Hace unos días los dueños empresa Suschen S.A que fabrica las míticas Mielcitas, refrescos Naranjú y alfajores cerraron la fábrica y se fugaron dejando en la calle a cientos de familias. En el día de ayer lxs trabajadorxs tomaron las instalaciones y decidieron acampar en la puerta hasta que lleguen soluciones concretas. La empresa adeuda los sueldos del mes de junio.
En Rafael Castillo, partido de La Matanza se vive una situación de incertidumbre, cómo viene sucediendo en Argentina desde que asumió el gobierno de Macri, los despidos y cierre de fábricas son moneda corriente.
Mientras buscaban ayuda en el gremio de Alimentación al cual pertenecen, lxs trabajadorxs de Suschen se enteraron de que los dueños (primos hermanos del ex presidente Eduardo Duhalde) cambiaron la razón social por las deudas de cargas sociales con la AFIP. La empresa aparecía en los registros como ATEPARECE S.R.L., en clara señal de un jugada para desaparecer y no pagar nada de lo adeudado. Ante esta situación y el inminente cierre, lxs trabajadorxs fueron a la justicia, y fue entre medio de presentaciones y citaciones que se enteraron de la fuga de los dueños.
Ciento uno (101) son lxs despedidxs, de lxs cuáles, la mayoría son mujeres sostenes de hogar. Silvia Ayala, trabajadora y delegada desde hace 20 años comentaba en un sitio de noticias sobre la decisión que tomaron al respecto después de la falta de respuestas en todos los ámbitos:
“Tuvimos tres audiencias: en la primera se presentaron los abogados de la empresa a tomar vista, en la segunda igual, pero en la tercera, que fue el jueves pasado, los representantes del gobierno exigieron que vaya el dueño de la empresa, que no fue. Por eso decidimos accionar directamente y manifestarnos en la puerta de su casa, en Adrogué. La fábrica está tomada. Buscamos ahora ayuda de alguien para poder seguir produciendo y seguir adelante, como cooperativa o con algún empresario que se quiera hacer cargo. No nos vamos a ir hasta tener una solución”
A lxs trabajadorxs siempre nos toca la tarea difícil de afrontar y pelear por nuestros derechos, porque bien sabemos que a los empresarios lo único que le importa es sostener sus niveles de ganancia y llevársela de arriba. En este caso, y una vez más , son las mujeres las que encabezan una lucha contra los despidos y sin agachar la cabeza deciden la ocupación para cuidar de que no se lleven las máquinas en un futuro vaciamiento. Recordando el ejemplo de Brukman, histórica fabrica de confección donde también las mujeres protagonizaron las luchas por sus puestos de trabajo tras la crisis del 2001, hoy son las trabajadoras de Suchen las que se ponen de pie. Como han mostrado otros ejemplos recientes, como la ex Canale ahora COTRAMEL, ante la desidia del gobierno y los empresarios, una primer salida es la solidaridad de lxs laburantes y la puesta en funcionamiento de fábricas autogestionadas como modo de garantizar la olla de las familias afectadas.
Desde Venceremos acompañamos a lxs trabajadorxs de Suchen S.A, denunciamos el vaciamiento patronal y saludamos la autogestión obrera
¡Basta de despidos!