Julio López
está desaparecido
hace 6422 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

La lucha de una madre contra los agrotóxicos
Por ANRed - Monday, Apr. 10, 2017 at 9:43 PM

10 de abril de 2017 | “¡Mirá el avioncito, qué lindo el avioncito! Le decíamos a mi hijo mientras respirábamos el veneno”, recuerda Laura Mazzitelli con voz quebradiza. Laura es una vecina de La Leonesa, Chaco, convertida en luchadora incansable contra el avance de las fumigaciones con agroquímicos. Por José Bejarano.

La lucha de una madr...
archivo_20170407012749_7520_5f729.jpg, image/jpeg, 648x316

Laura Mazzitelli vive en el barrio La Ralera de la localidad de La Leonesa, ubicado a 60 kilómetros de Resistencia. Se cruza con sus vecinos de la cuadra; los ve enfermos de cáncer, pálidos y cubiertos con pañuelos; ve a los niños con malformaciones jugando en una esquina y se entera por otros que, de a poco, algunos se van muriendo. Algo está sucediendo en el pueblo.

En el 2002 a Iván, su hijo de dos años, le diagnosticaron leucemia linfoblática aguda. Sufrió la quimioterapia durante ocho meses y dos años de tratamientos intensivos en el hospital Garrahan.

A partir de ahí, su madre comienza a investigar y descubre que detrás de su casa había una arrocera, que era fumigada todos los días por una avioneta. Se trataba de San Carlos y Cancha larga de tres mil hectáreas, propiedad de Eduardo Meichtry, presidente del Grupo Puerto Las Palmas y “Empresario del Año” en 2015, nombrado por la Bolsa de Comercio del Chaco.

“Cuando se enferma mi hijo veo que a una vecina, una nena de cuatro años, le diagnosticaron el mismo tipo de leucemia. A la vuelta de mi casa, a un niño de siete años le agarró un tumor en la garganta. A una cuadra, una nena de nueve años tuvo un tumor cerebral”.

Pero eso no fue todo, las abejas huían de las colmenas, los peces se morían o aparecían con malformaciones, las frutas se secaban y los árboles agonizaban. Mientras tanto, la avioneta volaba bajito y con una llovizna de glifosato, iba sembrando la muerte en el pueblo.

“Después de eso, con mi familia decidimos quedarnos en Chaco y luchar, porque no era justo que tengamos que dejar todo por estos productores perversos que no cumplen con las medidas establecidas por la Ley de Biocidas”, dice Laura con una voz suave pero firme a la vez.

La lucha de los vecinos

Hace más de catorce años que los vecinos de La Ralera denuncian los efectos de los agrotóxicos y advierten sobre el aumento de casos de cáncer y contaminación del agua. A través de un recurso de amparo, lograron que la Justicia del Chaco delimite las fumigaciones con agrotóxicos a no menos de mil metros de escuelas y viviendas.

Los vecinos siguen luchando con perseverancia a pesar de las amenazas recibidas, de los avances y retrocesos en la causa de La Leonesa, de intentos de ocultar los informes. En ese sentido, Laura se muestra indignada por la impunidad imperante y denuncia: “¡Estos son delitos graves, porque hubo muertes! Yo hago cómplice al Estado que mira para otro lado y al Poder Judicial que cuida los intereses de los más poderosos”.

Fuente: lalalanews

agrega un comentario