En el marco de plenario del sindicalismo combativo realizado en el microestadio de Lanús, El Roble entrevistó a Alejandro López. Nos cuenta sobre la necesidad de la coordinación de las luchas, la perspectiva del movimiento obrero y cómo viene golpeando el ajuste sobre nuestra clase.
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ER: – Contanos cómo la viste hoy
AL: – Siempre, como sindicato ceramista, como fábrica y como gestiones obreras hemos planteado la necesidad de coordinar las luchas, así es que pudimos defender Zanón y sostenerla en el tiempo, con una lucha coordinada con compañeros de ATEN (docentes), con compañeros estudiantes, con compañeros desocupados, con el conjunto de organizaciones de izquierda.
Este plenario nos parece importante si va en ese sentido, si podemos presentarnos como una referencia para aquellos que tienen la burocracia sindical encima, que por ahí tienen alguna expectativa a gobiernos de la burguesía o que le creen a la burocracia sindical. Nosotros nos tenemos que presentar como una referencia porque hay que frenar este ajuste, porque nos tenemos que organizar como trabajadores para frenar la reforma laboral, para frenar despidos, para frenar cierre de fábricas y acá como sindicatos clasistas y combativos, junto con las organizaciones de izquierda, tenemos esa tarea. Lamentablemente acá hay ausentes, pero muchas veces por las mezquindades o como están en construcciones de sus aparatos, dejan de lado lo fundamental que es la necesidad que tenemos los trabajadores, de unir nuestra fuerza. Así que esto es un espacio, en ese sentido, que creemos que hay que desarrollarlo. Nosotros también queremos ser prudentes porque no queremos quedar en el medio de una interna del FIT. Pero esta vez vemos que hay más apertura, que se ha convocado a otros sectores, por más que no estamos en el FIT. Lo que más nos importa es que esto sirva para la lucha cotidiana.
Nosotros el lunes (25/6) vamos a parar, vamos a hacer un paro activo y nos parece que este espacio también lo está impulsando en ese sentido, hay que tener continuidad. Y sobre todo, también decirle a los trabajadores esto: cuál es la verdadera salida? porque la lucha sindical tiene un límite, entonces ahí nosotros planteamos que en el terreno político los trabajadores también nos tenemos que arremangar y trabajar para ver cuál es la salida propia de nuestra clase.
Nosotros creemos que lo más avanzado es el FIT pero la verdad que con ocho años que se han conquistado las bancas, no se ha podido hacer un encuentro de todas las fuerzas que componen el FIT. Nosotros ahí tenemos una posición muy crítica porque nos parece que el FIT no está a la altura de las circunstancias para organizar a los trabajadores en una nueva dirección, creo que hay que rediscutir algunas cosas, hacer balances, pero sobre todo nos parece que tenemos que dar la lucha en el terreno sindical, la lucha de manera coordinada que tenga que ver con el clasismo y con la izquierda pero al mismo tiempo tenemos que ir madurando la idea de que necesitamos construir un partido revolucionario con libertad de tendencias, esa es nuestra postura. Estamos abiertos también, porque no somos dueños de la verdad, estamos abiertos a discutir y a debatir porque nos parece que eso es lo importante.
ER: – ¿Cómo le está pegando la el ajuste actual en Neuquén y cómo la están viendo desde su sector en particular?
AL: – Durísimo, porque es un bastión enorme que hemos conseguido con el control obrero, para el conjunto de la clase, pero el gobierno, las patronales, los jueces, los fiscales no paran con su política de arrancarnos la fábrica. El planteo de ahogamiento es brutal. Ahora con el valor del dólar, casi la mitad de la materia prima está dolarizada, se nos fue todo al carajo. Con el tema de los tarifazos, para darte un ejemplo cuando podíamos pagar la luz pagábamos 300 o 400 mil pesos mensuales y ahora se nos fue a un millón y medio; el gas cuando lo podíamos pagar pagábamos un millón y medio por mes, ahora se fue a tarifas de ocho o nueve millones mensuales,es imposible de pagar. No nos cortan la luz y el gas por la relación de fuerza que tenemos porque saben que si no estamos produciendo vamos a estar sobre la ruta pero el problema es que nos estamos endeudando. Por eso se abre toda una discusión sobre la expropiación porque no alcanza. Nosotros planteamos expropiación y estatización pero bajo control obrero. No queremos que ningún funcionario nos venga a administrar la fábrica porque sabemos que después se reproducen todos los mecanismos patronales. Estamos en una lucha muy dura, muy cuesta arriba pero por eso es necesario generar otra relación de fuerzas. Si peleamos todos los trabajadores de manera unificada tenemos más posibilidad de subsistir como control obrero, sino la cosa se pone mucho más difícil.
ER: – Y después del paro, ¿cómo ven la continuidad, qué perspectiva ves?
