| versión para imprimir - envía este articulo por e-mail |
A un año de “Borde Protector” la vida se hace desesperante en Gaza
Por Kora Meriam -
Wednesday, Aug. 26, 2015 at 12:07 PM
26 de agosto de 2015 | Hace un año terminaba la agresión llamada “Borde Protector” que Israel lanzaba sobre la Franja de Gaza, la ofensiva se detenía cuando las fuerzas de ocupación al entrar por tierra, vieron la superioridad militar de las Brigadas Palestinas en Gaza. El saldo fue de 2200 asesinados del cual 600 eran niños. Hoy las promesas de ayuda económica fueron olvidadas por la comunidad internacional.
57557.jpg, image/jpeg, 640x360
Pero el horror no acaba para la bloqueada Gaza. Entre las fronteras de Egipto por Rafah y la frontera a los territorios ocupados por el paso fronterizo de Erez. Con una población de un millón y medio de personas en una superficie de apenas 360 kms cuadrados, los problemas devenidos del bloqueo, los cortes permanentes de electricidad y la prohibición de pesca a más de 12 millas so pena de ser atacados por las fuerzas de ocupación, la vida se hace desesperante.
Bajo la última agresión de Borde Protector, con un saldo de 2200 personas asesinadas, entre ellas 600 niños, los heridos que por entonces llegaban a 11000, fueron prácticamente olvidados por la comunidad internacional, así como las promesas de ayuda económica y reconstrucción de las casas e infraestructuras prometidas.
En estos días los Hospitales de Gaza han emitido un comunicado solicitando a la comunidad internacional que se sepa sobre la situación desesperante en los Hospitales por los cortes de energía Eléctrica que ponen en riesgo las cirugías como los nacimientos de riesgo y la atención en neonatología.
Pero el gran drama, del que no se habla, es la secuela física y psicológica que ha afectado a los niños, muchos de los cuales, en su corta edad ya han sido testigos involuntarios de tres bombardeos, en el 2008, 2012 y el de 2014. Más de mil niños Palestinos de Gaza han quedado discapacitados a raíz de los bombardeos de julio/agosto 2014.
www.anred.org/spip.php?article10514