Noveno reporte de aplicación del DNU 297/2020

A horas del anuncio de la ampliación de la vigencia del asilamiento obligatorio, el diario Clarín informó que, desde el 20 de marzo, suman 13.510 las personas detenidas por fuerzas federales, a las que hay que agregar más de 20.000 de las policías provinciales. Más de 33.000, mientras que la cantidad total de causas penales iniciadas por el mismo motivo, pero con soltura relativamente inmediata, supera holgadamente el medio millón. Es que la consigna “Quedate en casa” que con la que se la sintetiza, es viable para quienes disponen, por lo pronto, de una casa y otros recursos, mientras es impracticable para las barriadas en las que la pobreza y la desocupación son una constante desde hace años.

Algunos funcionarios, como el ministro Arroyo o la intendenta de Quilmes han admitido que esto es así y hasta plantearon que, para esos casos, se debería promover el “quedate en tu barrio”, con modalidades diferentes del cumplimiento del aislamiento de acuerdo a las condiciones materiales, lo que debería traer aparejadas modificaciones sustanciales de las instrucciones a las fuerzas de seguridad. Hasta el momento no hemos sabido de anuncios oficiales en este sentido, lo que permitiría a muchxs dedicar más tiempo y esfuerzo a cuidarse del virus que de la represión, y la situación de los sectores desprotegidos es cada vez más insostenible.

El domingo 29 de marzo el secretario general del Sindicato Unido Docente de la Universidad Nacional del Sur (SUDUNS) y referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), Martín Aveiro, fue detenido en Bahía Blanca cuando intentaba frenar los disparos policiales contra personas en situación de calle. La foto muestra la Jefatura de Policía distrital tras la detención.

Lo que, en cambio, florece a cada paso, es la propaganda reaccionaria, que promueve el buchoneo y la delación, como si el “enemigo” fuera quien necesita salir a ganarse el pan, y no el virus o la represión. En la ciudad de Chivilcoy, el intendente, en una entrevista radial, anunció que la policía y la guardia urbana tienen orden de “cazar” a quienes violen el aislamiento, y aclaró “no me importa que me digan dictador o que violo los DDHH”. En Mendoza, grandes carteles en la vía pública, con la firma del gobierno municipal, convocan a la ciudadanía a convertirse en “Ojos de la Ciudad”, aportando videos, audios, fotos y ubicación de “infractores” para salir a buscarlos.

En la ciudad de Bahía Blanca, la policía bonaerense atacó con balas de goma a cuatro cuidacoches en situación de calle, que se habían resguardado en una vivienda abandonada para evitar que los siguieran persiguiendo por violar la cuarentena, porque no tienen donde vivir. Aunque todos los desalojos están suspendidos, para la policía fue suficiente para intervenir, y a los tiros. Un dirigente del MTE, Martín Aveiro, que intentó disuadir a los policías de disparar, también fue detenido, junto a María Colussi, Matías Medina, Mauricio Ojeda y Mauricio Chena, de 43, 32, 28, 29 y 38 años de edad. Todxs quedaron imputados por atentado y resistencia a la autoridad, y por violar los artículos 205 y 239 del Código Penal, es decir, desobediencia y violar la cuarentena, y quedaron a disposición del juzgado Federal n° 1 de Bahía Blanca.

En Puerto Madryn, provincia de Chubut, dos mujeres, una trabajadora gastronómica y una trabajadora de la salud, denunciaron sucesivamente que, la misma noche del 23 de marzo, mientras estaban detenidas en la comisaría 3ª, acusadas de violar el aislamiento –ambas desempeñan labores esenciales y están exceptuadas para trabajar- fueron obligadas a desnudarse y realizar sentadillas en el baño de la dependencia.

En Gral. Acha, La Pampa, un peón rural de 27 años fue detenido por violar el aislamiento y terminó internado en grave estado en terapia intensiva. La policía primero informó a la familia que “se había golpeado la cabeza al caer de la cucheta mientras dormía”, aunque al hacerse público el caso pasaron a la más habitual versión de “golpes autoinfligidos”.

El viernes 27, cerca de las 14:00, un vecino del pueblo cordobés de Anisacate fue detenido en Alta Gracia, done había ido a cobrar la AUH y comprar insumos para el emprendimiento familiar del que él y su familia viven. Lo arrestaron al salir del supermercado. Imputado por atentado contra la salud pública y resistencia a la autoridad, la fiscalía dispuso su traslado al EP 9, donde permanecerá hasta el día miércoles. Hasta hoy continúa incomunicado. De paso, le secuestraron la tarjeta de débito, los bienes comprados y lo que había cobrado de la asignación.

Además de estos casos que, por su gravedad, destacamos, son muchísimos los informes de detenciones al voleo e interceptaciones intimidatorias, que, aun cuando no terminen con el arresto, muchas veces se traducen en la incorporación de los datos personales en una planilla, como si se tratara de alguna estadística oficiosa, de esas que tanto gusta a la policía.

Finalmente, a partir de mañana quedan revocados los permisos de circulación y declaraciones juradas según las distintas excepciones, que desde ayer deben tramitarse en forma exclusiva a través de la plataforma de “Trámites a Distancia”, en https://tramitesadistancia.gob.ar/tramitesadistancia/inicio-publico. Pero 24 horas después del anuncio, el sitio sigue sin funcionar.

La organización y la solidaridad popular siguen siendo nuestras herramientas para defendernos.

Cuidémonos colectivamente, del virus y de la represión.

La salida es la organización colectiva y popular.

CORREPI


Fuente: http://www.correpi.org/2020/noveno-reporte-de-aplicacion-del-dnu-297-2020/

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