Julio López
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La educación india para tomar el poder y ser libres
Por Ser Jatun Inti - Wednesday, Jul. 19, 2017 at 9:36 PM
jallallahermano@gmail.com 3885128854 Sta Cruz N2 Humahuaca

La educación que nos imparten desde el estado no es la nuestra, ni en contenidos, ni en pedagogías, ni en didácticas, la educación que nos imparten pretende cambiar nuestro cerebro y genera un hombre hueco de su identidad, sin su cultura y sin posibilidades ni si quiera de ser un hombre libre.

La educación india p...
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1. Introducción
En una escuela del Departamento de Humahuaca (Jujuy – Argentina) a 4000 msnm. Mientras dictaba mis clases en el patio de la escuela, puede oír la descripción que hacia la Profesora de historia sobre los indios “salvajes” de la Patagonia en la época de la Conquista del Desierto, haciendo alusión, sobre todo, a los malones organizados por los indios, para aprovisionarse de ganados, mercaderías y de algunas cautivas. Desde la puerta abierta del aula se escuchaba la clase dictada en voz alta y firme que describía al hombre del sur: - Los indios eran vagos, ladrones, sucios, unos borrachos y violadores, salvajes sin civilización… los malones fueron un conjunto de malos que atacaban sorpresivamente a los civilizados en otras palabras una turba despiadada. Esa es una la descripciones más generalizada del indio que se imparte en las escuelas de la provincia. De esta manera los alumnos adquieren esos conceptos, adjetivados peyorativamente, del hombre hijo de la tierra. Me imaginé la cara de asombro de esos jóvenes alumnos kollas y su instantáneo rechazo a ser indio por siempre. La Profesora nunca les habló del porqué profundo de esos malones; su posición, aparentemente, siempre fue la de los invasores y vencedores en el rol de víctimas inocentes. Los alumnos jamás estudiaron a Catriel, Pincen, Epumer, Cañumil, Nahuel Payun y Painé.
En la misma escuela de la puna jujeña, mientras nos organizábamos, los docentes, en una reunión institucional para analizar un documento sobre la nueva Ley de Educación, llamó la atención un apartado de los textos informativos que hablaba de las Comunidades indígenas y los alumnos pertenecientes a ellas; un Profesor de matemática, kolla, oriundo del lugar inmediatamente reaccionó y dijo: - A este apartado lo vamos a dejar de lado porque aquí ya no hay indios. Negar lo indio y nuestro origen es fundamental para demostrar a la sociedad criolla que se ha evolucionado, y sobre todo si se tiene algún título, entonces, ante la negación, se usarán otros apelativos, que no lleven esa carga de humillación, como: originario, natural, o nativo.
“Ni Incas ni Kollas: Omaguacas”, frase criolla común en mi pueblo que intentan negar nuestros orígenes y lazos culturales con los kollas y con los incas, que ocupan los territorios de Perú y Bolivia, intentando crear un nacionalismo racista étnico argentino: los Omaguacas. Otra frase muy común que se repite al hablar de indios es: “Los indios son de la india”, al referirse al apelativo INDIO impuesto por equivocación por los invasores al creer que llegaron a la india, en realidad lo que se intenta es negar lo “indio” por ser una palabra despectiva y apelan como fundamento a la simpleza de la frase: “los indios son de la india”. Ser indio para muchos hermanos jujeños es eso, lo que aquella Profesora de la puna jujeña describía a sus alumnos. La palabra indio se utilizó para humillar y avergonzar al hombre de esta tierra. Asumirse indio ante una sociedad colonizada y evangelizada es una valiente decisión para demostrar que todo aquello con lo que nos caracterizaron fue y es un absurdo, para desprestigiar y reafirmar una inferioridad cultural que no existe. Al asumirnos indio, con orgullo, contrarrestamos el insulto y la denigración, nos apropiaremos de esta palabra combativamente hasta el día que seamos libres de verdad, entonces allí seremos cada cual lo que debió ser. Domitila Quispe dijo en Azángaro – Perú 1922: “Si con el nombre de indio nos oprimieron, con el nombre de indio nos vamos a liberar” (Ayar Quispe – Indianismo)
Ante las miles de preguntas casi filosóficas de cómo llegar a ser libres, qué caminos tomar y qué acciones ejecutar en este tiempo, busco incansablemente en la petaca de mi capital cultural, una vez más, las ideas perdidas e intento concatenar las posibles soluciones que nos conduzcan a lo planteado desde hace años por nuestros amawtas indianistas, una “Revolución India” para tomar el poder para ser libres, pero ¿cómo?, ¿de que manera? Quiero colaborar con el gran movimiento libertario, con creatividad y orgullo indio ayudar a mi pueblo a ser, algún día, libres de verdad. Que mi fuerza se sume a otras fuerzas, que mi idea se una a otras ideas. No será lo mío la receta de la verdad sino solo una pequeña luz de esperanza que ayudará a construir el camino hacia la tan deseada libertad. Nuestra Educación será un camino para conseguir lo que anhelamos, la Libertad.


