Familiares de Luna Ortiz, junto a organizaciones sociales y feministas reclamaron justicia por su femicidio frente a los Tribunales de San Isidro. Una gran movilización por el centro de la ciudad posibilitó que la madre de la joven, Marisa Rodríguez, sea recibida por el juez Alejandro Lago, quien no brindó la ayuda necesaria. La búsqueda de justicia sigue en pie.
El clamor de una madre, de familiares, de jóvenes organizadas y de cuanta persona se acercó a acompañar se sintió ayer por la calles de San Isidro.
Es que desde hace cinco años que Marisa y Facundo, madre y padre de Luna, vienen reclamando justicia por el femicidio. El 3 de junio de 2017 Luna fue encontrada sin vida drogada, alcoholizada y violada. La causa original fue caratulada como “abandono de persona seguido de muerte con suministro de estupefaciente a título gratuito”, y el 4 de abril de 2019 el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°7 condenó a Villarreal a 14 años de prisión y procesó a su cómplice, Pablo Paz Gutiérrez, por abuso sexual seguido de muerte. Pero el 17 de mayo de este año, un polémico fallo de la Sala Primera del Tribunal de Casación penal de La Plata dejó en libertad a Villarreal, tras cambiar la carátula a “homicidio culposo”.
La familia apeló esa decisión y ayer martes 5 de julio la Cámara de Apelaciones N°1 debía expedirse sobre el pedido la familia de Luna de no excarcelación de Villarreal.
Al comenzar la concurrida movilización, para sorpresa de todes el juez del TOC 7, Alejandro Lago, convocó a su despacho a Marisa.
Al salir de esa reunión, ella explicó que el juez Lago “está muy preocupado por el escrache que se hizo y que estemos en las calles, le preocupa ahora que ya está todo mal hecho, y no nos puede ayudar.”
Con mucha fortaleza, Marisa prosiguió, “lo que le recalcamos de todos estos cinco años de lucha, es que fue un juicio con sabor a nada, porque desde un principio para el fiscal Marcelo Fuenzalida mi hija no muere en un contexto de violencia, porque Villareal la vende a otros tipos que fueron imputados como Pablo Paz Gutiérrez y para ellos eso es un abandono de persona y ya pasó la instancia para juzgar eso. Pero nos atendió para decirnos que ya no puede hacer nada, pero también nos atendió porque le preocupa que su cara esté empapelada por todo San Isidro”.
“Lo que le planteamos, que es lo mismo que le planteamos al juez Quintana, es que no se viene trabajando con perspectiva de género, que venimos planteando como familiares que dejaron en libertad a este tipo el 17 de mayo cuando salía de esta audiencia y nosotros nunca fuimos notificados. El juez no me decía nada…que me va decir, como no es su hija, y pasa como pasa en todos los tribunales, no les importan nuestras vidas ni de nuestras pibas que salimos cada día a laburar y no sabemos si volvemos”, relató Marisa sobre el encuentro con el juez Lago.
Plantada frente al juzgado y con el apoyo de las organizaciones afirmó, “yo le dije que acá es evidente en todo este proceso judicial las relaciones que tienen con el narcotráfico, que son unos corruptos y no me voy a cansar de decirlo y no tengo miedo, porque mi hija hoy no está y alguien tiene que pagar y esto terminó siendo un asunto político. No me voy a callar, porque se metieron con mi hija, ¡que ellos la tendrían que haber defendido el día del juicio y no! Para ellos mi hija se la buscó. Buscó que la pongan en un estado de inconciencia y que venga un tipo y que la venda. Ellos estuvieron del lado de Villareal nunca estuvieron del lado de Luna”.
Al peligro que vive la familia Luna y cualquier otra joven de Tigre y zona Norte al estar libre Villarreal, se suma que los tribunales no aceptan otra perspectiva en la investigación. “¿Para qué carajos tenemos jueces y fiscales? Para qué defiendan a nuestras víctimas, no para que las cuestionen “ah pero bueno ya se llevó a cabo u n juicio no sé yo no puedo ayudar”, así me dijo. Total las instancias están agotadas, cinco años de ir a Casación, se siguen tirando la pelota entre Casación y TOC 7 y al femicida lo tengo a cinco cuadras de mi casa. Le dije que yo tengo que vivir encerrada en mi casa, tener a mi familia encerrada cuidando de no salir y cruzarnos con ese femicida, con el que la abusó. Y acá no hay justicia. Ellos dicen que si porque para ellos era un abandono de persona y después un homicidio culposo. ¿A ustedes les parece compañeras? “Acá no pasó nada”, eso nos quiso decir, vayan a molestar a Casación. Yo le voy a hacer un jury a todos, no me voy a callar. ¡Que tengan miedo porque vamos a ir por más! ¡Justicia por Luna, fue femicidio!”
Con ese mensaje final, la familia y las organizaciones arengaron por proseguir la lucha y este caso no quede impune.
Fuente: https://folweb.com.ar/nota/2272/movilizacion_en_san_isidro_por_luna_ortiz/