Iwi Imemby Resiste: “Sin la tierra no existe nuestra identidad”

Los intentos de desalojos de las comunidades indígenas de sus territorios se intensificaron durante la cuarentena. Buenos Aires no es la excepción. Desde principios del mes de Noviembre la Comunidad ava guaraní “Iwi Imenby” de la ciudad de La Plata ha denunciado acoso policial y amenazas por parte de los hinchas del Club Gimnasia y Esgrima.

Texto: Mayra Juarez
Fotografía: Johana Arce

El conflicto se inició con la mudanza de algunos de sus miembros hacia los predios cedidos en comodato por la Municipalidad, sitio que actualmente el club platense también pretende.

El día sábado 20 de Noviembre organizaciones y originarixs se acercaron hasta el predio donde la comunidad se encuentra en vigilia para resguardar su territorio. Ésta es la crónica de ese fortalecedor encuentro.

REENCUENTROS LUEGO DE LA CUARENTENA

El viaje comenzó desde el norte del Conurbano hacia Ciudad de Buenos Aires y de allí hasta La Plata. Luego de meses de aislamiento obligatorio nos reencontrarnos motivadxs por volver al territorio, a lo comunitario, al encuentro con lxs ancestrxs. Lxs que llevamos adelante procesos de recuperación identitaria sabemos que estos elementos son necesarios para enfrentar las luchas. Poner el cuerpo en el territorio es una necesidad espiritual.

Luego de algunas postas en la que nos encontramos con otras hermanas guaraníes, fuimos dejando atrás la ciudad para comenzar a adentrarnos en los paisajes que nos regalaba la campaña platense: un cordón verde de quintas fruti-hortícolas donde manos campesinas e indígenas abastecen con su trabajo a los mercados de las ciudades de provincia de Buenos Aires.

Allí viven y trabajan las familias que conforman la comunidad ava guaraní Iwi Imemby, los Hijos de la Tierra.

EL CONFLICTO

En la entrada del predio estaba estacionado un camión blindado de la policía quienes acudieron a pedido de la misma comunidad. Es que los hermanxs fueron amenazados de desalojo por “Los Triperos” que convocaron a una caravana a realizarse el sábado 20 para “recuperar lo que es de Gimnasia” y temían por su integridad física.

A raíz de ello, el intendente platense Julio Garro tendría pensado vetar la ordenanza que el Consejo Deliberante emitió en el mes de Octubre en la que se ratificaba la entrega de tierras a la Comunidad, razón por la cual, el viernes 20/11 convocó a sus integrantes para proponerles una reubicación: un nuevo predio de tierras fiscales más extenso y con algunas ventajas como galpones y agua. Esta mesa de negociación iniciaría el martes 24 de Noviembre.

Por su parte la Comunidad evaluaría la oferta dependiendo del acceso a servicios y transporte públicos que tenga el nuevo lugar. Las mujeres de la comunidad señalaron que el predio de la localidad del Abasto cuenta con una escuela cercana, acceso a la ruta con transporte público y hospitales a pocos kilómetros donde sus hijxs tienen historias clínicas. En la comunidad hay niñxs y jóvenes con problemas respiratorios y con discapacidades que necesitan de un seguimiento médico continuo.

EL ATY GUASU *

Luego de pasar la posta policial llegamos a un campo de margaritas silvestres y añosa arboleda. El yvytu* soplaba fuerte y no dejó de hacerlo durante todo el día.

En el medio del predio se instaló una casilla improvisada donde lxs hermnxs permanecen en vigilia para resguardar su territorio. Allí se encontraba Don Gumersindo, el líder de la comunidad. A pesar de los tensos días que le tocó vivir, con un semblante tranquilo y seguro, comienza a contar que finalmente no se hará la ceremonia para evitar problemas y continuar las negociaciones con el Club y la Municipalidad de manera pacífica. Junto a él también se encuentran resistiendo sus hijas Patricia y Melisa Segundo y sus nietos adolescentes.

Reunidxs en círculo bajo los árboles, alrededor de un campo de flores y con el yvytu* soplando como una leve brisa, Patricia agradece la presencia de los que se acercaron y le dio la palabra a su padre.

Gumersindo contento por ese apañe nos comenta:

“Para nosotros los guaraníes, la tierra tiene un factor fundamental, que es el que nos une y alimenta nuestra identidad como Pueblo, como Nación. Sin la tierra no existe nuestra identidad, no existe nuestra agricultura y nuestra recolección porque nosotros somos pueblos agricultores y recolectores”.

No estábamos en ceremonia pero Gumersindo aseguró que los ancestros estaban presentes, ahí acompañándonos, algunos preocupados, otros alegres, también opinando.

La ronda de presentación se inicia. Entre los asistentes se encontraban los representantes de las comunidades indígenas que conforman la Asamblea del Pueblo Guaraní en Buenos Aires ( A.P.G. Bs. As.), arquitectos de la UNLP, integrantes del laboratorio de investigación en Antropología Social de la UNLP quienes desde hace años vienen acompañando a la Comunidad y jóvenes originarixs que se acercaron para dar su apoyo. Mas tarde llegaría una delegación del Consejo Provincial de Asuntos Indígenas (CPAI).

Cuando le toca el turno de presentarse a Melisa, la consejera de los jóvenes de su comunidad, con palabras contundente nos señaló: “Siempre venimos discutiendo recuperar la identidad, la tierra es lo principal para la identidad. La lucha que nos han dejado nuestros antepasados es nuestra lucha. Transitamos un camino de marginalidad y exclusión, el Estado no va a ceder a nuestros derechos. Como jóvenes queremos dejar de migrar, recuperar nuestra semilla, nuestra madre tierra.” Melisa con su familia ha tenido que migrar forzadamente desde Salta hasta Buenos Aires, tras ser desalojados de sus tierras ancestrales en el año 2003.

En relación con ello Darío Juarez, presidente de la Asamblea Guaraní, señala: “Estamos viviendo un tiempo histórico, la vuelta de las comunidades a sus tierras”. Y así está sucediendo, los guaraníes se encuentran nuevamente reivindicando su preexistencia ancestral en este territorio bonaerense.
Buenos Aires es territorio guaraní.

Luego de esa presentación se compartió un almuerzo y charlas. Algunos miembros de la comunidad se quedarían a hacer una vigilia en el predio. La firma del contrato en comodato que se obtuvo en el año 2019, fue una gran victoria luego de años de reclamos y litigios judiciales. Permanecerán en estado de alerta hasta que se inicien las negociaciones pero fortalecidos por el gran encuentro: “Esto es muy alentador, me ha llenado de energía esto que ha ocurrido” concluyó Gumersindo quien además nos marcó un compromiso para todo aquel que se reconozca indígena:

“No decimos que somos pasado, somos presente y seguimos siendo futuro mientras exista este mundo. En memoria de nuestros antepasados y por el compromiso con las futuras generaciones ¡luchamos hermanos!. Nuestras generaciones tienen que seguir existiendo como nuestros antepasados han luchado para que nosotros estemos aquí reunidos, ellos (en referencia a las próximas generaciones) también tienen que seguir existiendo”.

*Aty guasu: gran encuentro
*Yvytu: viento

Fuente: https://www.facebook.com/102407048021302/posts/195639228698083/

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