2. El indio y sus posibilidades en este tiempo.
En esta sociedad moderna y globalizada, la condición social, económica y política del indio ha cambiado positivamente en algunos aspectos, pero no con la profundidad que quisiéramos, hay nuevas leyes y derechos nacionales e internacionales que amparan a los pueblos indígenas, obtenidos por insistentes reclamos y luchas, pero el avasallamiento sigue de diferentes maneras y formas. Las posibilidades de superación del indio en relación a otros tiempos pasados tal vez sean más amplias pero todo esto, de las “nuevas posibilidades”, solo aparenta una igualdad social que no es tal, no todos los indios tienen el acceso a esas posibilidades que gozan los de la elite criolla. Los pocos indios que lograron superarse desde lo económico trabajando día y noche no piensan ni sienten su orgullo indio como una forma de tomar el poder, solo les preocupa su capital, los otros que se aventuraron en la política partidaria llegaron a cargos importantes, pero no en representación de lo indio sino como títeres circunstanciales del poder político colonial de los partidos tradicionales y los que con el apoyo del pueblo llegaron desde lo indio con partido indio a ser funcionarios fueron absorbidos por el poder político imperante por una falta total de preparación ideológica. Muchos indios ingresaron a las universidades y son pocos los egresados que admiten su condición con orgullo y demuestran su lucha contra este sistema opresor. Las posibilidades de este siglo son solo oportunidades para que el indio se adapte y actúe en la sociedad dominante dejando de lado su intención de ser en esencia y acción indio. Estas oportunidades no colaboran ni promueven su reafirmación identitaria, cultural y menos lo proyectan a su propia ideología libertaria para tomar el poder.


3. La educación como herramienta de poder.
La educación que nos imparten desde el estado no es la nuestra, ni en contenidos, ni en pedagogías, ni en didácticas, la educación que nos imparten pretende cambiar nuestro cerebro y genera un hombre hueco de su identidad, sin su cultura y sin posibilidades ni si quiera de ser un hombre libre. La educación es el arma nosotros los objetos a modificar.
Si bien hay escuelas que a través de proyectos y actividades interculturales en fechas especiales intentan revalorizar lo andino y lo indio no es suficiente para lograr un cambio revolucionario en la educación tradicional. Revalorizar no nuestro fortalecer nuestra identidad étnica no significa bailar la cueca o el carnavalito, ni salir en una obra de teatro vestido de kollas y recitar de memoria un poema costumbrista. Debemos expulsar a los vicios folclóricos con los que nos encasillaron los del cholaje. Para cambiar de mentalidad, para recuperar lo nuestro, el trabajo educativo de concientización india debe ser constante y abarcar, desde la infancia, todos los aspectos de la enseñanza, desde las matemáticas tiahuanakotas, pasando por la ciencias agrícolas y cósmicas hasta la filosofía amawtica, no solo acordarse del indio en algún acto folclórico, sino que nuestros contenidos deben ser brindados en forma constantes y profundas así veremos resultados positivos.
Si queremos, nosotros los indios, tomar el poder político y el poder económico, para reconstituir nuestro Tawantinsuyu y con ello ser los dueños de nuestra libertad y de nuestro destino, debemos, antes que nada, prepararnos intelectualmente y es imperativo hacerlo desde nuestros niños y desde nuestros jóvenes. La EDUCACION, que abarca muchos aspectos fundamentales, es una de las claves para formar a nuestros futuros líderes revolucionarios que allanarán el camino a la libertad haciéndolo más fácil y seguro. La educación desde y para lo nuestro será la reacción a la acción colonizadora de años. Es necesario tomar a la educación como el remedio para curar la baja autoestima y salir de la ignorancia en la que nos estamos ahogando. Nuestra educación nos ayudará a auto reflexionar sobre nuestra realidad. La educación nos liberará. No se trata de “construir” un indio rebelde como piensan algunos sociólogos críticos, se trata aquí de que el colonizado deje de serlo por su propia conciencia y sea lo que debe ser por naturaleza en un contexto que lo subyuga o sea, un indio disconforme con una realidad y como consecuencia busca su libertad.

