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Un año sin puente en Punta Querandí: “Esto es el muro de Berlín”
Por Mdp Punta Querandí -
Tuesday, Aug. 16, 2016 at 2:44 AM
movimientoendefensadelapacha@gmail.com
Se cumplió un año desde la caída definitiva del puente de acceso a Punta Querandí, en el límite de Dique Luján y Maschwitz. En La Posta del Paraná hablamos con Alejandra Ramirez y Carlos Arrambide, vecinos de la calle Brasil y el Arroyo Garín, quienes denunciaron el abandono estatal de la zona. Ambos coincidieron en que el Municipio de Tigre no quiere reponer el puente y con respecto a la Intendencia de Escobar, ven retrocesos en la apertura de la calle usurpada por el country San Benito.
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El aislamiento de los vecinos preexistentes es uno de los problemas ocasionados por los megaemprendimienos de barrios privados, todo lo contrario a verse beneficiados por supuestas mejoras en los accesos públicos, una promesa de quienes defienden este modelo de ‘desarrollo’. El ejemplo de las familias de Punta Querandí es paradigmático. Desde hace un año, la única manera de acceder a esta zona es a través de una lancha que se usa como bote con una soga de la cual se tira para pasar de una orilla a la otra. Los más afectados son quienes viven en este sector del paraje Punta Canal, pero esta situación también ha sido una limitación para distintas actividades del sitio sagrado Punta Querandí, como las visitas de colegios.
El puente se terminó de hundir el 4 de agosto de 2015, luego de sufrir un primer desmoronamiento en noviembre de 2014. Desde mucho tiempo antes, los vecinos gestionaron reiteradamente mejoras ante el Municipio de Tigre para conservar la estructura y evitar su caída, pero los reclamos fueron desoídos.
Al mismo tiempo, el Municipio de Escobar aún no cumplió su promesa: recuperar la calle perimetral que une Punta Querandí con Maschwitz. Este acceso obligatorio por ley se mantiene bloqueado por el barrio privado San Benito.
“NO HAY VOLUNTAD POLÍTICA, ES UNA CARGADA”
Al relatar los padecimientos diarios que sufren, Alejandra Ramirez, madre de seis chicos, contó: “Ayer (3 de agosto) tuvimos un problema con la precaria lanchita que tenemos para cruzar de lado a lado, quedó totalmente bajo el agua. Yo tenía que ir a una consulta con el médico porque estoy con una gripe ya hace 3 semanas. Los chicos tenían que ir al colegio, ayer al mediodía había que ir a comprar para cocinar a la noche. Anoche mi marido vino tarde, con mis dos hijos pudieron moverlo. Esto no es invento, es real lo que estamos viviendo”.
Hartos de esperar, los vecinos incluso están dispuestos a comprar los postes para armar un puente precario. Esto fue comunicado al Delegado de Dique Luján (Tigre), Hugo Cerrillo. “Hace como tres meses fui a ofrecerles que yo les compraba los palos que para que él haga el puente. Me dijo que no, por favor, faltaba más, se negó a tomar una ayuda. Ya que nadie se ocupa nos vamos a ocupar nosotros. Hace dos semanas o tres fuimos con Charly a averiguar, sale 8 mil pesos poner un puente y tal vez más, porque necesitamos maquinarias y montones de cosas que están fuera de nuestro alcance. El delegado de Dique Luján se niega a ponernos el puente”.
“Estamos hablando de poner un puente donde podamos pasar nosotros, una moto. No es una fortuna como dijo en su momento el intendente o como me dijo el delegado en la cara. ‘A mí me sale millones’”, recordó Alejandra Ramirez.
Muy lento para hacerle las mejoras, pero rapidísimo para retirar el puente, así fue el accionar del Municipio de Tigre. “El delegado a las 24 horas levantó el puente con una máquina, una pluma. ¿A qué voy? No les interesa esta parte. Si en 6 años se le estuvo pidiendo que lo vengan a levantar para arreglarlo y él dijo que estaba fuera de su alcance, ¿cómo hizo en menos de 12 horas para conseguir dos plumas?”, expresó.
“No hay voluntad política, es una cargada. Cuando estuvimos con más de 2 kilómetros de camalotes, el Delegado se me para desde la orilla de enfrente diciéndome: ‘Esto no estaba la semana pasada’. No me vengas a decir, hace un mes que estamos con camalotes, a mí me vino a rescatar del medio del río Prefectura, los Bomberos, toda la historia”, manifestó Alejandra, quien a principios de abril fue noticia al quedar atrapada durante horas cuando intentaba cruzar con el bote.
La demorada apertura de la calle de acceso bordeando el barrio privado San Benito, también fue mencionada por Alejandra. “El Municipio de Escobar tampoco nos responde. Todo el mundo sabe que clausuraron unos obradores que había a la entrada del country San Benito, perfecto, ¿y ahora? ¿Quién se está fijando que están poniendo rejas directamente en la calle? No chicos, mañana yo clausuro la Brasil me hago un caserón en el medio de la calle que nadie me venga a decir nada”.
