Facundo Jones Huala, lonko de la Pu Lof en Resistencia Cushamen, reivindicó desde la cárcel la lucha de su pueblo en Chile, y repudió “el ensañamiento, la represión y las tácticas de guerra sucia” de los gobiernos contra las comunidades originarias de la Patagonia.
27/09/2018
Jones Huala fue visitado este martes por familiares y allegados en la Cárcel de Alta Seguridad (CAS) de Valdivia, y también por Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), uno de los máximos referentes de la lucha mapuche en Chile.
El lonko de Resistencia Cushamen difundió ayer un comunicado en el que reivindicó la lucha que lo llevó al procesamiento en Chile y el pedido de captura a Argentina, por lo que fue extraditado semanas atrás.
Recordó que fue “perseguido, detenido y procesado en Chile” al participar de la resistencia “a megaproyectos capitalistas que pretenden represar el Río Pilmaiken”, lo que derivó “en 2013 en un emblemático juicio político a los defensores del territorio mapuche huilliche”.
“Todos fueron absueltos en nueve causas, entre ellas Pisu Pisue (por él estuvo entre los acusados de un incendio intencional), victimas también de persecución política orquestada por la genocida empresa noruega StatKraf”.
Con esa alusión Jones Huala se refirió a la compañía estatal noruega que adquirió tiempo atrás en Chile el 98,2% de las acciones de la empresa eléctrica Pilmaiquén S.A., entidad que logró la construcción de la central hidroeléctrica Rucatayo, ya en funcionamiento, y la aprobación de los proyectos hidroeléctricos Central Los Lagos y Central Osorno.
Facundo Jones Huala y su compañera Andrea Millañanco (foto Revista Cítrica)
Diversas comunidades mapuche wiliche del sur de Chile denunciaron que el proyecto hidroeléctrico atentaba contra el complejo religioso mapuche Ngenmapu Kintuante y todo su territorio, y con diferentes acciones de lucha lograron detener el avance de las represas en la Región de Los Ríos.
Jones Huala expresó que la causa Pisu Pisue, en la que absolvieron a todos los demás acusados, y la extradición “han pasado de la común criminalización a la persecución política a niveles cada vez más altos de escarmiento, hostilidad política y terrorismo de Estado, sometiéndome dos veces a un mismo proceso en el del juicio de extradición ante los ojos de todos”.
“Es por esto que repudio el ensañamiento, la represión y las tácticas de guerra sucia por parte de los Estados chileno y argentino, que no han dudado en coordinarse y operar en conjunto para combatirnos como el enemigo interno, imponiendo la represión, asesinato, judicialización y teatros de operaciones basados en las escuelas gringas de contrainsurgencia para guerras de baja intensidad”.
En el texto Jones Huala llamó a “continuar el proceso de concientización y reconstrucción de la nación mapuche con todas sus expresiones en todo el territorio” y pidió “apoyar esta digna prisión política en la que me encuentro con diversas movilizaciones”.
A su vez Auka Millañanco, “werken” (vocera) de la comunidad que dirige Jones Huala, denunció “condiciones críticas” del encierro del lonko y anticipó que realizará un reclamo a las autoridades chilenas por ese tema.
Héctor Llaitul, líder de la CAM (centro), en la visita del martes al penal de Valdivia. (foto Diario de Futrono).
Respaldo de la CAM
A su vez Llaitul dijo que concurrió al penal de Valdivia para “acompañar al ‘peñi’ (hermano) en la prisión política que está sufriendo” y expresó su solidaridad destacando que Jones Huala “es un destacado luchador de la causa mapuche autonomista”.
El líder de la CAM aseguró que Jones Huala “tendrá todo el apoyo de los grupos en resistencia mapuche” y adelantó que agotarán “todas las instancias nacionales e internacionales” para que se reconozca su condición de perseguido político y estatus de lonko mapuche.
“Al extraditarlo Argentina desoyó la recomendación contraria de Naciones Unidas avalando su condición de perseguido político, y por eso ahora su prisión debe ser reconsiderada”, señaló Llaitul.