4. Educación colonial un arma desindianizadora.
La Educación es el camino, pero esa educación no tiene que ser la que nos lavó el cerebro por siglos, la que nos implantó otros pensamientos ajenos a nuestra identidad y nos hizo rechazar hasta odiar y avergonzarnos de lo nuestro. Esa es la educación que inyectó, a la fuerza, contenidos foráneos en el cerebro del niño indio esa educación es el arma moderna más poderosa del invasor, es el arma con la que nos colonizaron y colonizan actualmente, educación ésta que pretende hacernos creer que somos los otros y no nosotros. Conociendo esto y sabiendo de su poder, debemos apoderarnos de esa arma para tomarla a nuestro favor. No debemos dejarnos engañar con la llamada Educación Intercultural Bilingüe pues es una vil mentira. Nuestra verdadera arma libertaria es la educación India.
Antes fueron ellos, los nietos de los invasores, en el rol de Educadores, quienes nos asimilaron, nos civilizaron… Miss Mary Jannette Steven es un ejemplo de estos educadores, maestra neoyorkina traída en 1883 por Domingo F. Sarmiento para dirigir las escuelas normales en nuestras tierras, conocida en la provincia de Jujuy cono Juanita Stevens. Hoy, lamentablemente, son nuestros propios hermanos docentes, que pasaron por la máquina del proceso colonizador educativo y como resultado son los indios desindianizadores, los que hacen el trabajo sucio con los hijos de sus propios hermanos en nombre del estado, son el quiste sarmientista en la educación y si alguien de ellos se atreve a liberar conciencias desde la educación, será inmediatamente silenciado o castigado. El miedo inducido por siglos también lo impedirá. Nos han transformado en ignorantes de lo nuestro y pretenden hacernos sabios en lo ajeno y, en muchos casos, lo han logrado; el indio se ha transformado en lobo del indio. Es ahora que debemos también enfrentarnos a ellos, a nuestros propios hermanos, para revertir la realidad educativa.
Si bien ya no pueden seguir reduciéndonos a palos y azotes libremente, el proceso de civilización, el sometimiento y la asimilación tienen que seguir, pero con otras maneras y formas encubiertas y es allí donde se utilizan a las escuelas que con sus enseñanzas, desde la primera infancia, intenta internalizar la inferioridad del indio o en el mejor de los casos internalizar en el sujeto indio su condición como exótico y folclórico, internalizar en el niño estudiante que el indio ya casi no existe y debe educarse en las instituciones del estado para “formarse” y ser igual a los hombres de la sociedad criolla. El indio así con un proceso de civilización pedagógico tendrá la oportunidad de “superarse” y llegar a ser “alguien” a cambio de desindianizarce. A eso ¿podemos llamar oportunidad?

5. La Escuela colonizadora.
Por supuesto que los métodos y los contenidos educativos también han cambiado de la educación tradicional, pero el proceso colonizador de las escuelas sigue subliminalmente, es sistemático y está muy bien implementado casi ni nos damos cuenta, son más de cien años de trabajos estratégicos. Los indios en este proceso pedagógico terminan siendo más argentinos y patriotas que los que bajaron de los barcos, son capaces de “parar las patas” por su patria adoptiva. Jurar a la bandera argentina lealtad desde los 9 años es una imposición escolar contemporánea. Si analizamos, veremos que a través de las escuelas se imparte, en los alumnos indios, contenidos ajenos sin relevancia en lo propio, en lo histórico indio. En los actos escolares se impone conmemorar, exaltar y “reflexionar” sobre hechos y/o procesos relevantes del pasado histórico criollo, estudiar y celebrar estos hechos importantes es parte de una colonización porque lo otro, la historia de los vencidos, no se cuenta, no se enseña, no se conmemora y menos se exalta.
Algunos ejemplos de estos actos escolares son: el 19 abril fundación de Jujuy, las fundaciones españolas fueron invasiones donde corrió sangre india, Jujuy fue fundada tres veces, el mismo día se recuerda el “Día del Indio Americano” como algo exótico acentuando la racialidad, el “25 de mayo” día de la emancipación y de la libertad criolla ante la corona española, el indio sigue buscando su libertad, 20 de junio día de la bandera Argentina, 9 de julio día de la independencia Argentina, en el congreso no participaron los indios, en agosto se realizan ceremonias a la Pachamama como el condimento cultural de los actos de todo el año, el 11 de septiembre, los maestros bailan y festejan, se honra al racista Domingo Faustino Sarmiento como padre de la educación Argentina, y a otros próceres genocidas de nuestros pueblos como héroes, en el mes de octubre se celebraba “el Día de la raza”, que luego fue denominado “Día de la diversidad cultural” como si el choque de culturas en 1492 hubiese sido un amistoso encuentro de hermanos, en el mes de noviembre los actos hacen alusión al Día de la Tradición Argentina donde se impone como figura central al “gaucho argentino” en honor a José Hernández autor del Martín Fierro la historia del gaucho renegado que denigra al indio y así otras tantas fiestas criollas que lejos están de nuestra historia indígena. Todas estas conmemoraciones e ideas racistas sostenidas en las escuelas por sus maestros y por el sistema educativo intentan esconder y tapar la verdadera historia de resistencia y lucha de nuestros pueblos iniciada el día 12 de octubre de 1492 para emanciparnos de los invasores españoles primero y criollos después.