“Somos personas, somos seres humanos, hay criaturas, yo tengo chicos, adolescentes, Charly tiene un nene que se esquinzó el pie por cruzar cuando estaban los camalotes y nadie respondió. ¿Qué están esperando? ¿Vos te crees que con el estado gripal que tengo alguna ambulancia vino?”, agregó la vecina.
“Yo le pido a la gente realmente que nos ayuden a que alguien nos ponga un puente, no estamos pidiendo nada. Si el intendente Sujarchuk dijo que él va a trabajar para que todas las comunidades tengan un libre acceso hacia los lugares que necesitan… hola vivo de este lado. Denos una mano, que alguien nos escuche”, expresó Alejandra.
“ESTAMOS VOLVIENDO A LA ÉPOCA MEDIEVAL”
Carlos Arrambide, cuestionó a los dos Municipios, aunque reconoció que al menos con Escobar hay diálogo. En el inicio de su largo testimonio, contó: “Un año antes que se cayera el puente yo había presentado un acto administrativo en Tigre con fotos que saqué desde mi canoa de cómo el agua estaba socavando todo el apoyo. Con el tiempo me contestaron por escrito que lo iban a arreglar, un tal concejal Macri, pero nunca lo arreglaron. Yo sé que en el fondo todo esto es una mentira, Tigre nunca quiso el puente”.
Charly apuntó al gran poder sobre los gobiernos que tiene la empresa EIDICO, quien está detrás de los emprendimientos inmobiliarios en la zona y es la responsable de la destrucción del camino vehicular preexistente: el camino de la vía muerta que unía Punta Canal con Maschwitz y Benavidez.
“En su momento usaron al ejército para poner un puente Bailey porque tenía a los countries con dos cautelares para que no tocaran el camino de la vía muerta”, recordó. Al constatar la existencia de un puente, el Juzgado Contencioso Administrativo Nº1 de San Isidro, a cargo del juez José Abelardo Servin, dio de baja la prohibición de destruir estos terrenos ferroviarios, que se convirtieron en un canal de acceso náutico. “O sea que rompieron el camino de la vía muerta, sin escriturarlo, sin ser de ellos, de prepotencia”.
“El puente era alquilado, o sea que las cosas estaban peor que antes, porque antes había un puente precario pero pasábamos caminando o en moto. El Batallón 601 de Campo de Mayo derribó ese puente para poner un puente Bailey que se lo alquilaba AYSA, te das cuenta que está todo armado”, agregó.
Para Charly otro ejemplo de cómo la empresa utilizó al gobierno para beneficiarse fue una obra hidráulica de la Provincia de Buenos Aires, que se ejecutó en el verano de 2011. “La empresa usó al Estado para dragar el Garín, habrán hecho una limpieza allá arriba (en Escobar, Pilar y Malvinas Argentinas) pero ensancharon desde las vías del ferrocarril hacia el Canal Villanueva, cosa de hacer un futuro canal navegable”.
Este mecánico fanático de los citroens recordó su larga trayectoria de reclamos a distintos organismos, luego de mudarse a Punta Canal en el 2006. “Yo sabía que iban a hacer countries porque yo veía las calles de tierra de San Marco, el San Benito era todo campo. Pero como se tildan de super católicos, se supone que son unos santos, uno dice: ‘Nos vamos a llevar bien, me van a hacer la calle supongo’”.
Todo lo contrario, fue el inicio de una larga lucha. “Yo hice todos los escritos y los papeles, presenté cinco actos administrativos al ADIF (Administradora de Infraestructura Ferroviaria), dos a Planeamiento, en el Concejo Deliberante de Tigre presenté por el tema del puente, en el Concejo Deliberante de Escobar por el tema de la calle. Hice en el 2009 un acto administrativo sobre la calle, esto viene de hace rato”.
“Acá lo que veo es una desidia social y el cerco de Berlín veo en frente de casa. Porque les guste o no, del otro lado del cerco somos todos negros, somos todos patoteros, somos todos delincuentes”, relató.
Arrambide hizo hincapié que el camino de acceso es para beneficio de toda la población. “Cuando yo pedí la calle lo hice con la gente de Maschwitz, porque a mí me sacaron el acceso a mi casa pero la calle es de la gente que quiere ir a pescar, quiere ir a recrearse al costado del arroyo Garín. Si el country se la usurpa, Maschwitz se queda sin acceso al arroyo. Un poco más se van a querer privatizar el arroyo Garín si es que tienen en mente hacer un country en la ruta 26 antes de la calle Brasil, frente al barrio privado Santa Isabel, eso es adelantarme, pero lo veo”, alertó el vecino.
“La gente de Maschwitz que quiere ir a Punta Querandí no puede, tiene que cruzar con una lanchita que cada dos por tres se hunde. El día de mañana, uno se cae, se llega a ahogar, llega a pasar una desgracia, quiero saber quién se hace responsable”.
