A Emilia la mató la corrupción
Por Reporte Platense - Wednesday, Feb. 10, 2016 at 12:08 PM

Jueves, 04 de Febrero de 2016.- Por Bruno Barresi

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TW: @BrunoBarresi

"Yo quiero justicia para mi hija. Hacemos la movilización para que se averigüe más, que sepa más la gente, nosotros no vamos a bajar los brazos, vamos a seguir adelante"- Eugenia Curi es de baja estatura, morena y de pelo castaño oscuro. Está parada en la vereda de Plaza Moreno y mira hacia las calles 12 y 53, donde amigos, vecinos, compañeros y militantes levantan las banderas de los pueblos originarios y de distintas agrupaciones políticas y movimientos sociales para marchar hacia la Fiscalía de 7 entre 56 y 57 y reclamar justicia por su hija Emilia Uscamayta Curi, la joven que falleció ahogada el 1 de enero de 2016 en una fiesta clandestina en La Plata.

Miércoles 3 de febrero, son las 11 y Juan, el papá de Emilia, dirige unas palabras a todos los presentes: "Quiero que se sumen los movimientos sociales y todos los ciudadanos. Un pueblo sin origen ni cultura, no es pueblo. Lo que nos pasó a nosotros le puede pasar a cualquiera". Los aplausos y gritos de "Emilia Uscamayta Curi: Presente" son unánimes y a las 11:15 comienza la movilización por calle 53 hacia 7, a paso lento, mientras suenan bombos y redoblantes, flamean las banderas y distintos compañeros pegan afiches, con el rostro sonriente de Emilia y la palabra justicia, en paredes y árboles.

Son las 11:45 y frente a la entrada de la Fiscalía hay un escenario con una bandera de los pueblos originarios y otra que dice:"Justicia por Emilia". Suben los padres, los hermanos Cristian y Edgar, y Adrián Rodríguez, el abogado de la familia.

"A un mes del fallecimiento de mi hermana hacemos esta marcha sobre el pedido de justicia, que la causa no se congele, que no quede acá, que se investigue a fondo, no importa quien caiga, hay mucha gente involucrada", dice Cristian. "A Emilia la mató la corrupción, la coima, la desidia. Queremos denunciar también que deben ser investigados las autoridades de Control Urbano de la ciudad ya que fueron responsables de no clausurar la fiesta clandestina pese a todas las denuncias recibidas por los vecinos", afirma uno de los hermanos de Emilia y le pasa el micrófono al abogado Adrián Rodríguez, mientras se escuchan varios aplausos.

"El pedido de justicia atraviesa a todas las agrupaciones y jóvenes, es un derecho universal y nos convoca esa idea de concreción del sueño que Emilia descanse en paz. Emilia no murió, su energía vital está acá en las banderas, tantos colores, se ve representada en las banderas de los pueblos originarios. Estamos lidiando con sectores poderosos, capitalistas, que no tienen escrúpulos y si no estuvieran ustedes, esto se perdería en el tiempo como muchos casos que quedan sin resolver", sostiene Rodríguez.

Los bombos y redoblantes suenan acompasados y se leen las adhesiones de movimientos sociales y agrupaciones políticas a la marcha. El próximo en hablar es Edgar, mira a la gente emocionado y se le entrecorta la voz: "Hoy estaría tranquilo si mi hermana hubiese estado descansando en paz, si hubiese sido algo natural, que la pachamama se la haya llevado en forma natural, pero no fue así. Ella está acá, lo está viendo y eso me da mucha fuerza para seguir adelante, sacar adelante a mi viejo, a mi vieja, a mi familia y sé que vamos a pelear hasta lo último, no vamos a bajar los brazos, vamos a pelear hasta que se haga justicia y acá tienen que caer los responsables. ¡Y que viva Emilia!".

"¡Viva!" exclaman los presentes, seguido de un largo aplauso. Juan, abuelo quechua integrante de "Hijos del Cóndor", sube al escenario: "Voy a saludar en el idioma de mis abuelos- se dirige al público en quechua-. Que el dueño del sol te de salud, coraje y energía -traduce-. Necesitamos coraje y templanza para reclamar por Emilia".