6. Los niños y los jóvenes indios victimas propicias de la educación y de la FNE
La edad más sensible del hombre es la infancia y es allí donde se adquieren los primeros saberes y estímulos que construirán el futuro hombre, en esta edad tan sensible de nuestros hijos debemos poner atención para evitar, de alguna manera, que se siga modificando intencionalmente nuestro pensamiento y matriz cultural con pedagogías extranjeras y con ello destruir al futuro hombre revolucionario hasta transformarlo en un ser ajeno a lo nuestro. En un indio desindianizado.
No en vano se insiste con políticas estratégicas, desde el sistema educativo occidental, introducir a nuestras wawas en los jardines maternales desde los 3 años alejándolos de su primera y fundamental escuela, la familia. Es en el seno del ayllu donde nuestros niños se formarán y adquirirán sus primeros valores junto a sus padres y sus abuelos. Estas políticas no solo alejan al niño indio de su célula madre sino que terminan por convencer a los padres en dejar a sus hijos en manos de un estado que pretende invisibilizarnos. Los padres al final terminan entregando a sus hijos al sistema educativo colonizador. Esa es la intención eso es lo que se pretende.
En los catorce años de escolaridad, los alumnos aprenden, asimilan y adquieren nuevos conocimientos fundamentales para su formación integral. Pero es en esas etapas, desde los cinco hasta los diecisiete años, que la mayoría de los contenidos carecen de nuestros puntos de vista históricos y de nuestra ciencia. Son los contenidos ajenos enseñados como la única y gran verdad, un ejemplo es la historia oficial, la escrita por los vencedores. Son catorce años de escolaridad en los que se repiten año tras año los contenidos educativos que forman al ciudadano argentino, contenidos que por supuesto se irán incrementando y aceptando como la verdad. La lengua materna es parte fundamental de la identidad, es la herencia de nuestra cultura milenaria que, ante la invasión y conquista, fueron debilitándose y desapareciendo a la fuerza. Los idiomas que se enseñan en las escuelas son: el inglés, el francés, el portugués y el italiano y de los nuestros ¿qué hay?... ¿dónde quedan el quechua, el aymara, el guaraní? Es más, se nos enseña que los Incas fueron nuestros invasores creando un sentimiento temprano de odio hacia nuestro propio Tawatinsuyu. El indio en las escuelas es la literatura folclórica de fantasía, es el carnaval, la Pachamama, la copla del carnavalito, pero El Mio cid, el Quijote de la Mancha, se debe leer y estudiar, aunque no se lo entienda.
Toda esta colonización está fortalecida, en nuestra provincia (Jujuy – Argentina), con La Fiesta Nacional de los Estudiantes que, avalada por el Ministerio de Educación y por el Gobierno Provincial, tiene por actividades centrales y principales, en todas las escuelas de la provincia, las elecciones de reinas al estilo occidental que ponderan la estética de la mujer blanca, rubia, ojos celestes, alta, sobre nuestras niñas indias que sueñan y aspiran a ser las “gringuitas cholas” que nunca serán.
Lo importante es participar, dicen algunas jovencitas kollas, mientras ensayan como caminar con tacos y solicitan ayuda para comprar el vestido de reina, otras ya tienen el turno en el coiffeur para que con la magia del dinero y de la peluquería puedan esconder a la niña india y ser la reina blanca y rubia hasta que el encanto se termine. En los 60 años de vida de esta FNE, en la provincia indígena por naturaleza, jamás fue elegida como reina de los estudiantes una joven kolla, porque no cumple con los cánones del estereotipo de mujer occidental. Lo más curioso que Directores y Profesores de casi todas las escuelas promueven y apoyan esta competencia de absurda estética estudiantil. Nadie se atreve a cuestionar nada; es preferible, a los jóvenes revolucionarios por naturaleza, entretenerlos con estas fiestas del estereotipo y con la construcción de sus carruajes y carrozas al estilo de EE.UU. Por supuesto que en “Jujuy la capital de la Juventud y la Primavera” debe haber hermosas excepciones y revolucionarias en algunas instituciones escolares, pero son mínimas y silenciosas.

