Acto en CABA por Justicia por Facundo Molares Schoenfeld

Una gran concentración se realizó este viernes en el Obelisco porteño para exigir justicia por el periodista y militante Facundo Molares, asesinado por la Policía de la Ciudad en el marco de una represión a organizaciones populares que se manifestaban pacíficamente en la tarde del jueves contra el electoralismo burgués y “por la democracia del pueblo”.

Sobre el final de la convocatoria, una decena de personas que algunos manifestantes caracterizaron como “infiltrados” tiraron piedrazos -tomados de un volquete de los que suelen aparecer tácticamente en estas ocasiones- sobre el Centro de Monitoreo de la Policía de la Ciudad, con gran repercusión mediática. Los efectivos no detuvieron a ninguno, pero sí a un docente que había sido agredido por un policía de civil.

Foto: Agencia Télam.

Con información de Resumen Latinoamericano, corresponsales populares, Agencia Télam, Tiempo Argentino, fuentes propias.

La convocatoria fue en el Obelisco, en el mismo lugar donde el jueves por la tarde la Policía de la Ciudad arremetía con salvajismo contra unas pocas decenas de manifestantes que se desconcentraban luego de realizar un acto contra “la farsa electoral”, violencia que se cobró la vida del periodista, militante internacionalista e integrante del Movimiento Rebelión Popular Facundo Molares Schoenfeld.

Allí, miles de manifestantes de organizaciones sociales, políticas, sindicales y estudiantiles de izquierdas, junto con movimientos como la UTEP, la CTA Autónoma y agrupaciones barriales, se concentraron para repudiar la política represiva del alcalde porteño y precandidato presidencial Horacio Rodríguez Larreta.

Fotos: Resumen Latinoamericano.

Con canticos contra la yuta -“Yo sabía que a Facundo lo mató la policía”- y con diversas pancartas que hablan de la “maldita policía que mata a quienes protestan”, o el repetido “Larreta asesino”, la militancia, conmovida por lo brutal de lo ocurrido, quiso mostrar a su manera que “el fascismo no pasará”.

Hasta allí llegaron varios de los integrantes del Movimiento Rebelión Popular que habían sido detenidos, pero también se acercaron “los otros perseguidos”, del Tercer Malón de la Paz, con sus wiphalas y su protesta. Pedían “unidad para que no nos sigan matando” y se abrazaron con esa parte del pueblo que sufre carencias y dolores similares.

Fotos: Indymedia.

En un escenario improvisado hablaron varios oradores, todos condenando al gobierno de Larreta y también al gobierno nacional por hacer silencio frente a hechos tan graves. Impactó el discurso de uno de los referentes del MRP, cuando además de contar rasgos importantes de la lucha de Facundo, como combatiente de las FARC, como resistente al golpe militar en Bolivia, como preso político del gobierno de Alberto Fernández, parafraseó un discurso de Fidel cuando despedía al Che, señalando: “Algún día cuando nos pregunten como querríamos que sean las nuevas generaciones de revolucionarios, diremos que sean como Facundo, el comandante Camilo”.

Un encapuchado tira piedras al Centro de Monitoreo ante la pasividad de la Guardia de Infantería, un manifestante intenta detenerlo.

Piedrazos para la tele

“Graves incidentes” tituló el canal de noticias TN del Grupo Clarín para narrar lo que pasó al final de la concentración, cuando una decena de encapuchados empezó a tirar piedrazos sobre el Centro de Monitoreo 9 de Julio de la Policía de la Ciudad, ante la oposición de varios manifestantes que se les pararon enfrente, y también ante todas las cámaras de televisión que garantizaron el despliegue mediático del hecho.

A pocos metros del Centro de Monitoreo había aparecido súbitamente, entre el anochecer del jueves y la mañana del viernes, un Volquete Táctico como los que suele desplegar la Policía de la Ciudad cuando necesita este tipo de puestas en escena, como la recordada “14 toneladas de piedras en el Congreso”, durante las protestas en diciembre de 2017 contra la regresiva Reforma Previsional que bajó las jubilaciones y que los dirigentes del PRO citan habitualmente.

A diferencia de lo ocurrido el jueves, los efectivos de la Guardia de Infantería actuaron con calma, incluso pasividad, y no detuvieron a ninguno de los encapuchados.

Un docente en cana

A quien sí detuvieron fue a un docente que había sido agredido por un policía de civil.

Tomás Romero, docente del Mariano Acosta y del Comercial N° 27 salía de comer pizza en Las Cuartetas. Iba caminando por Avenida Corrientes cuando un infiltrado lo agredió.

La policía, en lugar de detener al agresor, redujo al docente.

“A la altura de Av. Corrientes y Libertad Tomás le pregunta a un oficial que estaba pasando y un tipo que estaba a unos metros empieza a los gritos diciendo ‘a vos qué carajo te importa, por qué preguntás”, contó Lucía Miranda, compañera del docente, a Tiempo Argentino.

El hombre se abalanzó contra Tomás. El maestro se aparta, le responde con un grito que él tiene derecho a preguntar, y siguió su camino junto a Lucía. A los cinco metros un grupo de seis efectivos de la policía de la Ciudad derribó a Tomas en plena Av. Corrientes y lo demoró por varios minutos, hasta ser llevado a la Comisaría Vecinal 1-B situada en la calle Tacuarí 770.

Allí lo tuvieron detenido más de ocho horas.

Tomás Romero detenido. Video: Tiempo Argentino.

“Fue una situación terrible porque se lo llevaron de una manera muy violenta, aduciendo alteración del orden público y otras cuestiones, pero lo que realmente ocultan es la forma que están queriendo disciplinar a quienes movilizan, aunque en este caso Tomás ni siquiera estaban movilizando”, subraya a este medio Matías Zalduendo, Secretario de Derechos Humanos de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera). El sindicato docente acompañó desde un primer momento a Tomás tras ser detenido. “Tomás estaba caminando en las inmediaciones de la desconcentración y fue víctima de esta situación”, agrega.

“La verdad no sé si el tipo que nos gritó y se abalanzó contra Tomás era un infiltrado pero si estaba al lado de un efectivo de la policía y después de generar los disturbios rápidamente desapareció”, agrega Miranda. Tomás fue detenido formalmente por la Policía de la Ciudad cerca de las 13:30. Lo liberaron cerca de las 22 horas.

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