Julio López
está desaparecido
hace 6401 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Erase una vez un bosque…
Por Teresa - Thursday, May. 05, 2016 at 11:58 AM
recordandoelcolor@yahoo.es

Ya no recuerdo como es un bosque. Pero un bosque de verdad, con sus olores y sus historias que se desarrollan.

Desde pequeños hemos escuchado muchos cuentos e historias que se desarrollan en un bosque.  Estas historias nos hacen imaginar un lugar idílico, donde la naturaleza adquiere un papel principal. Es el lugar ideal para escenificar la magia y la fantasía, y es que muchas tradiciones, creencias y religiones se basan en la belleza y espiritualismo que desprende  un bosque.

Adentrarse en un bosque es percibir la tranquilidad que da un silencio roto sólo por el ruido de los animales que habitan en él, y por el crujido de ramas y hojas que pisamos al caminar. Al respirar es como si estuviéramos recibiendo bocanadas de vida y bienestar. Sentimos la armonía, la conexión de nuestro ser físico y espiritual con los elementos de la naturaleza.

¡Qué lejos queda esta sensación! Cuando paseo por un “bosque” ya no siento esto, ni siquiera, me deja recordar el significado de deja vu. Ya no es idílico, ni fantástico, ni percibo esa armonía. Camino por un paisaje creado, plantado, monótono y poco natural. Ya no es “bosque”.

El hombre desde tiempos ancestrales ha estado ligado al bosque ya que este ha provisionado de alimentos, agua, medicinas y madera para calentarnos. Incluso en muchas ocasiones como refugio y santuario. No  critico el que existan plantaciones para explotación, si esta explotación se hace de forma sostenible.  Defiendo el bosque natural por todos los valores que da.

El bosque de los cuentos ya no lo encuentro en nuestro entorno. Sólo queda en los recuerdos de nuestros mayores, en las historias y en la imaginación de las personas. Quizás los pocos ejemplares de árboles viejos que nos quedan mantienen alguna esperanza de recuperar su hábitat, y no se nos mueren de pena.

agrega un comentario