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Justicia por Iara Carmona
Por Oriana D´Angelo / Corriendo la Voz - Tuesday, Aug. 18, 2015 at 1:18 PM

17 de agosto de 2015 | Una víctima de abuso sexual se siente abusada nuevamente cada vez que alguien defiende a su violador. Cuando los victimarios pasan a ser víctimas y las victimas pasan a ser estadísticas, una gran parte de la sociedad se destruye, junto con las esperanzas y los sueños de la víctima. Cada vez que un victimario de abuso sexual es declarado inocente y dejado en libertad, una víctima se siente más culpable del daño que causó al entorno al contar su calvario, y entonces se siente un poquito más privada de su libertad, un poquito más que cuando era sometida sexualmente: un poquito más porque ahora el abusador es legal, política y socialmente inocente. Por Oriana D´Angelo / Corriendo la Voz.

Justicia por Iara Ca...
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Iara es víctima de abuso sexual por parte de su padrastro. Su padrastro es Carlos Marcelo Cuello, es policía bonaerense. Cuello violentó tanto su cuerpo, como su mente, su alma y su dignidad como persona desde los 11 a los 15 años. Abusó de su hijastra, Iara Carmona, con una perversidad y una violencia que sólo pueden ser propias de alguien que cree que puede hacer lo que quiera con una persona, por el simple hecho de tener mayor fuerza física y un arma en la mano.

Cuello abusó de su condición de policía siempre que pudo: dejando su arma reglamentaria cerca suyo – y de Iara- cada vez que la sometía; mostrándose como un padre protector diciéndole que no esté sola en la calle porque podía pasarle cualquier cosa, como él bien veía que sucedía desde su trabajo; y, por sobre todo, haciendo un minucioso manejo psicológico de toda la familia. Cuello era tan perverso que a su esposa (madre de Iara) le decía que la chica era una “pendeja rebelde” que no la ayudaba en los quehaceres domésticos y que lo ignoraba sin motivo, por simple capricho.

Iara padeció el calvario en silencio producto de la manipulación de Cuello:“si yo caigo, vos también caes”, “nadie te va a creer“, revela con bronca y dolor, sentimientos que se perciben con sólo mirarla. “Yo no tengo papá y él todo el tiempo me decía ‘¿que querés dejar a tu hermana sin su papá también? ‘.

A los 17 años, Iara se animó y habló. Contó todo y, de inmediato la familia le creyó, la apoyó e inició las acciones legales correspondientes. Lo que no sabían era que iban a encontrarse con mas trabas que Justicia. Pese al aval del testimonio de Iara por parte de peritos y psicólogos, el Tribunal Oral Criminal N°3 de San Martín, provincia de Buenos Aires, decidió absolver a Cuello por “falta de pruebas”.
Bronca, indignación, dolor, tristeza, impotencia, fueron algunas de las tantas sensaciones que experimentaron en carne propia quienes acompañaron a Iara mientras esperaba la sentencia. Madre e hija cayeron muy fuerte, se golpearon como nunca pensaron que iban a golpearse contra una justicia patriarcal, misógina y tan cómplice como culpable de abuso sexual; pero esa caída, ese golpe tan cruel y tan duro, les sirvió para levantarse con todas sus fuerzas.

Al apelar al fallo, quedaron a la espera de una nueva fecha de audiencia en Sala de Casación, en La Plata. La fecha, que se estipulaba que sea en el mes de marzo, se pactó para el 23 de junio, informándose con un mes de anticipación a ambas partes. La movilización fue grande, lo cual le sirvió a Iara y a su mamá para sentirse acompañadas, como se habían sentido desde ese fatídico noviembre pero la jornada no fue lo que esperaban.

Al llegar a La Plata, las calles, las columnas y las paredes quedaron “escrachadas” con la cara del violador acompañado de un pedido desaforado de JUSTICIA. Cuando llegó el momento de comenzar la audiencia, se enteraron que el abogado de Cuello, también policía, Leandro Bazzano, había renunciado horas antes. Esto, según nos cuenta Iara molesta pero no sorprendida, fue una clara maniobra para seguir postergando la audiencia con el fin de seguir dilatando la verdad que todos sabemos: El Polícia de la Bonaerense, Carlos Marcelo Cuello, abuso perversa y sistemáticamente durante años de su hijastra.

El martes 18 de agosto hay una nueva audiencia. El objetivo de la familia, y de la gente que los acompaña, es ser muchos en cada de las instancias de éste largo camino en busca de Justicia. Es la presión popular en cada audiencia, en cada movilización y en cada asamblea un factor fundamental para que la Justicia haga cumplir la ley.

El martes va a estar saliendo un micro desde la Plaza de Villa Raffo (Colón y Loreto) a las 9hs – Ver https://www.facebook.com/events/1611264849116833

Fuente: Corriendo la Voz

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