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Santa Fe: otro episodio de abuso policial en barrio San Lorenzo
Por Centro Cultural y Social El Birri - Wednesday, Jul. 27, 2016 at 10:07 PM

Estimadxs, Solicitamos su colaboración para difundir el siguiente comunicado emitido por La Antirepresiva Santa Fe y el Centro Cultural y Social El Birri.

Santa Fe: otro episo...
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COMUNICADO: OTRO EPISODIO DE ABUSO POLICIAL EN EL BARRIO SAN LORENZO

“Trátenlo bien al pibe” dijo Ariel, y se desató una cadena de violencia policial

El domingo 24 de julio, cerca de las 18:30, Ariel, Adriana y sus nietos de 12 y 8 años volvían de pasar un domingo en familia. En la esquina de Jujuy y Juan Díaz del Solís, fueron testigos de cómo efectivos de la Policía de Acción Táctica (PAT), le gritaban y le pegaban patadas en las pantorrillas a un joven al cual estaban “requisando”. Ariel se dirigió a los policías: “no se abusen, trátenlo bien al pibe”. Al escucharlo, uno de los oficiales se dirigió a la pareja, los apuntó con su arma y les ordenó, amenazante, que no interfieran en el procedimiento. La nieta de 8 años rompió en llantos y Adriana le pidió al oficial que se calmara. Continuaron caminando hacia su hogar. Los efectivos de la PAT siguieron a la pareja y a los niños hasta su domicilio, y en el momento en el que Ariel se disponía a entrar a su vivienda, uno de los policías lo vuelve a apuntar con el arma. Adriana, desesperada por el riesgo, se interpone entre su pareja y el arma, e intenta registrar con su celular esa situación de amenaza de muerte. “¡¿Qué filmas vos, vieja hija de puta?!” le gritó y le quitó el teléfono. En ese momento alrededor de veinte policías de la PAT iniciaron una feroz golpiza sobre Ariel y Adriana, con patadas y golpes de puño en todo el cuerpo. Los golpes se extendieron hacia todos aquellos que intentaron interferir, incluida la hija de Adriana, quien está embarazada. Los agentes de la Policía de Acción Táctica se multiplicaron y se sumaron agentes de la Policía Comunitaria.

Dispararon aproximadamente diez balas con perdigones de goma en contra de la gente, pero afortunadamente no hirieron a ninguno de los vecinos presentes, entre los cuales se encontraban varios niños. Adriana, que ya estaba arrodillada en el piso, fue golpeada por cuatro policías simultáneamente. Su pareja, desesperado, arrojó una piedra a los agentes intentando defenderla y golpeó a una policía mujer en rostro. Ese piedrazo fue lo único que medios como Aires de Santa Fe relataron de este largo episodio de violencia desatada por la policía en el barrio San Lorenzo.

Luego de este episodio de brutalidad en la calle, la violencia continuó adentro del patrullero: mientras los trasladaban a la Seccional 2da, los policías los amenazaban y golpeaban sus cabezas contra el interior del móvil. Ya dentro del calabozo, los policías que les habían pegado afuera desfilaban para seguir golpeándolos. Les alumbraban las caras uno a uno, y prometían que la tortura no terminaría ese día: “Ahora sabemos quiénes son, los tenemos re fichados”. Después de estar 6 horas detenidos, al dejarlos en libertad, el oficial en ese momento máxima autoridad de la Seccional 2da, les dice: “La próxima vez que vean un procedimiento de requisa, cállense la boca y sigan adelante, como si no vieran nada”. Este llamado a la no intervención en la “labor policial” es otra prueba de cómo la policía se desempeña en el barrio San Lorenzo: la policía puede hacer lo que le plazca, deshumanizando a los vecinos, sin tener que dar explicaciones a nadie. Si alguien pide trato digno, entonces será golpeado salvajemente. Cuando volvían a su casa, la pareja pasó por el trailer de la Policía de Acción Táctica, ubicado en la única plaza del barrio, en las intersecciones de las calles General López y Bv. Zavalla y fueron amenazados nuevamente por los policías allí parados, que hoy los intimidan cotidianamente, ya que un turno de la guardia se ha ubicado exactamente en frente de su domicilio.