7. La Modalidad de Educación Intercultural Bilingüe (MEIB), estrategia para conformar y cómplice de la colonización.
Muchos quizás ante estos planteos sobre la “educación colonizadora” de la que somos víctimas históricamente los indios nos preguntamos ¿Y la Educación Intercultural Bilingüe que hace? ¿Puede ayudarnos la MEIB a ser libres?
En la Ley de Educación Argentina 26.206 en sus artículos número 17, 52, 53 y 54 se consolida como derecho de las Comunidades Indígenas la Modalidad de Educación Intercultural Bilingüe, de igual manera la Ley provincial de Educación 5807 en su capítulo VIII: dice “La Educación Intercultural y Bilingüe es la modalidad del Sistema Educativo Provincial, en los niveles de educación inicial, primaria, secundaria y superior, que garantiza el derecho constitucional de los Pueblos indígenas y a sus comunidades a recibir una educación que contribuya a preservar y fortalecer sus pautas culturales, lengua, cosmovisión e identidad étnica”, artículo número: 73, 74, 75 y 76, pero a años de promulgadas estas leyes la MEIB no se ejecuta, no se implementa como debería ser y está prácticamente ausente en las escuelas de la provincia.
La MEIB en la provincia de Jujuy es una gran mentira, figura solo en los textos de las leyes para conformar a los indios, para aparentar una igualdad de oportunidades que no existe y sobre todo para sustentar lo folclórico indigenista de la provincia de Jujuy denominada Capital de la Pachamama por Ley. La MEIB también ha servido para que los Ministros y Ministras de Educación posen en las fotos junto a las wiphalas y bailen con los indios crédulos aparentado una preocupación hacia la educación de las comunidades indígenas.
Desde las oficinas de la Coordinación de esta Modalidad no hay ni hubo un trabajo serio y menos una intención de colaborar positivamente para efectivizarla; la Coordinación de la MEIB responde directamente a las órdenes del Ministerio de Educación y si desde este Ministerio hay una orden para no ejecutarla pues la Coordinación obedecerá y colaborará ágilmente, junto a sus indios, para cumplir el mandato superior. En una provincia indígena por naturaleza rica en cultura, en tradiciones, en historia india y teniendo incluso el título de la Quebrada de Humahuaca como Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad, la Modalidad de Educación Intercultural Bilingüe está ausente, ¿Por qué? Por qué importa, aquí, más acentuar lo turístico, exótico y folclórico; en otras palabras lo pachamamístico más que la educación que contribuya a preservar y a fortalecer la identidad étnica.
Sucede aquí que el gobierno provincial ha estado constituido por siempre, sin importar el partido político que sea, por la oligarquía jujeña y ésta jamás va a permitir “avivar indios” me refiero a que estos sean instruidos y preparados en sus derechos, por lo tanto no hay ni habrá una decisión política del gobierno por querer que las escuelas de las Comunidades indígenas y de las zonas urbanas de toda la provincia gocen de esta Modalidad educativa; los indios deben seguir sirviendo, antes lo hacían en la zafra, con sudor y sangre, a Patrón Costas hoy deben hacerlo como chupa medias del gobierno o de los políticos.
Lo que se constata, luego de tantos años de la no implementación, es que hay una clara intención de complicarla y demorarla lo más posible para su ejecución. Todo esto debe tener una razón. Encuentros, charlas, talleres, reuniones, viajes y otros firuletes todos estériles. Excusas tras excusas, aquí, en este tema, sí vale la “consulta previa” para dilatar y extender lo más posible su implementación real. Para otras cosas la “consulta” no existe, es mejor avasallar. Es necesario aquí hacer una crítica, son las comunidades indígenas también responsables de esto, porque desde sus integrantes no logran comprender la importancia que puede llegar a tener una educación más próxima a sus orígenes culturales; y sobre todo si somos nosotros los que nos empoderemos de ella; lo único positivo que pueden llegar a ver los hermanos indios, con la implementación de la MEIB en las escuelas de las Comunidades, es la inclusión de dos de sus integrantes indígenas con los cargos rentados de Idóneo y de Territorial así podrán paliar la desocupación más que la ignorancia revolucionaria india.