En la actualidad, Carlos Arrambide y otros vecinos aislados pasan por adentro del barrio privado San Benito para poder ir a Maschwitz, situación a la que el country está obligado hasta que se abra la calle perimetral. Pero esto implica atravesar situaciones conflictivas: “Me hostigan, me patotearon desde el auto, por internet, me tratan de negro villero. Seré un negro pero tengo escritura”, declaró.
“Estoy cansado de tener problemas, porque yo no estoy tranquilo, sé que mañana tengo problemas con uno, pasado con otro. No puedo pasar por un barrio donde me odia la mayoría. Tampoco me importan, que hagan su vida: tengo que pasar por adentro les guste o no y se los dije. Si vos no me dejas pasar olvídate porque te saco una cautelar y paso. O me abrís la calle o paso. ¿Pero por qué tengo que vivir así?”.
Luego de mencionar distintos reclamos que ha efectuado en La Plata, en Tigre, Escobar y en la Ciudad de Buenos Aires, Charly declaró: “Es un quilombo, y no puedo estar así, no puedo hacer mi vida tranquilo porque estos energúmenos hacen lo que se les da la gana”.
Una de esas veces que reaccionó ante un atropello de la empresa EIDICO fue por el muelle del Complejo Villanueva con el que pretenden prohibir el ingreso al Canal Villanueva a la altura de Punta Querandí. “Los denuncié en la Fiscalía Federal de San Isidro cuando empezaron del lado de Benavidez y en la Fiscalía Federal de Campana cuando lo empezaron en Maschwitz. Cortar el río es un delito federal y la Prefectura me dio la razón”.
“Hubo que hacer denuncias e instancias legales en los organismos competentes en su debido momento. Por eso los tipos están que no pueden escriturar [se refiere a EIDICO y San Benito por las tierras ferroviarias], se armó un quilombo bárbaro, me odian. Más de uno sabe la posta, pero el 90% no, soy un negro de mierda, un villero. Pero con el tiempo la gente se está dando cuenta”, expresó.
MÁS DIÁLOGO PERO SIN SOLUCIONES
Hace varios programas en La Posta del Paraná difundimos una grabación del empresario Jorge O’Reilly de noviembre de 2014. Al respecto, Charly destacó: “Lo que me dijo ‘Jorgito’ es verdad (‘Vos que seguís yendo a la Municipalidad, que no te dan pelota, te están tomando el pelo’). Con el correr del tiempo no veo cambios, en la Municipalidad me dicen todo que sí, que tengo razón, pero la calle la veo para atrás. Antes había un cerco, ahora una reja. No veo a los de la Municipalidad que vayan a presionar. La Municipalidad no nos ampara, no nos da bola, no existimos. Yo fui a la Municipalidad 20 mil veces y los del country se me cagan de risa”.
A pesar de que ninguna de las intendencias solucionó la problemática del acceso, hay algunos matices: en Tigre los barrios privados son intocables; en Escobar, el nuevo intendente al asumir clausuró varios emprendimientos, situación por la que un gran descontento por parte de los dueños de lotes de algunos countries por la imposibilidad de construir sus casas. A esto se le sumó el 1 de julio un fallo del Juzgado Federal de San Isidro el 1 de julio. “Los funcionarios de Obras Públicas (de Escobar) están acostumbrados a que los prepotean, los patotean”, contó Arrambide sobre la presión que los propietarios y sus abogados realizan en las oficinas municipales.
Por un lado, Arrambide valoró cierto acercamiento de las nuevas autoridades escobarenses: “Desde un punto de vista veo un avance, en la puerta de casa tuve al Secretario de Gobierno, al de Obras Públicas y al de Planeamiento. Por lo menos con los de la Municipalidad de Escobar hay dialogo”. Sin embargo, expresó tajante: “Cada vez veo más lejos la calle. Ahora está el cerco y una reja. Pasan por arriba de la gente del Municipio de Escobar, pasan por arriba de Sujarchuk que se ‘comprometió’ (a abrir el camino). Entonces estos tipos pueden más. Ahora si yo tengo una almacén y viene un menor y me compra una cerveza me clausuran el almacén, me sacan toda la mercadería, me hacen bolsa. ¿Y los countries pueden hacer lo que se les antoja? Entonces no seamos idiotas, el poder económico no puede pasar por arriba de la gente”.
Más allá del problema ambiental por el relleno de humedales, el fenómeno -nada nuevo- de los countries conlleva un conflicto social. “Estamos volviendo a la época medieval donde viven en sus lujosos castillos y todos laburamos para ellos”, consideró Charly, quien también hizo mención al crecimiento de las protestas contra los barrios privados en muchos municipios de la región. “Ya es muy colectivo, la gente está que trina, se siete ultrajada y violada”.
https://puntaquerandi.wordpress.com/2016/08/07/primer-aniversario-sin-puente/