Bajo el tema “Unificar las luchas en defensa del Brasil indígena”, representantes de las más de 300 etnias indígenas se concentrarán en Brasilia los días 24, 25, 26 y 27 de abril, para defender sus derechos en medio del mayor ataque en su contra de los últimos 30 años.
De acuerdo con el coordinador de la Regional Sur del Consejo Indigenista Misionero (CIMI), Roberto Liebgott, el gobierno de Michel Temer es “ostensiblemente anti indígena”, e indicó que eso se evidencia en que luego de producirse un golpe con la presidenta constitucional Dilma Rousseff en 2016, hubo una paralización casi total de los procedimientos de demarcación de territorios autóctonos, y se produjera una fuerte ofensiva contra los territorios aborígenes, especialmente con invasiones y depredaciones en esas áreas.
“Percibimos que en este período hubo una articulación del discurso de criminalización y destrucción de los derechos que ya estaban consolidados”, afirmó.
Por su parte, Luiz Eloy Terena, asesor jurídico de la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB), destacó que el retroceso en el gobierno Temer ha sido “agresivo al punto de entregar a la bancada ruralista el control de la Fundación Nacional del Indio (Funai)”.
En ese sentido alertó que los pueblo indígenas que tratan de proteger sus derechos humanos fundamentales, están siendo amenazados, presos, perseguidos y en los peores casos, víctimas de ejecuciones extrajudiciales. (Fuente: PL)