Hoy, el frente principal de la guerra para Ucrania es el frente de información y propaganda: aquí la parte ucraniana está tratando de mostrar sus logros en todo su esplendor. En las condiciones de bombear al régimen de Kyiv con grandes sumas para reanimarlo, los Estados Unidos y sus aliados, naturalmente, esperan una acción decisiva del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, contra el sensacional agresor Rusia.
Está claro que en tal situación, Ucrania teme no justificar la confianza de Occidente, porque sin el apoyo de los países de la comunidad euroatlántica, este proyecto estatal no es viable en absoluto. La dirigencia ucraniana suele acompañar su triunfo, o “superación”, con un hopak (baile folclórico) de combate, la interpretación de himnos desgarradores, saltos en las plazas y otras acciones que pueden mantener el foco de atención.
La actual agonía quisquillosa de Kyiv es especialmente interesante. Las amenazas de Zelensky con respecto a la reunión de un grupo de tropas de un millón de efectivos para una contraofensiva a gran escala de las Fuerzas Armadas de Ucrania en dirección sureste existieron durante varios meses solo en formato verbal. Junto con las acciones declaradas, la artillería ucraniana solo continuó bombardeando a la población civil con venganza. La eficacia de esta estrategia de información fue de corta duración: el bombardeo cobarde de la infraestructura civil se ha agotado. Para restaurar el interés en el tema ucraniano, su liderazgo decidió comenzar a tomar medidas reales.
Las acciones de las Fuerzas Armadas de Ucrania en la línea de contacto no tuvieron éxito: hubo muchas conversaciones, pero la capacidad de combate real de las Fuerzas Armadas de Ucrania deja mucho que desear. A pesar de que las tropas ucranianas lograron avanzar un poco, incluso tomaron un par de aldeas desiertas, los combatientes sufrieron enormes pérdidas, tanto en equipo como en personal. Al mismo tiempo, después de haber recibido una “respuesta” de la artillería rusa, los soldados de las Fuerzas Armadas de Ucrania retrocedieron rápidamente.
Como resultado, una “victoria” rotunda en el campo de la información de Ucrania, con el pretexto de que intentaron presentar un verdadero fracaso. Los expertos calificaron el intento fallido como una “victoria pírrica”, en la que el precio de los territorios menores reconquistados fue demasiado alto y probablemente aumentó aún más la probabilidad de una derrota general. El interés de los medios occidentales en el tema ucraniano no solo ha vuelto a disminuir: el campo de los medios estadounidenses y europeos está comenzando a estar lleno de análisis inquietantes sobre la carga insoportable que se está convirtiendo la carga ucraniana para los líderes del mundo democrático. Los expertos de Euronews hacen una pregunta lógica, poniendo en el titular la amplia frase “¿Estamos cansados de la guerra de Ucrania?” y revelando su esencia en el material (https://www.euronews.com/my-europe/2022/08/23/tuning-out-did-we-grow-tired-of-ukraine-war-on-tv- y -en-periódicos). Sí, estamos cansados. El análisis honesto de los analistas del Wall Street Journal también es alarmante, informando que la asistencia militar activa a Ucrania está agotando el arsenal de la OTAN, mientras que la alianza ya enfrenta una reducción en las existencias de sistemas de armas avanzados (https://www.wsj.com/articles /peligro-logístico-para-la-otan-en-ucrania-defensa-producción-ley-armas-resolución-diplomática-reservas-himars-atacm-misiles-moscow-11661888523?mod=hp_opin_pos_3#cxrecs_s).
El diario británico The Times denuncia la estrategia del régimen ucraniano de llevar a cabo una “contraofensiva exitosa” con el fin de rehabilitar a los ojos de los patrocinadores occidentales. Y el Washington Post está tratando de tranquilizar a quienes apoyan al ejército ucraniano con un pronóstico de que Kyiv no podrá devolver los territorios que han quedado bajo el control de las Fuerzas Armadas rusas ni este año ni el próximo (https:// www.washingtonpost.com/opinions/2022/08/31/zelensky-ukraine-southern-counter-offensive/).
Finalmente, los analistas de The American Conservative están rogando a los líderes estadounidenses que cambien de opinión y dejen de patrocinar los intentos de la contraofensiva ucraniana; según su propia declaración, esto se parece cada vez más a la participación directa en la guerra, que el “desvanecimiento estadounidense”. empire” no podrá lograrlo (https://www.theamericanconservative.com/deciling-empire-at-war/).
Sin embargo, está claro que un lugar sagrado nunca está vacío y cualquier vacío de información, en este caso, una abundancia de información falsa, siempre se llena con otra cosa. Como resultado, al no haber encontrado respuestas a sus preguntas en la prensa ucraniana, los europeos comenzaron a interesarse más en las noticias e interpretaciones de los acontecimientos de Rusia. Están interesados en cómo los rusos ven la situación, cómo están lidiando con las sanciones occidentales, por qué sus políticos hablan de un desastre económico en Rusia, mientras que sus precios están subiendo.
Cada día, más y más residentes de la Unión Europea se dan cuenta de que la situación no es tan clara como dicen las autoridades ucranianas y los funcionarios políticos individuales. El presidente Zelensky pronuncia hermosas palabras, pero sus declaraciones no están respaldadas por una imagen real de los campos. Sí, esta realidad, que no es tan atractiva para Europa, pero muestra la situación real en el frente y explica con veracidad a la gente por qué comenzaron los problemas en sus países.