La MEIB, si el indio lo quisiera realmente, podría llegar a ser el lugar donde se germinen y se desarrollen las ideas de una Educación India y Revolucionaria, el estado eso lo sabe muy bien y es allí donde teme por su incorporación libre a las escuelas de la provincia. Es necesario, para ellos, controlar y fiscalizar el desarrollo de esta modalidad y para eso se usarán estrategias que aparenten no serlas, sino que se desplieguen como normales a todo proceso de desarrollo e inclusión. La acción entonces será: retardar, dilatar el tiempo de implementación lo más posible, no brindar a todas las comunidades el beneficio sino a unas cuantas más dóciles; evitar todo tipo de capacitación que sea contraria a los intereses del estado, esas capacitaciones tienen que ser, por lo contrario, funcionales a sus intereses folclóricos y turísticos, no convocar a todos los pueblos, trabajar aparentando una gran producción y defensa de los derechos indígenas, seleccionar personal dócil, fiel y obediente pertenecientes a las comunidades, que sean capaz de recabar y contribuir con información importante de sus comunidades para el estado y no incorporar personal que pueda filtrar información fundamental de este, para alertar a las comunidades de las intenciones y proyectos colonizadores.
Las “beneficiadas” con la MEIB son solo unas cuantas comunidades de la puna jujeña, que por esfuerzo propio han conseguido implementar la MEIB en sus escuelas; otras comunidades indígenas del sur de la provincia tienen la suerte de haber podido “acordar” con el gobierno anterior y ejecutar la modalidad, pero son solo un mínimo porcentaje de las escuelas de la provincia que la poseen, teniendo en cuenta que en Jujuy la mayoría de la población es india. El estado debe justificar con estas pocas escuelas que la ley se cumple.
Tomando conocimiento de estas intenciones por parte de los responsables directos de nuestra educación, (Gobierno provincial y Ministerio de Educación) y viendo que no hay ni un mínimo interés por la implementación de esta Modalidad educativa a lo largo y ancho de toda la provincia, debemos aspirar nosotros los indios a exigir “nuestra educación” y con ello a estrategias para contrarrestar estas dificultades que nos obstaculizan para lograr nuestros objetivos revolucionarios.
Los contenidos que se brindan en la MEIB además de la revitalización lingüística son sobre artesanías y elaboración de calendarios agro festivos, talleres de radio, historia oral entre otros, estos contendidos son escasos y pobres, no logran ni lograrán hacer del niño indio el hombre revolucionario que se pretende con una verdadera Educación India, los contenidos deben dirigirse a su libertad y la de su Pueblo.
La MEIB así como el Programa de Salud Intercultural sirven para tapar, cubrir y esconder las verdaderas intenciones del estado ante las comunidades indígenas; la MEIB y el programa de Salud Indígena lo que menos hacen es cumplir con sus objetivos, son instrumentos falsos que fueron creados con la intención de colonizar en vez de descolonizar. Y allí también están nuestros indios, metidos sin poder hacer nada, cómplices esclavos del estado sin saberlo.
Si bien la Modalidad puede llegar a aparentar ser un avance para respetar nuestros derechos como pueblos indígenas, creo personalmente que de la manera que se viene desarrollando, en las escasas escuelas, no logrará hacer nunca del niño ni del joven indio un ser libre, sino creo que solo se logrará un indio funcional a los intereses del estado provincial, un futuro indio pachamamista y no es solo porque lo desee el estado sino porque la preparación ideológica de los que cubren los cargos de la Modalidad no alcanza para una verdadera educación revolucionaria india. No existe una intención de preparar ni de capacitar a los hermanos de las comunidades para que se desempeñen como verdaderos transmisores de nuestra cultura y generadores de conciencias libertarias indias. Sus capacitadores indios licenciados, masters mercenarios, especialistas en interculturalidad están contratados y trabajando activamente no para liberar sino para con-vencer. Se suman así, en detrimento y agonía de las Comunidades Indígenas, las intenciones del estado y las debilidades de los indios que cubren los cargos, indios argentinizados, gauchescos y pachamamistas en un estado colonial.
El modo o forma de esta educación denominada “Modalidad” es limitada por qué se entiende que solo se proporcionará, ésta, a las Comunidades Indígenas que lo requieran o les corresponda por derecho. Nuestro objetivo tiene que ser más amplio, no quedarnos en una modalidad, debemos generar nuestro propio Sistema Educativo Indio en todos nuestros territorios, un sistema educativo con Educación India para todos, a eso le llamaremos una “revolución educativa” y una real oferta de oportunidades para liberarnos.


8. ¿Qué hacer? ¿Cómo luchar contra todo esto?