Ariel volvía a su casa e hizo un llamado de humanidad a la policía: “Trátenlo bien al pibe”, les pidió. A Ariel, hoy, con el cuerpo lleno de marcas por los golpes policiales, se le imputan tres delitos: “lesiones leves causadas un agente policial”, “daño al móvil policial” y “resistencia a la autoridad”. A Adriana, que se interpuso entre el arma policial y la vida de su compañero, le imputan “resistencia a la autoridad”, y la versión policial dice que le quiso robar un arma a un agente.

UN EPISODIO ENTRE MUCHOS OTROS: LOS ABUSOS DE LA POLICÍA DE ACCIÓN TÁCTICA EN EL BARRIO SAN LORENZO

Ya sabemos por qué el pedido de “Trátenlo bien al pibe” enoja tanto a los policías: los Policías de Acción Táctica están acostumbrados a hacer lo que quieren con los jóvenes del barrio. Su tarea, durante gran parte de su tiempo es detener a jóvenes, varones, precarizados, empobrecidos, que usan ropa deportiva, que viven en barrios que se visualizan como “peligrosos” y que encajan perfecto con su imagen de “sospechoso”. La policía demuestra que está haciendo algo llenando formularios con números de detenciones por averiguación de identidad. Eso pide el poder político, eso hace la policía. Los jóvenes lo saben: continuamente son requisados de manera violenta y abusiva, desde que está la PAT en San Lorenzo esto ha empeorado, nos dicen. La reacción policial desmedida de la PAT hacia un vecino y una vecina de barrio San Lorenzo es un ejemplo más de cómo esta policía actúa en estos sectores de la ciudad: brutalmente, amenazante, con total impunidad. Hace tres meses, Matías Monzón, volvía de jugar al futbol y recibió perdigones en la cara de la mano de un Policía de Acción Táctica. Hoy, sigue atravesando intervenciones quirúrgicas para no perder la vista y su familia, reclamando justicia. "Disuasión y neutralización a partir de la presencia proactiva", "combate del narcotráfico" o "resguardo de la integridad física y la seguridad de los habitantes del barrio": estos son los argumentos mediante los cuales el Gobierno Provincial justificó la implementación de la PAT en barrio San Lorenzo. Pero ya sabemos y ya hemos denunciado, y no paramos de comprobar, que la intervención de la PAT en el barrio se presenta como una fuerza de ocupación territorial violenta, brutal; la PAT es uno de los brazos armados de la política de estigmatización y hostigamiento hacia los habitantes del barrio, que llega a ser aun más profunda que la de policía tradicional.

Desde Antirrepresiva Santa Fe y el Centro Cultural y Social Birri, radicado en este barrio, consideramos con urgencia:

1. Exigir el inmediato pase a disponibilidad de los agentes involucrados en este hecho.

2. Exigir explicaciones a las autoridades del Ministerio de Seguridad de la Provincia por la actuación de los agentes de la PAT en este caso.

3. Implementar una fiscalía especializada para la investigación de los casos de violencia policial –integrada por civiles no comprometidos con la política represiva del Estado.

4. Poner en discusión la presencia de estas fuerzas de ocupación territorial no sólo en Barrio San Lorenzo; estamos obligados a denunciar que esta es la presencia del Estado en los barrios, y que es evidente el contraste con la falta de garantías al acceso a infraestructura y servicios básicos: vivienda digna, salud, educación, deporte, esparcimiento y actividades culturales.

DENUNCIAMOS EL ACCIONAR DE LA POLICÍA DE ACCIÓN TÁCTICA EN EL BARRIO SAN LORENZO; VIOLATORIO DE LOS DERECHOS HUMANOS MÁS ELEMENTALES. BASTA YA DE VIOLENCIA POLICIAL! BASTA YA DE AMENAZAS Y TORTURAS POR PARTE DE LA POLICÍA!

Antirrepresiva Santa Fe | Centro Cultural y Social Birri

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