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Los padres y hermanos de Emilia, junto al abogado, ingresan a la Fiscalía para ser recibidos por el fiscal de la causa Álvaro Garganta. Todos los presentes miran con expectativa el recorrido de los familiares y del abogado, quienes vuelven a ver al fiscal tras un mes de feria judicial.

Ezequiel Lopardo fuma un habano y viste una boina negra. Tiene el brillo en los ojos de angustia, bronca y dolor. Es militante de la agrupación Jorge Ricardo Masetti de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata y miembro de Quebracho, era amigo y compañero de militancia de Emilia. Sube al escenario: "Nos inunda el dolor, además de una gran compañera, una gran luchadora, una bella mujer, nos inunda la bronca de injusticia porque nos la robaron, porque tenía un montón de sueños, muchos planes por delante y hoy sus familiares y amigos ya no la tienen al lado. La tenemos que tener al lado todos nosotros con la lucha, la pelea, mantener viva la memoria. Era una compañera que hubiese estado en todas las luchas que se están dando, por despidos, por Milagros Salas, estaría ahí ella. Tenemos que ir hasta las últimas consecuencias, yendo a las últimas consecuencias Emilia va a estar de vuelta con nosotros y nos va a regalar de vuelta su risa".

Los familiares y el abogado bajan las escaleras de la Fiscalía, salen por 57 entre 7 y 8 y caminan hasta el escenario. Suben Juan, los hermanos y Adrián Rodríguez. "La sensación que me llevo al salir de Fiscalía es que pobre está el poder judicial y la justicia. Hay que seguir en la lucha, ser más en las calles, marchar, machacar hasta que esto se esclarezca. Justicia por Emilia", afirma Cristian.

Juan dirige sus últimas palabras a los presentes: "Gracias hermanos, de corazón, Emilia está presente en este momento. Una vez más:

-¡Jesica Emilia!
-¡Presente!
-¡Jesica Emilia!
-¡Presente!
- ¡Jallalla, Jesica Emilia!
- ¡Jallalla!"

Jallalla, en quechua, es esperanza, satisfacción y agradecimiento por la vida.

Adrián Rodríguez baja del escenario y comenta algunos detalles del encuentro con el fiscal Álvaro Garganta: "El fiscal pidió que le demos tiempo y que aportemos todos los elementos de prueba que consideremos necesarios. La causa está en un impasse porque están resolviendo cuestiones técnicas presentadas por los cuatro imputados y eso genera que no se pueda investigar como uno quisiera, la feria se levantó este lunes".

Respecto al pedido del cambio de carátula de la causa, sostiene:"El cambio de calificación legal obedece a que el reproche que se le debe formular a los cuatro imputados organizadores de la fiesta es de homicidio simple con dolo eventual, considerando que su responsabilidad por la muerte de Emilia es mucho mayor que la de un homicidio culposo.

El homicidio culposo se refiere más que nada a imponderables, accidentes, negligencias que podrían haberse evitado y no hubo intención. En este caso, los cuatro organizadores administraron un riesgo que es jurídicamente reprochable y aún así siguieron adelante en su empresa considerando que hubo muchas personas que sufrieron problemas de ahogamiento en la fiesta y no la clausuraron a la zona de piletas ni concluyeron con la fiesta, siguieron adelante hasta que murió Emilia.

Ahora lo importante es que todas las personas que puedan aportar información, por mínimo que considere, se acerquen, escriban a justiciaporemilia@gmail.com y esperar un tiempo razonable haber si la causa toma otro rumbo como el que pretendemos, ajustado a la realidad de los hechos", concluye el abogado.

Una justicia sin mayúsculas, vapuleada por la corrupción, los negocios y complicidades de autoridades municipales, que mataron a Emilia, pero en su legado están los familiares, amigos, compañeros y el pueblo para reclamar y exigir la condena de los responsables.

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