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Paro General: La clase trabajadora en la primera línea de la resistencia
Por Izquierda Revolucionaria - Hombre Nuevo - Thursday, Apr. 06, 2017 at 3:59 PM

6 de abril de 2017 | A pesar de la campaña de demonización gubernamental contra el legítimo reclamo de los/as trabajadores/as, en todo el territorio nacional la huelga general de este 6/04 se viene desplegando con gran fuerza, manteniendo un hilo de continuidad con las movilizaciones del 7 de marzo, el paro internacional de mujeres del 8, la marcha federal del 22 y la masiva convocatoria del 24 en repudio al golpe genocida en un nuevo aniversario.

Paro General: La cla...
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La burocracia sindical de la CGT se ha visto obligada, muy a su pesar, a realizar la convocatoria a este paro general, buscando con esta medida descomprimir la bronca que se viene gestando por abajo, para seguir negociando con el gobierno en mejor posición. En un tono conciliador, han planteado al conjunto de las y los trabajadoras/es que nos quedemos tomando mate en nuestra casa, que el paro “no es contra nadie”. Sin embargo, la jornada, arrancada por las bases es un golpe importante al macrismo. El impacto del paro ha sido muy fuerte en gran parte del país, frenando el funcionamiento de fábricas, transportes y servicios. Además, a pesar del perfil dominguero que quisieron imprimirle las direcciones sindicales, desde la izquierda y los sectores combativos del sindicalismo nos hemos manifestado en el día de hoy con numerosos cortes, piquetes y bloqueos, garantizando un paro activo en contra del ajuste macrista. Los cortes se hicieron en la Ciudad de Buenos Aires y sus accesos (Puente Pueyrredón, Panamericana y 197, Acceso Oeste, Puente la Noria, Constituyentes y General Paz), en otras zonas de la Provincia de Buenos Aires como La Plata y en muchas otras provincias del país, con puntos fuertes como Rosario y Córdoba. El paro activo contó además con actos y movilizaciones, incluido el escrache sobre el Hotel Hilton en donde Macri se reunió con el empresariado en el Foro Económico Mundial, dando la espalda a los reclamos de los trabajadores y sonriendo a los empresarios, dejando en claro cuáles son sus intereses. La realización de movilizaciones y piquetes en distintos puntos del país pone en evidencia la voluntad de lucha de importantes sectores de nuestra clase, a pesar de las amenazas represivas del gobierno y del boicot burocrático frente al carácter activo del paro.

El escenario de fondo sobre el que se desenvuelve este estado de movilización de nuestra clase, es el empeoramiento de las condiciones de vida y la profunda pauperización que sufre la clase trabajadora ocupada, precarizada y desocupada. Con la aplicación de una política de techos salariales, combinada con un incesante aumento del costo de vida, se lleva a cabo una brutal transferencia de la riqueza social de los sectores populares en beneficio de la clase dominante, principalmente hacia el gran capital transnacional. A su vez, el gobierno del empresariado lleva adelante una política laboral de más largo alcance, a través de medidas que buscan bajar el “costo laboral” de forma estructural: la modificación de los convenios colectivos de trabajo en pos de la flexibilización laboral, la modificación de la Ley de ART y de la legislación laboral, el protocolo antipiquetes para reprimir la protesta social, entre otras. Estos embates, lejos de morigerase en el corto plazo, adquirirán una mayor dimensión en la medida que el ajuste se profundice.

A esta avanzada económica se le suma el ataque en el terreno ideológico contra los/as trabajadores/as y el pueblo, en el cual se enmarca la reciente convocatoria del 1A, respaldada fundamentalmente por sectores medios reaccionarios. A pesar de la baja convocatoria de la movilización en apoyo a la actual gestión, las corporaciones mediáticas colaboraron en que se magnifique el impacto en favor del gobierno. Bajo consignas retrógradas y derechistas, la marcha reclamó la profundización de la política oficial, contra los piqueteros, los inmigrantes y el paro docente, exigiendo mano dura para garantizar el orden institucional. En ese marco, aplauden los episodios de represión que el macrismo desplegó contra las y los trabajadores en distintos puntos del país en esta jornada sobre todo en Panamericana con la presencia de Burzaco (asesor de Sobisch, asesino de Carlos Fuentealba).

Paro general, ¿y después?

Las diversas luchas que se despliegan en el país son la expresión de un cambio en la situación política, no sólo por la masividad de las convocatorias sino por las características de los reclamos, que han logrado paulatinamente incorporar definiciones políticas en defensa de los derechos de los sectores explotados y oprimidos, más allá del horizonte estrictamente sindical.
En este escenario, las organizaciones que nos reconocemos del campo popular debemos trabajar incansablemente para lograr una coordinación de las luchas que nos permita situarnos en una mejor correlación de fuerza en nuestro enfrentamiento con el macrismo, desplegando una acción unitaria que permita golpear con un solo puño, a partir de la elaboración de un plan de lucha escalonado y sostenido, cuya convocatoria no vendrá de las conducciones burocráticas entreguistas, sino de su impulso desde las experiencias de lucha que están en desarrollo. Combinado con esta táctica para la etapa, necesitamos avanzar en la construcción de una alternativa política para los/as trabajadores/as y el pueblo, con independencia de clase y que luche por un programa anticapitalista y en defensa de los intereses de las grandes mayorías.

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