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"El tema indígena debería ser política de Estado"
Por Primera Edición / Posadas - Tuesday, Jul. 10, 2018 at 6:47 PM

10/07 - Así lo resaltó el presidente del Consejo Consultivo y Participativo de los Pueblos Indígenas de la Argentina, el líder qom formoseño Félix Díaz. Abordó problemas como tierra, agua, salud y educación. Fue en la cuarta reunión anual de la mesa de gestión de las 600 hectáreas, en Puerto Iguazú.

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DE RECORRIDA. El militante indígena Félix Díaz dialogó con los mbya guaraníes en su paso por las 600 Hectáreas.

El presidente del Consejo Consultivo y Participativo de los Pueblos Indígenas de la República Argentina, el qom formoseño Félix Díaz, estuvo en Misiones y analizó la situación de los mbya guaraníes en la tierra colorada.

En su paso por la provincia, Díaz aseguró que “el tema indígena debería ser política de Estado”. Además, recordó que “el problema más importante es la inseguridad jurídica de las tierras”, en un contexto donde los “pueblos originarios están cada vez más acorralados y donde los gobiernos no promueven la incorporación de sus derechos y tampoco garantizan el respeto a enunciados de la Constitución”.

Cuatro puntos fundamentales
La situación del territorio, el agua, la salud y la educación fueron los temas analizados durante su visita a la aldea Itá Poty Mirí, en Puerto Iguazú, en la cuarta reunión anual de la Mesa de Gestión de las 600 Hectáreas, con la presencia de representantes del Consejo Consultivo y Participativo de los Pueblos Indígenas de la República Argentina, las máximas autoridades mbya guaraní de las cuatro comunidades que allí viven (además de la anfitriona, estuvieron Yryapú, Yasy Porá y Tupá Mbaé) y referentes de ONG y de la Subsecretaría de Tierras de Misiones.

Inseguridad jurídica
El militante por los derechos civiles de los indígenas y líder qom explicó, en diálogo con el canal de cable local CVI Iguazú, que “el problema más importante es la inseguridad jurídica de las tierras, porque no hay una ley que proteja y garantice la ocupación ancestral de los pueblos indígenas”.

Esto “en el marco de que los guaraníes están siempre en alerta ante la posibilidad del desembarco de más hoteles de alta gama en el territorio que ocupan en las 600 Hectáreas y el literal acorralamiento que sufrirían”, hecho que recordaron durante el encuentro que ya fue expuesto ante el Gobierno de Misiones.

Alambrados y fronteras
Los indígenas “originariamente se guiaban con los testimonios de los mayores, con la palabra como algo sagrado, pero eso fue cambiando con partidos políticos, las religiones... y se empezó a debilitar el territorio: aparece alguien, muestra aval jurídico y expulsa a los indígenas, va retrocediendo el monte y, con el correr del tiempo, se encuentra con un alambrado que tiene leyes, que es la propiedad privada, y no puede entrar a buscar su alimento, su medicina, su espiritualidad. Eso fue generando muchas muertes y vino la desnutrición y depender de los hospitales”, resumió Félix Díaz sobre la situación de las culturas originarias y la importancia del territorio en un contexto actual de “alambrados y fronteras”.

Respeto a la identidad cultural
Por otro lado, Díaz expresó que “hay muchos hermanos que tienen conocimiento de este proceso de integración”, pero “es necesario que el Estado facilite los mecanismos para garantizar el respeto, como establece la Constitución nacional donde dice ‘el Estado Argentino reconoce la preexistencia étnica, cultural, de los pueblos indígenas’. El Estado garantiza el respeto, la identidad cultural, pero ese respeto no lo tenemos”.

El agua, un bien escaso
Durante el encuentro, los mbya guaraníes plantearon dificultades para acceder al agua potable y volvieron a denunciar que las fuentes del vital líquido estarían contaminadas, hecho que fue asumido como un problema que se resolverá. Para ello, el primer paso -según lo acordado- será un estudio fisicoquímico y microbiológico que haría el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

Peligro: hotel a la vista
Las cuatro comunidades que viven en las 600 Hectáreas enfrentan distintos problemas, pero quizás el que más les inquieta es la posibilidad de que en su territorio se construyan más hoteles, con la consecuente disminución de superficie, cambios en el ambiente natural y posible contaminación.

Esto fue planteado en marzo pasado ante el Ejecutivo misionero (los Ministerios de Ecología y Turismo) y en la Legislatura por el cacique de Itá Poty Mirí, Estanislao Acosta, con el respaldo del abogado del Frente Ciudadano Ambiental Kapuéra, Martín Ferroni.

Solicitaron, en el marco de la Ley de Acceso a la Información Pública, que los funcionarios públicos clarifiquen qué veracidad tiene el arribo de complejos hoteleros en la zona de las 600 Hectáreas, ya que, según se afirma en medios de comunicación, “el grupo español Globalia (dueño de agencias de viaje mayoristas y minoristas y de la cadena hotelera BeLive) desembarcaría con dos hoteles propios en la Selva Iryapú, sobre el río Iguazú y a 15 kilómetros del Parque Nacional, donde ya operan varios hoteles”.

“Somos cuatro comunidades con unas 180 familias que habitan en las 600 Hectáreas: Yryapú tiene 100, Jasy Porá (55) Tupá Mbaé, 15 familias y en mi comunidad somos 23”, explicó el cacique Acosta.

“Nos preocupa la invasión de empresarios extranjeros. Nosotros no tenemos acceso al agua potable, a la luz eléctrica ni a otros servicios básicos, mientras se negocia con estas empresas sin proteger a nuestros pueblos ancestrales”, reclamó.

Pero no es el único caso en Misiones. Por citar uno más, cabe recordar que en febrero de 2018, miembros de la comunidad mbya Andrés Guazurarí lograron detener el intento de una multinacional que intentaba realizar una plantación de pinos en sus tierras, en Puerto Libertad.

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