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Tercerizados en Trabajo: el conflicto en una etapa decisiva
Por Izquierda Revolucionaria - Hombre Nuevo -
Saturday, Apr. 29, 2017 at 12:54 PM
28 de abril de 2017 | 130 trabajadores/as de limpieza pelean por su continuidad laboral
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La pelea que desde hace más de un año vienen llevando adelante las y los trabajadores/as de limpieza tercerizados del Ministerio de Trabajo ingresó en un momento clave de resolución. Unos 130 compañeros y compañeras se encuentran hoy sin poder acceder al organismo, dado que el ministro Jorge Triaca ordenó la rescisión del vínculo contractual con INMANTEC SRL, luego de que un grupo de trabajadores/as se encadenara al portón de ingreso de la cartera laboral el pasado viernes 21 para exigir el pago de salarios adeudados y garantía de continuidad laboral.
Al día siguiente, personal de seguridad del organismo impidió el ingreso a los trabajadores y trabajadoras tercerizados, situación que se repitió en todos los edificios del Ministerio en CABA (Alem 650, 638, 628; Alsina 665 y Callao 114). Luego de una rápida y fuerte reacción de las y los trabajadores de limpieza organizados en SITMMA-CTA y la Junta Interna de ATE-Trabajo, el titular de la nueva empresa que asumiría el servicio por un período transitorio de 6 meses y funcionarios de líneas medias de la cartera laboral, plantearon verbalmente el compromiso de que la totalidad de los/as trabajadores/as retomaría su tarea a partir del martes 2 de mayo. Sin embargo, ninguna autoridad política ratificó ese acuerdo, lo que obviamente genera incertidumbre entre las 130 familias que hoy se encuentran en la calle.
Una semana de intensa lucha
Las y los trabajadores vienen realizando innumerables acciones de lucha y actividades de difusión, para alcanzar el máximo nivel de apoyo posible a esta justa pelea, y asegurar que el compromiso de reingreso a partir del 2 de mayo se cumpla efectivamente.
En esta tónica, el lunes 24, luego de sostener el reclamo en la puerta del organismo desde las 6 de la mañana, se culminó la jornada con la participación en una Audiencia Pública en el Congreso de la Nación. Allí, acompañados por diputados de la bancada del Frente de Izquierda (Pitrola, Sosa y López) y el diputado del bloque Peronismo para la Victoria Leonardo Grosso, delegados de SITMMA expusieron el conflicto ante una gran concurrencia.
Los días siguientes se sostuvo la presencia activa en la puerta del organismo con asambleas diarias demostrando la vigencia del reclamo; se organizó una recorrida de difusión del conflicto en la Cámara de Diputados buscando apoyos de los diferentes bloques políticos; se recurrió a la solidaridad de todos los sectores de la CTA, organizándose con ese fin delegaciones de compañeros/as que tomaron esa responsabilidad; se trabajó el fondo de lucha en la Asamblea General de Afiliados/as de ATE, Ciencias Sociales de UBA y otros lugares de trabajo; y el viernes 28 se realizará un masivo almuerzo colectivo en la puerta de Alem 650 que fue el ámbito para gritarle al ministro Triaca “ningún trabajador/a de limpieza en la calle”.
De este modo, se llega con un alto nivel de organización y disposición de lucha a la fecha clave del martes 2, en la que se verá si funcionarios y la nueva empresa cumplen con su promesa o nos encontramos ante una nueva estafa contra los trabajadores y trabajadoras.
Antecedentes de la tercerización y del conflicto
Las y los trabajadores de limpieza formaban parte del personal del Ministerio (y otros organismos públicos) hasta que en la década del ’90 se procedió a la tercerización de dichas tareas. Desde entonces vienen prestando servicios a través de empresas superexplotadoras y negreras que son contratadas mediante millonarias licitaciones. Esto no sólo abre la puerta a favoritismos y manejos poco claros, sino que implica un costo adicional para el Estado. Mientras que los trabajadores tienen un salario que no supera los $10.000, las empresas contratistas cobran por cada trabajador/a más de $30.000.
En el caso de la rescindida INMANTEC SRL -contratada en la anterior gestión de Carlos Tomada-, la empresa violentó sistemáticamente los derechos de los trabajadores y trabajadoras; incumplió los términos de los pliegos de licitación; realizó rotaciones de servicios; desconoció la antigüedad de los/as trabajadores/as; los estafó con el (no) depósito de sus aportes previsionales y de obra social; y pagó fuera de plazo los salarios durante 14 meses, todo ante la permisividad de los organismos de control que, como el propio Ministerio de Trabajo, deberían regular su accionar.
Cabe señalar a su vez, que la contratación de INMANTEC SRL se encontraba vencida y que la gestión de Cambiemos en lugar de completar una contratación acorde a la normativa de la administración pública, simplemente prorrogó durante todo este tiempo el vínculo con esta empresa que vulneró en todos los aspectos los derechos laborales de las y los laburantes.
La situación se tornó muy crítica con el inicio del año. Los atrasos en el pago de los salarios fueron profundizándose cada vez más. La respuesta de los trabajadores de limpieza fue la organización colectiva y la retención de tareas como herramienta para el reclamo de pago. En lugar de resolver el fondo del conflicto, el Ministerio organizó una alevosa “carnereada”, que apuntó a quebrar la medida de lucha y dividir a los/as trabajadores/as, al hacer ingresar en varias ocasiones, en horarios nocturnos, a gente externa al organismo para realizar una limpieza de emergencia.
La prolongación del conflicto provocó que las condiciones de higiene y seguridad de los edificios se deterioraran notablemente, por lo que las y los trabajadores del Ministerio de Trabajo deben desarrollar sus tareas en un contexto cada vez peor, llegando incluso a convivir con roedores, como se evidenció en una de las oficinas del nivel central.
La situación llegó a tal punto que semanas atrás la Junta Interna de ATE-Trabajo realizó una “clausura simbólica” al organismo para denunciar las aberrantes condiciones de salubridad en la que se encuentran los diferentes sectores de trabajo; el retraso en el pago de los salarios y la violación de derechos laborales.
La pelea de los trabajadores y trabajadoras de limpieza del Ministerio de Trabajo constituye una lucha testigo contra la tercerización en la administración pública. Su triunfo inmediato puede servir para que la experiencia se replique en otros organismos en los que Juntas Internas combativas tienen un rol para cumplir colaborando con la organización de los compañeros y compañeras tercerizados.
El objetivo final es “barrer” con la tercerización en el Estado y alcanzar su definitivo reconocimiento como laburantes estatales. Para alcanzarlo, la lucha y la unidad de clase son el camino ineludible.
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