Mèxico:  Expresidentes ladrones y asesinos

Mèxico:

Expresidentes ladrones y asesinos; 

AMLO: todos son sabios en tanto me apoyen

1. Con excepción del cinco por ciento de las personas con intereses políticos, el 95 por ciento de la población manda redondamente al carajo a la política, esencialmente porque como dicen: es un “nido de ratas”, es decir, se roban todo lo que puedan y puede probarse a los largo de por lo menos 150 años de historia del país. Además con los miles de millones de pesos del mismo Estado los serviciales de la política acuden cada campaña política a pedir el voto de electores para que por un regalo corruptor acudan a depositar su voto.

2. Contrario al dicho halagador de que “el pueblo es sabio por votar por nosotros”, la realidad demuestra que durante más de un siglo ha sido engañado fácilmente por los políticos con regalos equivalentes a unos pesos. Los electores “razonan”: “de votar a cambio de nada o hacerlo por unos regalos, es obvio que hacerlo con quien me dé más”. Ese pensamiento jamás acabará mientras exista la miseria y el hambre, la extrema desigualdad económica y social muy conocida, de más del 80 por ciento de la población que sufre explotación y desempleo.

3. El gobierno actual de López Obrador habla y repite sin descanso que “las cosas van bien”, porque dice: “la corrupción está a punto de desaparecer de manera total”; sin embargo es un discurso halagador y engañoso porque aún en la Suprema Corte, el INE electoral, en Relaciones Exteriores y muchas dependencias más -por no hablar de los 200 exfuncionarios que deberían estar en prisión- la corrupción brilla con intensidad. Por ello son unos engañabobos aquellos que califican al gobierno “de izquierda” cuando es un pusilánime y pálido gobierno reformista burgués.

4. Por el tono y posición crítica de mis artículos -que antes escribía todos los días- ya son muy poquitos los que se atreven a publicarlos. Ahora no encuentro deseos de escribirlos porque en varios lugares –que también se autocalifican de izquierda- seguramente han pensado que son boberas o provocaciones que no valen para “enemistarse” con quienes los subsidian hoy o mañana. Así es esto de los “abarrotes”: si te portas bien te compran y subsidian, si eres un rebelde anarco de remate –aunque tengas 45 años haciéndolos- te califican de provocador y sólo te falta el entierro.