
Le torcimos el brazo al Fondo: todo listo para vender reservas
La profundidad de la crisis y la debilidad del gobierno hicieron que el FMI transgrediera sus propias normas para que el Banco Central pueda controlar el dólar. Terminó torciéndole el brazo al Fondo obligándolo a un giro de 180 grados en su política tradicional. Se trata de la cuarta modificación en el acuerdo: flotación libre entre bandas; autorización de venta de 60 millones de dólares diarios; congelamiento de la banda superior en 51 pesos y ahora una suerte de cambio semifijo con venta de reservas permitida. El temor a que la corrida cambiaria se transformara en bancaria es lo que venció la resistencia del Fondo. Paradoja: Luis Caputo fue expulsado de la jefatura del Banco Central por orden de Christine Lagarde, justamente por hacer lo que ahora se autoriza.
Hace un par...