10 de Octubre: A 75 años del genocidio invisiblizado

10 octubre, 202210 octubre, 2022 por Paula Mercedes Alvarado Mamani

Visibilizar los crímenes es romper con la impunidad del pasado y sacar a la luz las violaciones masivas que fueron silenciadas y de las cuales muy poco se saben (y si se saben, no se hablan). Hay una deuda pendiente, que hasta la actualidad se sigue exigiendo.

Hoy se cumple un año más del Genocidio cometido contra el Pueblo Indígena Pilagá, la Masacre de Rincón Bomba, ocurrida en 1947, cuya sentencia judicial se convierte en el primer precedente histórico, calificada como CRIMEN DE GENOCIDIO. Causa invisibilizada que a 75 años se intenta entender cuál es la razón por la cual no se ha tratado, tanto en su visibilizacion como en su reparación como se lo ha hecho con otros crímenes que en este Estado y que ya han sido reparados (o por lo menos se encuentran encaminados).

La Matanza ocurrió en las cercanías de las Lomitas, entonces Territorio Nacional del Formosa, durante la presidencia de Juan Domingo Perón, hechos perpetrados por y a través de material y personal perteneciente al Estado Nacional, Gendarmería Nacional, Policía Nacional de Territorio, fuerzas de seguridad nacionales y civiles. Masacre que comenzó el 10 de octubre a las 18 hs. del año 1.947, y que continuaron en los días posteriores con persecuciones, fusilamientos, violaciones, capturas, torturas, desapariciones, traslados forzados, privación ilegítima de la libertad a través del traslado a las reducciones indígenas de Bartolomé de las Casas y Francisco Javier Muñiz, violaciones a las mujeres y niñas, del cual fueron víctimas integrantes del Pueblo Indígena Pilagá.

En el año 2005 la Federación de Comunidades Indígenas del Pueblo Pilagá inició una acción penal y una demanda civil contra el Estado Nacional. Entre 2010 y 2019 los testimonios de los sobrevivientes fueron valorados como prueba, se logró imputar al ex gendarme y juez Leandro Santos Costas por la desaparición forzada de 15 personas y llego al procesamiento del ex piloto de la Fuerza Aérea, Carlos Smachetti, por crímenes de Lesa Humanidad.

Posteriormente en el año 2019 tuvo una sentencia en el proceso civil dictada por el juez de Formosa Dr. Carabajal que reconocía los hechos ocurridos y a su vez impuso al Estado reparación de tipo económico y simbólicas, sin embrago estas eran insuficientes, además de calificar el hecho como delito de lesa humanidad. Debido a ello la Federación de Comunidades Indígena del Pueblo Pilagá provincia de Formosa, decidió apelar dicha resolución entendiendo que fue un Crimen de Genocidio el cometido por parte del Estado Nacional contra el Pueblo Pilagá’ y por otro lado la reparación económica colectiva es insuficiente para todo el Pueblo Pilagá en la actualidad.

Finalmente, la Cámara Federal de Resistencia reconoce el Genocidio, pero sigue sosteniendo las reparaciones económicas de manera insuficiente. Cabe destacar, que en todas las instancias el Estado argentino ha apelado contra la Federación negando su responsabilidad y alegando la prescripción de la causa. Hoy el expediente se encuentra en el máximo tribunal la Corte Suprema de Justicia de la Nación a la espera de una sentencia justa equitativa y no discriminatoria.

Hay que mencionar que la Federación ha solicitado desde el año 2017, año en que fallece el único imputado, la tramitación del proceso penal como juicio por la Verdad, cuestión que recién en septiembre del 2022 se dio lugar.

En estos tiempos de reconocimientos, de ampliación de derechos, de avances de los Derechos Humanos (igualdad de género, feminismo, etc) solicitamos a los “compañeros” de los distintos movimientos sociales y políticos partidarios que visibilicen esta causa, en la búsqueda de la Justicia plena. Este hecho ha sido desapercibido tanto por Sociedad Civil, por los militantes de DDHH, la Justicia, entre otros.

Se ha dado la espalda a este Genocidio, acaso por ser indígenas constituye un hecho menor? ¿Acaso hay doble moral? Como se explica la indiferencia de lxs compañerxs que tanto reivindican los preceptos de Memoria, Verdad y Justicia?

Los invitamxs a darle fuerza a esta búsqueda de Justicia para que no quede impune, necesitamos sanear nuestra historia.