Julio López
está desaparecido
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Larga lucha por los derechos humanos en democracia
Por ANRed - Tuesday, Sep. 22, 2015 at 12:28 PM

21 de septiembre de 2015 | El pasado martes 14 de septiembre, se realizó una charla organizada por la agrupación HIJOS La Plata, en la facultad de Humanidades, donde se abordaron temáticas como el gatillo fácil y los desaparecidos en democracia. Contó con la participación de Mónica Alegre, madre de Luciano Arruga, Carlos Zaidman, miembro de la asociación de ex detenidos-desaparecidos, la abogada Verónica Heredia y Leandro Aparicio quien participa en la causa de Daniel Solano, como abogado, junto a la organización CORREPI (Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional). Por ANRed /Fotos: Archivo.


Previo a la jornada de debate, las actividades comenzaron horas antes con la pintada colectiva de un mural en recordatorio a los nueve años de la desaparición forzada de Jorge Julio López. Aunque hubo algunos inconvenientes por la negativa del decanato para plasmar la imagen (se realizó en las paredes externas del recinto educativo), todo pudo llevarse a cabo con normalidad.

La memoria intacta, pese a los intentos de borrón

La charla comenzó con la palabra de Carlos Zaidman, quien recordó que el actual edificio y todo el predio de la mencionada facultad, funcionó como centro clandestino de detenciones, y aunque “no tuvo la magnitud y la importancia de la ESMA, para nosotros tuvo algo muy importante: en este lugar se torturó, se fusiló, se exterminó, al mando de las fuerzas de tareas 5, fue éste quien golpeó al corazón de la organización obrera de nuestra zona”, explicó.

En el mismo sentido, el miembro de la asociación de ex detenidos-desaparecidos, agregó que “para nosotros este edificio contiene muchas historias, que a pesar que la quieran borrar, lo que no van a poder poner bajo la alfombra es la historia de vida de los compañeros, que es lo que venimos a reivindicar en este debate y reivindicaremos la de todos y cada uno de ellos”.

Asimismo Zaidman detalló qué tipo de operaciones se llevaban a cabo en ese lugar e insistió en que los mismos que llevaban a cabo las aberrantes operaciones hoy siguen trabajando con la misma impunidad. “Los mismos tipos que habían participado en la dictadura, fueron actores directos en los asesinatos de Darío y Maxi. Tenemos que tener memoria” remarcó.

La juventud en la mira de la represión

En el mismo sentido, Mónica Alegre, madre de Luciano Arruga, cuestionó el accionar de la policía, haciendo hincapié con la impunidad que se manejan los agentes represivos (en este caso de la Bonaerense) aludiendo que “a mi hijo con 16 años la policía le ofrece robar, él se niega, y de ahí en más es sistemáticamente perseguido, esposado, golpeado en la vía pública, amenazado de muerte”. Asimismo agregó “la lucha no empezó ni terminará con Luciano, también quiero recordar a Jonathan “Kiki” Lezcano”, a quien la policía le disparó, lo filmó y luego dejaron su cuerpo en una morgue y en una fosa común registrado como NN.

Por último, Alegre también destacó que “voy a seguir todos los días de mi vida pidiendo justicia por mi hijo, pero no tan solo por mi hijo, sino por todos los pibes. Para que de una vez esto sea un nunca más, para que no haya más pibes muertos por gatillo fácil”.

Trabajo golondrina y desaparecidos

Entre aplausos y exclamaciones de justicia, la charla-debate prosiguió con la palabra de Leandro Aparicio, uno de los abogados de Daniel Solano, quien dio detalles sobre la causa del trabajador desaparecido en Choele Choel, Río Negro, y por el cual el padre de éste se encuentra encabezando una larga lucha con protestas donde se encadenó e inció una huelga de hambre, exigiendo por la aparición del cuerpo de su hijo Daniel desaparecido el cinco de noviembre de 2011.

Con respecto a la causa, Aparicio explicó “tenemos plena certeza de que el estado no quiere hacer absolutamente nada con los casos presentes ni pasados que tengan que ver con el narcotráfico, con la trata de personas. Es el mismo estado el que participa activamente en esos delitos, no por omisión”.

“Estamos en un momento donde hemos denunciado a un primer fiscal y ahora, hemos vuelto a denunciar al segundo fiscal y continuamos dando la pelea, desde ese lugar que es Choele Choel, con las carpas al frente del juzgado” añadió el abogado, quien también ha realizado varias denuncias por trata laboral y trata sexual, ya que los trabajadores son destinados a levantar la cebolla y las mujeres son obligadas a ejercer la prostitución.

Las cifras del dolor

Por su parte, la organización antirrepresiva CORREPI, presentó una serie de datos estadísticos relacionados a los casos de desapariciones forzadas en democracia, a partir de las investigaciones y relevamientos que la organización lleva adelante desde 1983 a esta parte.


Imagen del mural pintado por la agrupación HIJOS-La Plata en la fachada de la Facultad de Humanidades y Cs. de la Educación.

En tal sentido, desde CORREPI aseguraron que en democracia existen 206 casos de personas desaparecidas con 14 casos entre 1983 y 1989 bajo el primer gobierno democrático de Raúl Alfonsín; 69 entre 1989 a 1999, durante el mandato presidencial de Carlos Menem; 19 entre 1999 y 2001, en el breve paso por el sillón de Rivadavia del radical Fernando De la Rúa; también fueron 19 los desaparecidos durante el corto paso de Duhalde por la presidencia; 42 casos presentes en el gobierno de Néstor Kirchner y 39 casos desde 2008 a 2015, en el fin de ciclo de la década ganada. Según la coordinadora 4 casos de los desaparecidos no encuentran fecha exacta de deceso.

Además, explicaron que 55% de los cosos se corresponden a jóvenes menores de 25 años, porcentaje que se ha acrecentado en las últimas décadas: 43% en los ’80; 57% en los ’90 al igual que en 2000 y volvió a crecer entre 2010 y 2015, saltando al 68% de los casos.

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