AL:- Nosotros con 17 años de control obrero, hemos pasado por varias crisis, como la del 2008 del campo, esta es mucho más profunda; hemos pasado por varios gobiernos; hemos pasado por muchas experiencias con estas, de encuentros. Creo que necesitamos avanzar de manera concreta en la unidad de las filas de la clase trabajadora, cuesta muchísimo porque hay muchas mezquindades. A nosotros nos costó muchísimo poder viajar, nos pasó algo increíble con la agrupación del PTS allá, que son parte del sindicato. Como ellos tienen al tesorero, decidieron que no salga plata para viajar a este encuentro porque no lo habíamos planteado en asamblea. Lo cual es una mentira absoluta porque hicimos asambleas en las tres fábricas, pudimos ser parte de la convocatoria, vinimos a reuniones previas donde vinieron miembros de ellos también. Después ellos tomaron la decisión política de no ser parte de este encuentro. Después, la otra cuestión que te planteo, nosotros vemos que donde no dirigen tratan de que no funcione absolutamente nada pero nos parece un error político. Nosotros no militamos ni en el PO ni en Izquierda Socialista. Ahora, no lo decimos con orgullo, nosotros creemos que los trabajadores debemos militar en distintas corrientes pero creemos que la distintas variantes, basadas en el clasismo y en la izquierda nos merecemos un debate que es construir un partido revolucionario pero no tengo la experiencia hecha en mi vida de militante, creo que se podría hacer con libertad de tendencias, pero hay que hacer un esfuerzo pero sobre todo entender que tenemos un enemigo de clase. Cuando nos perdemos en esa visión de que nuestros propios compañeros que es un adversario político, es nuestro enemigo de clase, ahí la embarramos. Pero si tenemos claro que los jueces, los fiscales, los que gobiernan, el poder político, el FMI, esa es la lucha de clases. Si tenemos en claro eso, yo creo que podemos hacer el sacrificio, el esfuerzo como para encaminar y buscar una salida propia.
ER: – ¿Pudieron tener algún contacto con la lucha de Chubut? Sé que no están tan cerca pero están más cerca que nosotros
AL: – Las distancias no importan si hay voluntad política. Recién lo charlábamos acá con algunos dirigentes que nos parece que esta expresión, algunos de acá debemos ir. Corresponde rodear de solidaridad la lucha que están llevando adelante, para romper el cerco mediático, para ir a llevar el apoyo. Uno si quiere transformarse en referencia lo tiene que hacer en la vida cotidiana y los hechos van a decir si sos una referencia o no, en la práctica. Lo mismo con la lucha de los compañeros de Córdoba, hay que hacer un esfuerzo e ir. Por eso, lo que decimos, esto de coordinar las luchas, rodear de solidaridad, se tiene que dar en la práctica.
ER: – Bueno, la última. Nosotrxs insistimos bastante con el problema o el método de la democracia sindical, y en el estado actual en el que está la clase trabajadora no es solo una cuestión de método sino que es una escuela para poder discutir todos los problemas entre todos los compañeros. Hoy por hoy, ¿cómo juega esto en ustedes, qué facilidades o qué problemas tienen para desarrollar la democracia obrera?
AL: – Nosotros tenemos las asambleas de fábricas y también hemos hecho la experiencia de hacer asambleas de forma conjunta entre las tres fábricas. Nosotros tenemos varias herramientas de organización. También está la reunión de Comisión directiva del Sindicato pero ahora últimamente no la estamos haciendo porque se nos está transformando en un problema el hecho de que está tan polarizada la discusión con los compañeros de esta agrupación que una cosa es lo que se discute en la reunión de la Comisión Directiva y después ellos hacen otra cosa, con lo que estamos completamente en desacuerdo. Y de esa manera tenemos un problema sobre cómo funcionar. La tranquilidad que tenemos es que hacemos casi día por medio asamblea en todas las fábricas y entonces tenemos un mecanismo asambleario permanente de mucho debate, de mucha decisión. Se para la producción y se hacen asambleas de la totalidad, eso en las tres fábricas. Ahí es que resolvimos que el lunes vamos a parar y vamos a cortar al frente de la fábrica. Siempre hacemos la lucha de manera conjunta las tres fábricas ceramistas que están bajo control obrero, más allá de las particularidades de cada una, pero buscamos la unidad de las filas obreras. Y no solamente entre nosotros los ceramistas, sino que permanentemente buscamos la unidad con los compañeros estatales y de otros sectores del parque industrial que están luchando, porque aprendimos eso, porque Zanón no es un producto de la lucha en sí misma nuestra, un montón de compañeros y compañeras hicieron un esfuerzo, hicieron su aporte para que Zanón esté viva y sea una experiencia concreta y llevarla al terreno de la práctica, permanentemente.