Hay quienes dicen que los únicos indios que existen hoy son los indianistas y que no tienen representatividad en la sociedad, a ellos les digo que si el indio, orgulloso de su identidad que busca su libertad, no tiene aún una representatividad amplia en la masa india desindianizada, es por una cuestión de educación, de mala educación y de colonización y no porque la masa no lo quiera o no lo sienta como piensan algunos, en la masa india duerme una gran cultura ávida por renacer y el indio orgulloso de su indianidad debe luchar contra siglos de sometimiento para re indianizar al Pueblo a través del despertar de conciencias; no entender esto es ser más que un ignorante, no podemos esperar a que todos (la masa) se sientan indios de un día para el otro, para eso hay que trabajar re indianizándonos y esclareciendo las conciencias de nuestros hermanos. A pesar de todo, los indios que nos reconocemos con orgullo, cada día somos más y eso causa un dolor agudo a los otros y a los que se creen que son los otros y por impotencia reaccionan vomitando ignorancia contra los indios indianistas. Para ellos los indios no deben estar ya en esta sociedad, aunque estemos vivos.
Para salir de la domesticación en la que nos indujeron lo primero es tomar conciencia india, y para tomar conciencia india debemos acceder a las fuentes del conocimiento, de “nuestros conocimientos” a través de una verdadera educación, conocimientos que están en lo profundo de nuestra cultura, en nuestros hombres (hombres y mujeres) críticos y estudiosos de la realidad del indio, debemos estudiar detenidamente sus producciones y analizarlas. Analizar nuestra situación con visión crítica y objetiva. Además, debemos compartir nuestros deseos de libertad y nuestros conocimientos; ser egoístas será un obstáculo.
Para algunos por supuesto que no será fácil; pueden caer en un desequilibrio existencial y es allí donde hay que optar, se es indio o se es criollo mestizo. Si optas por lo que debiste ser entonces ser indio será tu orgullo hasta el día que te liberes. No se trata de colores se trata de pensamientos. Nuestra LIBERTAD va a venir siempre y cuando aprendamos de nuestros amawtas, de nuestros sabios, de nuestros intelectuales. La libertad vendrá con la sabiduría.
El equilibrio en el cual vive el indio conforme es un equilibrio falso. Es necesario desequilibrar de cualquier forma, directa o indirectamente, el pensamiento que implantaron en el indio; puede llegar a doler pero de esa manera buscará equilibrarse nuevamente, pero esta vez debe tomar conciencia india y allí ya nadie podrá detenerlo ¡será revolución viva, será revolución india!
La conciencia india nos conducirá a despojarnos del colonialismo y a diferenciar lo propio de lo impuesto, tomar conciencia india será un gran paso para levantar la cabeza, para despertar y saber cómo actúan nuestros opresores desde el sistema educativo para subsumir al indio a la cultura imperante y al patriotismo extranjero. Si seguimos sumergido en una realidad que no es la nuestra pretendiendo encajar en la sociedad dominada por el criollaje seguiremos sosteniendo esta dominación y lo que menos queremos es sostenerla. Es imperante salir. Tomar conciencia y querer cambiar esta realidad es la chispa que encenderá el fuego de nuestra conciencia, será el inicio de una revolución, nuestra educación, será la tempestad en los andes que esclarezca la conciencias indias.
Y tú serás acción, serás verbo hecho carne que luche y crees nuevas ideas. No importa donde estés, tú arma será la educación india. Liberado serás un hombre como los demás. Nos transformaremos en maestros de nuestros propios hermanos, de nuestros hijos y de todas nuestras familias, divulgando, profesando con orgullo nuestra sabiduría india y a la vez aprenderemos de ellos en un intercambio de conocimientos sin egoísmos, uniendo, sumando ideas y creando nuevas ideas juntos. Tecnología, libros, radios, televisoras, internet tienen que ser también nuestras herramientas de lucha, producir así como produjeron y producen nuestros hermanos con la agricultura, nosotros lo haremos desde la intelectualidad, desde la tecnología y desde la ciencia indígena.
La educación que como acción fundamental iniciaremos tiene que ser en primer lugar “nuestra educación”, desde nuestro pensamiento, desde nuestra ideología, con nuestra historia, con nuestro sentimiento y en lo posible con nuestras lenguas maternas, educación que nos permitirá valorar, amar y defender lo nuestro con orgullo indio y eso lo conseguiremos desde una educación que se base en lo intra cultural así forjaremos nuestra propia ideología libertaria. Todos estos propósitos deben ser encaminados y puestos en acción desde la niñez y desde la juventud. La “educación nuestra” despertará las conciencias de nuestros niños y jóvenes, revivirá el sentimiento y el amor de ser hijos de esta tierra, enorgullecerá al indio sumiso transformándolo en indio libertario, que se integrará a la realidad como sujeto de su historia. Nuestra intención será promover una verdadera “revolución educativa india” en todas las escuelas, en todos los hogares, en todas las comunidades, que por derecho natural nos corresponde.
