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Pueblos originarios en el contexto del balotaj: los avances logrados y el repudio a Macri
Por Política Argentina - Friday, Nov. 20, 2015 at 6:32 PM

19.11.2015 / Opinión

Diversas organizaciones de pueblos originarios se pronunciaron en contra de Macri y llamaron a “defender lo conquistado".

por Alejandro Balazote y Sebastián Valverde

Pueblos originarios ...
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“Yo conozco a Macri por la publicidad de campaña y jamás vi una propuesta para los derechos de los pueblos en tantas elecciones en que participó” (Argentina Indymedia, 08-11-15). Esta frase de la dirigente mapuche Miriam Liempe sintetiza claramente el rechazo de numerosas organizaciones indígenas al candidato de la Alianza Cambiemos-PRO. Días antes en una oportunista maniobra electoral, Macri había visitado la carpa que los indígenas Qom (junto a otros pueblos) mantienen desde principios de este año sobre la 9 de Julio y Avenida de Mayo, en pleno centro porteño, intentando mostrarse comprometido con los problemas de los pueblos originarios .

Otros indígenas conocen más la labor de Macri. Son los que viven en villas y asentamientos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Ellos sufren la falta de políticas inclusivas, la explotación y muchas veces el mortal hacinamiento en talleres clandestinos mientras la administración macrista complicemente mira para otro lado.

Horas después de la promocionada visita de Macri al acampe Qom en el centro porteño, el ENOTPO (Encuentro Nacional de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios) se pronunciaba taxativamente en contra de la candidatura de Macri, llamando a “defender los derechos conquistados durante los últimos 12 años y continuar el camino de transformación hacia un estado plurinacional, por una patria grande, plural, libre y soberana” (Argentina Indymedia, 09-11-2015). En un comunicado planteaban claramente que el proyecto llevado adelante por el Frente Para la Victoria, garantizaba la continuidad de las políticas de ampliación de derechos, de inclusión social, de integración regional y soberanía, mientras la propuesta del PRO implicaba una restauración conservadora neoliberal basada en el ajuste económico y en la conculcación de derechos.

El Kirchnerismo tempranamente dio entidad a los problemas planteados por los pueblos originarios. Ya en el año 2003 Néstor Kirchner recibió a sus dirigentes y acordaron la necesidad de construir en conjunto un nuevo Estado, con políticas de reparación histórica y de ampliación de derechos para los pueblos originarios. A su vez Cristina Kirchner (en la conmemoración del Bicentenario en 2010) recibió en la Casa Rosada a autoridades y referentes de Pueblos Originarios quienes le hicieron entrega de la propuesta “Construyendo el Pacto del Bicentenario entre los Pueblos Originarios y el Estado: una política de interculturalidad”. En ella se propiciaba la construcción de un Estado Plurinacional.

Esta “sintonía” entre el Estado Nacional y numerosas organizaciones indígenas no se limitó a una simple declaración de principios. Por el contrario, se explica a partir de la implementación de políticas que se vienen aplicando -a partir de la demanda de los diferentes pueblos-, y que ha implicado una mejora concreta en sus condiciones de vida.

Entre las diversas políticas públicas, se encuentran tanto aquellas de carácter general –destinadas al conjunto de población de bajos ingresos o en situación de vulnerabilidad– como aquellas exclusivamente dirigidas a las poblaciones indígenas como beneficiarias. Entre las primeras, podemos mencionar la Asignación Universal por Hijo (AUH), los Proyectos “Manos a la Obra”, “Microcréditos”, el Programa Ingreso Social con Trabajo “Argentina Trabaja” -que promueve el trabajo cooperativo de poblaciones que no cuentan con ingreso formal ni son beneficiarias de otros programas sociales- y el denominado “Monotributo social” (que garantiza una cobertura de salud básica), así como también el programa PROGRESAR y el plan Envión.

Entre las legislaciones y políticas específicas para los pueblos originarios, algunas han conllevado importantes transformaciones en las diferentes comunidades y poblaciones. Entre ellas, cabe destacar la Ley de Educación Nacional Nº 26.206 que instaura a la “Educación Intercultural Bilingüe” (EIB), la Ley Nº 26.502 de “Servicios de comunicación audiovisual” –que posibilitó la conformación de medios comunitarios administrados por los diferentes pueblos-, la Ley Nacional Nº 26.331 de “Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos”–conocida como “Ley de bosques”-, la Ley 26.160 “de emergencia en materia de posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades indígenas originarias del país” –prorrogada por la Ley Nº 26.554 y recientemente por la Ley Nº 26.894–. También se encuentran los relevamientos e inscripciones en el RENACI (Registro Nacional de Comunidades Indígenas) con la consiguiente obtención de las correspondientes personerías jurídicas como comunidades ante el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI). Estas políticas, a su vez se efectivizan a través de distintos niveles del Estado, ya sea nacional, provinciales o municipales y que inciden en los ámbitos locales.

A estos logros (que desde ya no reflejan los grandes medios) han aludido muy gráficamente por estos días dirigentes indígenas, al expresar: “(…) vemos los avances en reconocimiento territorial, áreas de salud y educación, entre otros temas" (Argentina Indymedia, 05-11-15). Pero a la vez advirtieron “los faltantes como la implementación de la totalidad de las leyes provinciales, nacional e internacionales que nos amparan y que además reconocen la preexistencia de nuestros pueblos” (ídem, 05-11-15). No podemos dejar de mencionar, las deudas pendientes y situaciones donde entre la “letra escrita” y “resultados concretos”, la brecha todavía es grande. En muchos casos aún no se ha dado de manera efectiva la regularización territorial, o bien se verifica el incumplimiento de la legislación que mencionábamos, por lo general a partir del freno de algunos sectores privados con la complicidad de ciertas administraciones provinciales y municipales. También es moneda corriente la estigmatización, criminalización y ejercicio de diferentes formas de violencia sobre los pueblos indígenas, con algunos casos paradigmáticos como la comunidad Qom Potae Napocná Navogoh - La Primavera (de la provincia de Formosa) o Paichil Antriao (del pueblo Mapuche, en Villa la Angostura de la provincia de Neuquén), por solo mencionar algunos ejemplos.
Frente al avance producido en los últimos años en el reconocimento de derechos, en la legislación promulgada y en las políticas públicas destinadas a los pueblos originarios se opone la “nada macrista” (en cuanto a propuestas).

En Cambiemos todo se limita a un plano estético (que oculta una ética). La foto (con Félix Díaz) como icono de pluralismo, la difusión mediática y la “construcción” en los grandes medios, de un candidato “sensible” a los reclamos, perceptivo de las necesidades y por sobre todas las cosas “abierto” al diálogo forman parte del marketing electoral. La “nada macrista” opera ocultando que su proyecto (el verdadero) no va a garantizar ninguno de los derechos adquiridos a partir de las leyes que hemos mencionado sino que por el contrario va a favorecer a los sectores más concentrados de la economía. Los pueblos originarios lo saben, tienen en claro que Macri es un lobo disfrazado de cordero.

Dr. Alejandro Balazote
Profesor-investigador Universidad de Buenos Aires, Universidad Nacional de Luján.

Dr. Sebastián Valverde
Profesor-investigador del CONICET- Universidad de Buenos Aires, Universidad Nacional de Luján.

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