Santa Fe: una elección con mil títulos

En un acto electoral al que no le faltó nada, las cuestiones relevantes atravesaron todos los sectores. El panorama político muestra un cambio de época en Santa Fe a todos los niveles.

Imágenes: Ruth Theler, LT9 y La Capital

Puede destacarse que más del 80% de la provincia de Santa Fe rechazó la propuesta macrista, pese a los intentos de José Corral de despegarse de la marca Cambiemos. El radical que llegó a gobernar Santa Fe capital de la mano del Frente Progresista, en 2017 a mitad de su gestión dio un salto a Cambiemos. Lo que, claramente, fue brincar al abismo. Una de las lecturas que dejó no sólo esta apuesta de Corral sino las tibiezas de otros sectores es que, salvo en el peronismo, no despegarse lo suficiente de la política nacional atentó contra la carrera política de varios.

Que después de 12 años de gobierno socialista, el peronismo unido vuelva a la Casa Gris es un dato de época que marcará una nueva etapa en la provincia. Con Omar Perotti a la cabeza, más cercano ideológicamente al viejo reutemismo y los sectores conservadores del peronismo, la nueva era pejotista deberá amalgamarse sobre una nueva realidad y pisos altos (no por ello los mejores u óptimos tras varios períodos del mismo signo) de gestión en materia de salud, educación y obra pública. Y un sector clave para el humor de la población: la policía nunca saneada, quizás uno de los escollos más grandes del Frente Progresista en algunos casos por complicidad, otros por inoperancia y también por la masa gris honesta que requiere un área tan compleja.

El ocaso de una experiencia que podría haber sido más fructífera en clave histórica por el lado del Frente Progresista, incluso con perspectiva nacional años atrás, es una bisagra en la historia de Rosario y Santa Fe. El espacio víctima de sus propias riñas internas retuvo las dos principales ciudades de la provincia. Emilio Jatón arrasó en la capital como intendente y Pablo Javkin, el primer intendente del Frente no socialista en 22 años en Rosario, ganó con un margen ajustado pero suficiente para no esperar el escrutinio definitivo. Lo que esto no subsana es que el Frente ingresa en un túnel del que no saldrá si no modifica estructuralmente su forma de construcción de poder interna y da espacio a las nuevas generaciones.

Lo dijo innumerables veces el único del sector que festejó anoche en Rosario, Pablo Javkin: veníamos reclamando una apertura, el Partido Socialista tiende a cerrarse en las definiciones. El actual gobernador y quien se llevó 28 escaños para la Cámara de Diputados, Miguel Lifschitz, apareció tarde anoche y no quiso ser parte del escenario de la derrota, donde los rostros desencajados del candidato y ex gobernador Antonio Bonfatti, el operador electoral y diputado, Rubén Galassi, y la actual intendenta y candidata a senadora Monica Fein, daban cuenta del desastre electoral.

A la par hubo alto nivel de votos en blanco y anulados, sumando juntos más del 8% en la categoría a Gobernador y más del 10% en categoría Diputados a nivel provincial. El nivel de participación general superó no obstante el 70% en una jornada atravesada por un corte inédito de energía en toda la nación y un clima realmente adverso en centros urbanos como Rosario.

Los sectores alineados a la izquierda no trotskista, el progresismo por fuera de las organizaciones tradicionales, o partidos vecinales sin proyección provincial, pero ligados a construcciones sociales de base, hicieron buena elección. Fue el caso de Rosario con Ciudad Futura y el Frente Social y Popular que sostuvieron 3 escaños en el Concejo, pero producto de esa alianza que dejó fuera a Celeste Lepratti, ambos espacios sumados pierden un escaño; y Juan Monteverde hizo una buena contienda para intendente quedando en cuarto lugar pisando los talones del candidato PRO Roy López Molina. En Casilda Fuerza Popular Casildense quedó en tercer lugar y logró su banca legislativa. La localidad de Vera tuvo una elección histórica, siendo el candidato más votado de todas las categorías Javier Barbona, por el partido vecinal Sumemos Esfuerzos, docente y reconocido militante de la zona: cosechó el 50% de los votos en su primera elección.

El batacazo celeste vino de la mano de Amalia Granata, quien con el único lema de oponerse a la práctica médica del aborto y a la Educación Sexual Integral, logró un concejal en ciudad de Rosario y seis diputados provinciales. El caso muestra la fuerte influencia de los sectores religiosos evangélicos a la hora de derramar votos en contiendas electorales. Unite por la Familia y la Vida surgió tras el rechazo en el Senado de la Nación del proyecto de la interrupción legal del embarazo y al arribar a nuestro país la campaña “Con Mis Hijos No Te Metas” en contra de la ESI.

Como dato de color, pero no menor, fue una buna performance de los y las periodistas que saltaron de las cámaras a las urnas. Susana Rueda del FPCyS fue la primera en categoría a concejales rosarinos; el periodista deportivo y empresario de medios Marcelo Lewandowski por el PJ arrasó dejando atrás y lejos a Fein; Emilio Jatón del FPCyS en Santa Fe cosechó una importante diferencia contra su contendiente del PRO, que quedó lejos y segundo. Al grupo puede sumarse a la mediática Granata, aunque el título periodista sería un exceso de cortesía.

Finalmente vale el análisis sobre la implementación de la boleta única, donde la selectividad del voto hace mutar escenarios que antes estaban mucho más atados con las llamadas boletas sábanas. La implementación de este sistema, si bien no mejora en sí mismo el concepto de democracia participativa ni representativa, empujó a realizar otro tipo de campañas y mutó la relación con el sufragio de quienes asisten a votar. Si bien la venta de ‘personas marca’ sigue siendo el fuerte de una política que se disputa mucho en el terreno mediático, el sistema santafesino abrió panoramas novedosos donde lo que se ve es, al margen de la nacionalización de los resultados, un claro cambio de época con una franja etaria a la baja en su composición. Y la tendencia de que quienes ocupan cargos ejecutivos no tendrán vía libre en los órganos legislativos donde deberán aplicar amplios consensos para gobernar.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *