte, de 60 años. Tras entregarse a la policía, confesó que la mató “por un ataque de celos” y quedó imputado por el delito de homicidio calificado.
Dos días más tarde, Rosa Barberi, de 34 años y madre de cinco hijos, fue asesinada con un arma blanca en el patio de su casa en la ciudad de Monte Cristo, en Córdoba. Su pareja, Alfredo Achával, está detenido e imputado por homicidio agravado.
El 3 de febrero encontraron el cuerpo sin vida de Rocío Juárez, una joven de 21 años que estaba desaparecida desde hacía tres días, en una vivienda de la localidad jujeña de Calilegua. Por el femicidio hay tres detenidos, y uno de ellos sería ex pareja de la víctima.

Al día de hoy, en 2015 hubo al menos diez femicidios, que fueron relevados de periódicos digitales por esta redactora. No sería descabellado pensar que la cifra real es mucho mayor, teniendo en cuenta que muchos casos no trascienden a los medios de comunicación. De acuerdo a este comienzo de año, es fácil imaginar que en 2015 la sangre de las mujeres seguirá tiñendo las páginas de la sección de policiales de los diarios de todo el país.
En todos los casos, excepto en el de la joven oriunda de Pergamino, Luciana Inés Ferrer, los femicidas son los novios, esposos, parejas o ex parejas de sus víctimas. Hombres nacidos y crecidos en una sociedad patriarcal, insertos en una matriz social en la que consideran a las mujeres como objetos de su posesión, a las cuales se puede maltratar, agredir, torturar, reducir, golpear, violar y asesinar.

En este contexto y advirtiendo la situación crítica actual, las Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá) de la provincia de Santa Fe, emitieron un comunicado (1) en el que exigen que se declare en forma urgente la emergencia nacional por violencia de género. Apoyándose en las cifras sobre denuncias por violencia familiar difundidas por el Tribunal Colegiado de Familia N° 5 de la provincia, exigen una respuesta inmediata por parte del Estado. “Planteamos esta iniciativa porque queremos visualizar una situación a la que no se le está dando respuesta”, manifestó a Red Eco Sofía Botto, integrante de MuMaLá Santa Fe. ¿Qué implicaría esta declaración de emergencia nacional por violencia de género? Como explicó Botto, “el principal problema que tenemos a nivel nacional es que no hay estadísticas oficiales que permitan desplegar políticas públicas que realmente tomen con seriedad la magnitud que tiene el fenómeno de la violencia hacia las mujeres”.
Gracias al trabajo del Observatorio de Femicidios Adriana Marisel Zambrano de la Asociación Civil La Casa del Encuentro, sabemos que en nuestro país una mujer muere cada 30 hs a causa de la violencia machista. La ausencia de cifras oficiales unificadas impide una asignación adecuada del presupuesto necesario para evitar que se llegue al nivel más extremo de violencia hacia las mujeres, el femicidio. Porque, en la mayoría de los casos, antes de llegar a este brutal desenlace, hay todo un historial de distintas violencias encadenadas, empezando por la desigualdad de género y por la posición subordinada de las mujeres con respecto a los hombres que aún persiste y continúa reproduciéndose en nuestra sociedad.
En Argentina, desde marzo de 2009 contamos con una Ley Nacional de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales. Si bien muchas de las herramientas y políticas que plantea la Ley 26.485 se han puesto en marcha, es evidente que resultan insuficientes. La declaración de emergencia nacional favorecería a que las instituciones encargadas de aplicar la Ley Nacional funcionen correctamente y se ajusten a la situación que viven las mujeres que sufren de violencia.
Una realidad es que el desempeño de estas políticas se caracteriza por la heterogeneidad: cada mujer víctima de violencia está librada a la suerte del distrito del país en el que se encuentre. “Se necesita la apertura de Oficinas de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia en todas las provincias, para que logren agilizar las medidas cautelares de protección. A todas las mujeres víctimas de violencia del país se les debe garantizar igualdad de oportunidades para el acceso a la justicia mediante un asesoramiento jurídico gratuito”, plantea el comunicado de MuMaLá.
Y esto se vincula directamente a una capacitación y formación con perspectiva de género de lxs operadores de las fuerzas de seguridad y de la justicia que intervienen en los procesos y en las dependencias a las cuales las mujeres acuden pidiendo ayuda. “En muchos casos, las denuncias no se encuadran como violencia de género, o cuando se emiten las órdenes de alejamiento o exclusión no hay castigo para las personas que no las están cumpliendo”, apuntó Botto a Red Eco. Este punto es crucial, ya que, como señalan los informes anuales del Observatorio de Femicidios Adriana Marisel Zambrano, en muchos casos los femicidas cuentan con denuncias previas realizadas por las víctimas u órdenes que les prohibían acercarse a las mismas.
Según el comunicado de MuMaLá, “actualmente se destina al Consejo de las Mujeres un 0,00027% del presupuesto nacional, del cual una ínfima parte va destinada para asistencia a las víctimas”. Al no haber estadísticas oficiales, resulta imposible una correcta asignación de los fondos para poder dar respuesta integral a una problemática de tal magnitud como la violencia contra las mujeres. “Muchas veces denunciar implica la necesidad de irse del hogar, que generalmente se tiene que hacer con lxs hijxs, y no hay fondos suficientes para dar respuesta a esa situación”, indicó Botto.

No estamos solas, estamos organizadas!
El pasado 3 de febrero se realizó la segunda Caminata contra las Violencias hacia las Mujeres, en el distrito bonaerense de San Martín, bajo la consigna No estamos solas, estamos organizadas!, con el objetivo de desnaturalizar y visibilizar la situación que viven las mujeres en dicho partido y en todas partes del país. “Si nos quedamos esperando las respuestas del Estado por sí mismas no llegan”, expresó Cecilia, integrante de la Campaña Nacional contra las Violencias hacia las Mujeres, al programa Enredando las mañanas de la Red Nacional de Medios Alternativos. En la movilización, que partió desde la Estación de San Martín hasta la Plaza Principal, se denunciaron los últimos hechos de violencia contra mujeres en el Partido y se exigió el cese de la Violencia machista, así como el pedido de justicia para las víctimas.

Si sos víctima o conoces a una persona que sea víctima de violencia de género podes llamar a la línea 144 las 24 horas.

(1) COMUNICADO: http://www.redeco.com.ar/nv/index.php?option=com_content&task=view&id=15213&Itemid=99999999

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