El pueblo mapuche tiene una nueva víctima de la violencia institucional. Por más que se niegue, es difícil explicar cómo personas armadas pudieron entrar a ese cerco inexpugnable que el grupo COER mantiene desde hace más de 50 días en este Lof y al que nadie podía entrar.
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Luego de conocerse la noticia de que había un hermano mapuche muerto, otro herido y algunos detenidos, nadie pudo dejar de sospechar que aquí hubo al menos una situación de complicidad. Hacía tres días que el acampe humanitario que se mantenía en la zona se levantó y al poco tiempo sucede esta terrible desgracia.
Recién conocidos los hechos se culpabilizó a la policía, pero a las horas las autoridades salieron a desmentir esa versión. Pero, de todos modos, la sospecha continúa y si pronto no se realiza una exhaustiva investigación, esta no va a cambiar.
Dicen que el reciente domingo 21, dos presuntos cazadores con armas de calibre 22 que no corresponden a las utilizadas por la policía provincial, pero que no descalifica que igualmente estas personas que dispararon a la cabeza de Elías Garay y a Gonzalo Cabrera en el estómago, pudieron contar con la complicidad de la misma.
Luego de sucedidos los hechos, los familiares y amigos de Cabrera, quien tuvo que ser hospitalizado en El Bolsón, tuvieron que soportar ataques violentos por parte de personas vestidas de gauchos que los amenazaron violentamente.
Durante todo la mañana circularon diferentes audios de hermanos y hermanas cercanxs al lugar y al conflicto, pero a las 13 hs. se realizó una conferencia de prensa, con la participación de Nelson Avalos, abogado de la APDH Bariloche y Mauro Millán, lonko de la Comunidad Pillán Mawiza, quienes explicaron con claridad los hechos y sus puntos de vista. De esta conferencia, organizada por el Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir, extrajimos los siguientes testimonios.
Fuente: https://www.facebook.com/Pueblos-Originarios-Serpaj-1616081138655587