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(poema) Diablo blanco amenaza de muerte
Por Jhon Jairo Salinas -
Friday, Apr. 07, 2017 at 9:17 PM
No me imagino bombas fosforo desollando las piles de casi nueve mil millones de seres humanos…
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Las bombas queman la esperanza de niños árabes,
el sol purpura seguirá ardiendo en columnas de humo,
soldados a punto de encrespasen en fuego,
el polvo nuclear esparcera gritos agónicos de muerte…
¿Acaso Hoy la humanidad es simplemente un experimento de muerte?
¡¡Si, el nuevo Hitler es rubio
Queriéndonos llevar a cósmico diluvio¡¡.
No me imagino bombas fosforo desollando las piles
de casi nueve mil millones de seres humanos…
Esqueletos forrados de piel…
Aves hediondas lamiendo los huesos,
armas nucleares como dragones botando fuego.
Aviones de guerra como buitres oscuros,
con su emplumaje arrojando el estiércol de muerte,
montañas susurro de espanto
los tanques ruguen con su canticos de muerte volcando la alambrada,
murmurantes mascaras de miedo,
en trincheras invernales cuerpos volando en átomos
los niños gritando,
su voz infantil estruendo en segundos de vida.
En campos adornados de espanto y miseria.
En Los campos ya no habrá semillas ni agua para beber
En holocausto nos llevaran al infierno.
¡Hoy los bosques tiemblan¡
¡la naturaleza se revela¡
¡los pajaritos ya no cantan¡
con bombas el agua se envenena..
las nubes no serán grises, serán negras como el alma
de loco asesino.
El firmamento desconsolado ante los ojos de un ser supremo,
Que nos llevara al mismísimo infierno.
¡¡Si, las razas se han de extinguir¡…
Pronto vendrán nuevos individuos saliendo de las cenizas
en polvo extinguido…
Un silencio infernal vestigios de vida convertida en gusanos,
pocas almas perdidas en lejanos horizontes,
pocos muertos de cuerpos inocentes,
no hay vida, no hay ilusión,
seguirán viviendo para tan solo morir,
por una locura de alguien sin compasión…
Una hidra blanca
cabalga en túnica negra…
escondiéndonos en el bosque del diablo
como fantasmas de antaño
huyendo de un blanco diablo
que seguirá lanzando calaveras como bolas de nieve
quedando el solo adorando sus becerros de oro