El objetivo es grande. Es una tarea para todos los que amamos y queremos modificar esta realidad. Tarea ardua pero no imposible. El indio a través de la Educación intra cultural será lo que debió ser hombre libre y respetuoso de la tierra en la que vive y procrea. El indio sumiso con educación india dejará atrás sus letargos y se atreverá luego a cuestionar, debatir, exigir, a crear y a recuperar por las buenas o por las malas, lo que le pertenece desde hace siglos: el Poder. Dejará recién entonces de ser folklore del pachamamismo criollo.
El Estado colonial nos quiere ignorantes y mansos domesticados. Por años nuestra conciencia estuvo oprimida. Las personas sabias, inteligentes no podrán ser explotadas ni manipuladas, no pueden ser forzadas a los intereses del estado opresor; ser inteligentes es peligroso para el poder colonial.
En nuestra formación revolucionaria primero debe estar “nuestra educación india” como principio fundamental, luego como estrategia y con mucho detenimiento sí, debemos proponernos estudiar, conocer y analizar en todos los aspectos incluso los más minuciosos, al pensamiento y la historia del hombre que nos oprime y todo lo referente a él y su cultura asesina. Conocer sus idiomas y sus costumbres. Estudiar a los que por siglos nos han oprimido para saber de sus fortalezas y sus debilidades y así organizarnos para contrarrestar y destruir sus planes de sometimiento eterno hacia nuestros pueblos en este mundo. La “educación india” es el camino principal, de allí vendrán todos los demás. No buscamos destruirlos buscamos igualdad de oportunidades y ser lo que debimos ser.
Además, debemos oponernos a toda tentación del criollaje que nos quiere tirasacos, chupamedias a cambio de unas chapas, de bolsones de mercadería, de un cargo temporal o de dinero. Ellos en realidad no quieren ayudarnos quieren dominarnos. Tenernos, bajos sus botas, serviles. No debemos vender nuestra alma a cambio del voto que eterniza al candidato del cholaje a diputado o senador en el poder para dominarnos. Ellos deberán darnos lo que nos corresponde por derecho no por intereses. Si queremos participar en lo político partidario que sea como protagonistas principales y no como pedigüeño arrimado levantando pancarta ajena.
No descartamos luchar desde lo político partidario que es un camino por el cual vamos a transitar, pero cuando estemos firmes y seguros, cuanto las condiciones estén dadas. Por ahora esas condiciones necesarias no están. Por lo tanto de nada servirá, sumergirnos en lo político partidario para intentar recuperar el poder sin estar antes bien preparados en todos los aspectos pero en especial en lo ideológico, para enfrentar al criollaje colonial y opresor. De nada servirá empaparnos en lo político partidario si no podemos generar desde nuestras acciones concretas, fuentes de recursos económicos sustentables propias sin pedir nada a nadie. Generar nuestras empresas de las más diversas, generar capitales no para enriquecernos personalmente y explotar al hombre sino para colaborar con la revolución que demandará educación y recursos económicos. Los medios de comunicación tienen que ser nuestros y difundir nuestros mensajes desequilibrantes y revolucionarios a todos los hermanos. Medios de comunicación potentes y con tecnología de última generación. Si no nos preparamos intelectualmente, económicamente y luego espiritualmente sin caer en lo esotérico pachamamístico seguiremos siendo las víctimas, los esclavos oprimidos y los eternos pedigüeños. En oposición a la maldita costumbre de esperar que nos den y construyan escuelas cuando se les dé la gana pues debemos ser nosotros los creadores y constructores, debemos ser fundadores de nuestros centros de educación india.
Lo comunal se opondrá a la individualidad, solo uniéndonos y organizándonos lograremos llegar a nuestros objetivos.
¡Nuestra principal arma tiene que ser nuestra educación, ejecutar acciones pedagógicas desde lo nuestro, donde todos aprendemos de todos! Somos nosotros, los padres, maestros innatos los que debemos iniciar la revolución de la educación en nuestros hogares junto a nuestros hijos y luego serán ellos, nuestros hijos, que con orgullo indio pondrán los filtros a los contendidos que el estado colonizador pretenda infundirles a través de la educación colonizadora. De esta manera serán los alumnos también maestros de sus docentes revirtiendo la acción perniciosa. La “Escuela India” será la revolución que devolverá el poder al indio. Ellos, nuestros hijos, resucitarán nuestra Patria india. Lograremos con esta “revolución educativa” una sociedad justa sin opresores ni oprimidos.
¡Empecemos a luchar!

Ser Jatun Inti
Humahuaca – Jujuy - Kollasusyo

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