El 7 de marzo comenzará el juicio contra Morelia Colque, acusada por defenderse de su agresor

El juicio será en el Tribunal Oral en lo Criminal Nro 7, de Lomas de Zamora. Desde el Frente Popular Dario Santillán y el CELS convocamos a acompañar el juicio y exigir su absolución.

El lunes 7 de marzo a partir de las 9, luego de haber estado detenida tres años, Morelia será juzgada por “homicidio calificado” en los tribunales de Lomas de Zamora -Camino Presidente Perón y Larroque. Morelia sufría violencia de género y se defendió del ataque de su ex pareja, pero fue criminalizada por defenderse, por ser mujer, migrante y pobre.

La historia de la violencia

Morelia y Brian comenzaron siendo amigos; luego de un tiempo se pusieron de novios y se fueron a vivir a la casa de la familia de él. Allí tanto Brian como su familia la trataban mal y ejercían violencia sobre ella.

Morelia siempre trabajó y era quien sostenía económicamente a Brian. Cuando quedó embarazada, luego de unos meses, tuvo que dejar de trabajar. En la casa no hubo ingresos hasta que Brian consiguió trabajo en un taller textil. Pero en cuanto empezó a ganar plata, dejó de pasarle dinero a Morelia y lo usó para salir con sus amigos. Morelia no tenía para comer, estaba sola en la casa todo el día. Brian le pegaba y le ponía una almohada en la cabeza para que no escucharan los gritos. La familia de Brian estaba al tanto de esta violencia. Mientras tanto, un hombre del taller textil abusó sexualmente de ella durante su embarazo.

En una discusión con Brian, el padre los echó de la casa. Él se fue con los amigos. Morelia volvió a la casa de su familia, con quien mantuvo el vínculo. En cambio, dejó de ver a sus amigas, por pedido de Brian. Al tiempo Brian y Morelia se reconciliaron, el peso de estar embarazada y sola, con pocas expectativas de ayuda, la hacían perdonarlo siempre.

Luego del parto de su hija, Morelia tuvo que ser operada de la vesícula, transitaba el puerperio. Su familia política se enojó por su estado de salud,  la consideraba “delicada”. Como forma de castigo la privaron de comida cuando volvió de la internación; nadie la visitó tampoco. Morelia fue unos días a la casa de sus propios padres para recuperarse. Allí, Brian la arrastró de los pelos por el patio de la casa para que volviera con él y su familia. Terminaron después por mudarse a otra casa. La situación fue de mucha precariedad. Brian no trabajaba o tenía changas. La bebé necesitaba leche de fórmula y no había ingresos, Morelia no comía. Ella decidió separarse y sacó sus cosas de la casa.

El hecho

Brian apareció en la casa donde Morelia vivía con su hija. Ese día la bebé estaba a cargo de Brian, pero él fue solo. Era el cumpleaños de Morelia, por lo que ella estaba con una amiga. Él se metió hasta la cocina, porque quería llevarse el cochecito, pero comenzó a amenazarla con quedarse con su hija y dársela a su actual novia. Hubo un tironeo con el cochecito. Morelia le pidió que se fuera, pero en lugar de eso Brian se abalanzó sobre ella. Morelia llegó a tomar un elemento que usaba para trabar la puerta de la heladera para intentar frenarlo. El forcejeo finalizó cuando ella lo empujó para sacárselo de encima. Ese elemento punzante quedó clavado en el hombro de Brian, quien murió a los pocos minutos.

Llegaron los vecinos y la policía. En la comisaría le preguntaron una y otra vez qué pasó, en un marco de burlas y discriminación por su condición migrante. El médico legista que la revisó no registró los golpes que tenía en la cabeza y que le había ocasionado Brian. Atravesó distintos traslados sin comida y sin bebida; distintos policías le robaron pertenencias. Cuando vio a su defensora oficial no le contó el contexto de violencia en el que estuvo inmersa y en el que murió Brian, porque tenía naturalizada la violencia con la que convivía. Su defensora, con más recursos simbólicos, tampoco la problematizó. Recién con acompañamiento psico-jurídico Morelia pudo reconstruir lo que le pasó.

Desde ese día ella quedó detenida y separada de su hija de tres meses. Luego del pedido de la defensa y de las organizaciones que acompañan el caso, se le concedió el arresto domiciliario.

Morelia hoy

La investigación del hecho no consideró las circunstancias que hicieron posible el episodio de violencia física y simbólica que rodearon la muerte de Brian. No tuvo perspectiva de género, pero tampoco consideró que una mujer menuda, violentada por su expareja, se defendió de un nuevo ataque.

Tras el seguimiento del Frente Popular Dario Santillán y el CELS, Morelia logró el arresto domiciliario. Primero vivió junto con su familia y su hija.  Luego, comenzó a trabajar como costurera y alquiló una casita donde vive con su niña. Morelia sigue detenida y está a punto de enfrentar un juicio por un conjunto de discriminaciones que el sistema de justicia proyectó en ella: es una mujer que se defendió, es pobre y es migrante. Morelia está siendo revictimizada desde el inicio del proceso.

El juicio será en el Tribunal Oral en lo Criminal Nro 7, de Lomas de Zamora. Desde el Frente Popular Dario Santillán y el CELS convocamos a acompañar el juicio y exigir su absolución.

#AbsoluciónParaMorelia

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *