Lo dijo Nicolás Caropresi, dirigente del MTE-UTEP. El miércoles 14 de agosto se realizaron nueve operativos judiciales, entre ellos dos en las sedes de la UTEP y el FOL. En diálogo con La Retaguardia, Caropresi compartió sus preocupaciones en esta situación “desesperante”. También habló de la solidaridad que le da batalla al egoísmo y la crueldad.
Entrevista: Fernando Tebele / Pedro Ramírez Otero. Redacción: María Eugenia Otero. Edición: Pedro Ramírez Otero.
El referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y parte de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Nicolás Caropresi, expresó su indignación por la persecución a los movimientos sociales: “Cualquier pibe del barrio ve cómo nos allanan a nosotros en los barrios mientras no hacen nada con los narcos”. El dirigente calificó lo sucedido como “hostigamiento a las organizaciones populares, insultos al trabajo solidario de un montón de personas, persecución, criminalización y también cortina de humo”.
Caropresi contó cómo fue el allanamiento a la UTEP: “Llegaron con una violencia bastante explícita. La orden de allanamiento que traían era una truchada porque nombraban una cooperativa que nunca tuvo el domicilio en Pedro Echagüe 1265. Entramos a la página de AFIP y la cooperativa tenía otra dirección”.
Además, planteó que el Gobierno nacional quiere destruir “cualquier germen de organización” o los lazos de comunidad. “En el barrio se está transmitiendo un mensaje. Un nene que sabe dónde están los transas y dónde están los comedores. Desde que llegó este gobierno ve que allanan más veces a los comedores que a los transas. Es un mundo de ‘sálvese quien pueda’ pero excesivamente cruel. No es lo mismo que la vida de los niños de Avenida del Libertador. Cada vez hay más compañeros que los aborda la tristeza, la depresión, se sumergen o vuelven al consumo de la droga porque sus cabezas no les dan más, compañeros que intentan suicidarse o se suicidaron. Estoy empezando a escuchar como los transas están matando pibes en los barrios del conurbano pero al estilo de que apareció un soldadito de un transa colgado en el poste de luz asesinado porque había consumido la droga que tenía que venderle a su patrón. Y esa es la sociedad que está creciendo por abajo”, contó Caropresi.
Por otra parte, se refirió a las estadísticas que Unicef difundió en los últimos días, que dicen que cada día un millón de niñas y niños se van a la cama sin cenar en el país: “Ya veníamos viendo que la gente se salteaba comidas. Nosotros veíamos cómo la gente que comía el viernes volvía desesperada a comer el lunes porque había pasado el fin de semana tomando té y comiendo pan”.
Pese a todo, el dirigente compartió también su costado de optimismo: “Los sentimientos que se empiezan a fortalecer en este momento son de solidaridad, una solidaridad en la miseria, pero que puede construir lazos para pensar sociedades diferentes que le hagan frente a propuestas tan egoístas, individualistas y crueles como estas”.
Fuente: https://laretaguardia.com.ar/2024/08/hubo-120-allanamientos-a-organizaciones-sociales-cuantos-hubo-por-loan.html