Comunicado leído en la actividad de repudio a Garay y honor a Manuá, que realizamos hoy 11 de junio desde la comunidad Tres Ombúes junto a hermanas y hermanos con quienes hace años compartimos el caminar por la justicia, reparación y descolonización de los pueblos indígenas:
Un 11 de junio de 1580 se recuerda la segunda Fundación de Buenos Aires por Juan de Garay. Hace unos años desde el gobierno de la ciudad de Buenos Aires se realizaba un acto conmemorativo y de homenaje a quien para nosotros fue un genocida.
Nuestra presencia negada obliga a reescribir las historias oficiales de los Estados latinoamericanos a lo largo del Abya Yala. No es posible que en algunos lugares del continente nos sigan asesinando, o despojando de los territorios en nombre del progreso o que se niegue nuestra existencia.
El festejo u homenaje a los supuestos fundadores de ciudades es una falta de respeto para los indígenas que fueron despojados en esos Territorios. Así como se reconocen delitos de lesa humanidad de los 70’ al estado argentino le faltaría reconocer el genocidio perpetrado hacia los Pueblos Originarios.
Para los que escribieron la historia que los niños aprenden en las escuelas y que son parte de verdades incuestionables de varias generaciones nuestra historia comienza con la llegada de los invasores de estas tierras, pero hubieron por lo menos 20.000 años de historia previa que se encargaron de invisibilizar.
Así nos enteramos que en las protestas realizadas en Chile y Colombia comenzaron a desmonumentalizar aquellas estatuas que reivindican a los protagonistas del despojo realizando ajusticiamientos simbólicos, desde nuestro lugar no podemos seguir indiferentes ante estas reivindicaciones del pasado que no nos representan.
La sociedad tiene que saber que estos lugares estaban habitados y que hubo resistencia a tal punto que el primer intento de acaparamiento de tierras por parte de Pedro de Mendoza en 1536 fue repelido y volvieron casi 50 años después para en base al terror y a la superioridad de las armas conseguir su objetivo.
Es por eso que queda en la memoria de lo sucedido el nombre del Partido de La Matanza que remite al baño de sangre que infringieron a los querandíes en sendas batallas. En el Sitio Tres Ombúes se encontraron restos de esos sucesos dramáticos que son parte de nuestra historia que no conocemos.
Tampoco se conoce que al genocida de Garay lo fueron a buscar y le aplicaron la Justicia comunitaria y lo mató el lider Manuá del que no hay ninguna estatua.
Desde la Comunidad Tres Ombúes creemos que es momento de despojarnos del relato oficial y que además de despatriarcalizar el Estado es necesario descolonizar el relato que nos invisibiliza y nos cercena la memoria.
Sin Memoria Verdad y Justicia no vamos a poder edificar con bases firmes un nuevo contrato social donde se reconozcan nuestros derechos y el necesario aporte que podemos hacer para revertir el daño a nuestra Madre Tierra que hicieron los que bajaron de los barcos.
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