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Pauta salarial: empresarios proyectan un piso de 10% y un techo de 15% para el 2018
Por Ariel Maciel, Diario Bae - Wednesday, Sep. 20, 2017 at 1:04 PM

20 de septiembre de 2017 | La cláusula gatillo se utilizará en más convenios.

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El empresariado buscará que las paritarias del año próximo tengan un piso del 10% y un techo del 15%, y que se vuelva a poner en marcha la cláusula gatillo para compensar la inflación real medida por el Indec. El objetivo es limar las expectativas en el crecimiento general de los precios, pero sin ingresar en tensiones límites con los gremios.

En Comercio buscarán copiar el esquema de pauta ofi cial más ajuste infl acionario por gatillo

Los hombres de negocios se adelantaron a un análisis que se realiza con la coyuntura encima, cuando en marzo se da el inicio de las negociaciones paritarias en sectores públicos y privados. Lejos de un alto nivel de exposición, los dueños de empresas quieren establecer un mecanismo estandarizado de negociación que relaje las relaciones con los sindicatos en épocas de diálogo salarial.

La cláusula gatillo se convirtió en la garantía para evitar pérdida en el poder adquisitivo de los trabajadores y evitar así un debilitamiento del mercado interno, según señalaron empresarios argentinos consultados por BAE Negocios. Tanto desde los industriales de la UIA, como los constructores de Camarco y los mercantiles de la CAC avanzarán en un esquema de ajuste por inflación pero sobre la marcha de los cambios en los precios para evitar una expectativa a futuro.

"La pauta salarial va a estar alrededor del 10%, con el ajuste si la inflación es mayor. Así es como se buscará instaurar en todos los sectores", le confesó a este diario uno de los líderes de la UIA, en un estricto off the record, que tiene como objetivo evitar rispideces con los gremios antes de tiempo.

En el caso de la industria, el sector sufre aún heterogeneidad en su recuperación y la actividad medida por el CEU de la casa manufacturera de Avenida de Mayo tuvo una fuerte diferencia con la estimación del Indec: mientras la UIA señaló un crecimiento interanual del 2,5% en julio, el organismo oficial había estimado un aumento del EMI del 5,9% para el mismo mes en referencia al 2016.

Al ser el sector que aún arrastra problemas por la crisis de producción del 2016, los industriales apuntarán a una base de negociación del 10% al 12%, con cláusula de ajuste por inflación. Sin embargo, la UIA no es una cámara que agrupe las discusiones salariales de todos los sectores que la integran porque se trata de una representación de tercer grado, en donde conviven más de 800 convenios salariales.

Sin embargo, y apoyados en el respaldo del gobierno de Mauricio Macri, se propondrá como marco de negociación "razonable" para poder "incorporarse al círculo de expectativas posible". "Antes había negociaciones sobre fantasía, porque nadie podía prever la inflación y se firmaban convenios sin referencias válidas. Ahora se negocia sobre pauta de expectativa inflacionaria y no sobre la inflación pasada y la que vendrá", aclaró, aliviado, otro referente del sector de alimentos.

En la CAC confirmaron que el esquema de negociación será "idéntico" al que se estableció en marzo pasado. No hay número estimado pero fuentes del sector mercantil le confiaron a este diario que el piso será del 15%, más la cláusula gatillo. De hecho, en 15 días comenzará la evaluación de la inflación proyectada del año para que se active el reajuste salarial firmado.

"La Cámara fue la primera en firmar convenio paritario en tiempo récord con el gremio mercantil, con la cláusula de reajuste por inflación a partir de octubre. El mismo esquema se realizará, casi con seguridad, el año próximo. La diferencia en la evolución de los precios automáticamente va sueldos porque lo que queremos es que los trabajadores tengan mucho dinero para consumir porque el costo laboral no es salario", afirmó un directivo de la CAC.

Construcción piensa que la actividad seguirá creciendo y permitirá discutir salarios sin conflictos. "La negociación de este año, en donde se planteaba una cláusula salarial X más una cláusula gatillo resultó ser una buena fórmula", admitió uno de los máximos representantes del sector que durante 2017 se convirtió en motor de la recuperación del empleo y la actividad en general.

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