Santiago de Chile, 11 ago (Prensa Latina) Con su salud quebrantada al cumplir 100 días de huelga de hambre, el líder espiritual mapuche Celestino Córdova emitió hoy un mensaje que muchos interpretan aquí como una despedida ante la cercanía de su muerte.
Córdova junto con otros 26 presos mapuches, también en grave estado, mantienen una huelga de hambre para reclamar al gobierno el cumplimiento del Convenio 169 de la Organización Internacional del trabajo, que les permita pasar parte de sus condenas en sus respectivas comunidades.
El mensaje, circulado en redes sociales, va dirigido a la Nación mapuche y los pueblos originarios ‘que luchan por su creencia espiritual, por su territorio, por su libertad, por sus derechos en dignificar a su pueblo’.
Señala que ‘será un orgullo dar la vida por mi pueblo Mapuche’ y denuncia que el Estado de Chile ‘a través de su institución policial me despojó de mi rewe (altar), de mi familia, de mi comunidad, de mi territorio, de todos mis pacientes que les brindaba vida y salud, siendo una autoridad espiritual mapuche’.
Córdova dice finalmente que ‘solo espero que al Estado de Chile le sigan exigiendo de todas las formas de devolver nuestro territorio ancestral mapuche y toda deuda histórica con todos los pueblos originarios’.
Según Giovana Tafilo, vocera del machi, durante el pasado fin de semana Celestino Córdova sufrió complicaciones que obligaron a preparar condiciones en el Hospital Intercultural de Nueva Imperial, en La Araucanía, para atenderlo si su salud se deteriora todavía más.
También otros presos han presentado problemas de salud e incluso cuatro de los recluidos en la cárcel de Angol debieron ser trasladados a un hospital.
Para ayer estaba previsto que se revisara en la Corte de Apelaciones de la ciudad de Temuco un recurso de amparo presentado por la defensa de Córdova, pero ante la inhabilitación de uno de los jueces, se pospuso para este martes, indicaron reportes desde la capital regional.
El Machi Córdova ha advertido que de no aceptarse ese recurso pasará a una huelga de hambre seca, lo que aceleraría el desenlace fatal.
Analistas advierten que ante la falta de un diálogo rápido y con resultados y el agravamiento de la salud de Córdova y otros reclusos, si alguno de ellos fallece se produciría un incremento de proporciones impredecibles de la violencia en La Araucanía, ya agudizada en las últimas semanas.