Se conmemoran 35 años del asesinato de QAINQOÑE´N, hermano indígena perteneciente al Pueblo Pilagá de la provincia de Formosa que luchó por la búsqueda del Territorio Ancestral.
QAINQOÑIE´N: un grito permanente por la recuperación del Territorio.
QAINQOÑIE´N: era su nombre indígena.
La década del ´80 marcó una lucha histórica de los Pueblos Indígenas de Formosa por la recuperación de sus Territorios. Si bien con la sanción de la Ley 426 “Integral del Aborigen”, en 1985, varias comunidades obtuvieron su título de Propiedad Comunitario, ello no generaba certeza o seguridad a todos los Indígenas de la Provincia de Formosa.
Qainqoñe´n, cuyo nombre en su documento figuraba como Atilio Caballero, pertenecía al Pueblo Pilagá de la Comunidad Pozo de Molina, oeste formoseño. Es recordado por todos como un luchador en búsqueda de la recuperación de sus Tierras y Territorios Ancestrales. En ese momento, la comunidad estaba trabajando en la mensura, a fin de obtener su título de Propiedad Comunitaria. El Instituto de Colonización y Tierras Fiscales de la Provincia, ya había aprobado la tierra a mensurar.
En plena democracia el gobierno provincial reconocía el derecho de los Pueblos Indígenas a la recuperación de sus Territorios Ancestral. Pero no todos estaban de acuerdo…. Una familia vecina a la comunidad, de apellido Matorras, no estaban dispuesto a aceptar así nomás la titularización del Territorio, no estaban dispuesto a compartir el monte, agua, caminos, marisca, entre otros, pero ya venían discutiendo en varias ocasiones en algunas familias, con palabra amenazantes.
El 25 de febrero de 1987 Qainqoñe´n fue asesinado a tiros, por el criollo vecino, Matorras.
Ese día, Qainqoñie´n se adelantó a sus hermanos en el trabajo de la picada que marcada los deslindes para la mensura y el trabajo limpieza de camino carretero pasa cerca la familia Madrid, y Lorenzo Farías hasta la salida por la Ruta Nacional N° 86. La comunidad escucho el disparo, era de mañana, entonces se levantó el suegro Gabriel Fernández. Iba tras de él y a 700, metros al este de la Comunidad encontró dos personas a pie y le pregunto por Qainqoñi’n pero decía que no se encontraba y Gabriel vio un raro encuentro de esa dos persona y volvió rápidamente a avisarle la gente. La Comunidad salió a buscarlo. Y allí empezó la discusión dolor y odio. Los hermanos se movilizaron juntos a las autoridades locales y algunas organizaciones que acompañan- empezaron la búsqueda.
Fermín Matorras de apodo “Jimmy” fue quien no tuvo piedad y disparó sin contemplar al hermano. Su cuerpo fue encontrado el 11 de marzo de 1987 en un pozo, en posición vertical y cabeza abajo. Fue enterrado metros de la comunidad, baleado y acuchillado, su sangre había regado la tierra soñada. El dolor y asombro, la orfandad de tantos días buscando el cuerpo de hermano. El asesino estuvo detenido ocho días.
Nunca hubo justicia para Qainqoñe´n y su comunidad. Recordaba su hermano Ni´daciye, -Solano Caballero, según su DNI-, quien, además, resulta ser un sobreviviente de la Masacre de Rincón La Bomba, que ninguna de las comisarias quiso tomar la denuncia con excusas de las más diversas, pero sin ningún sustento. Les indicaban que tenían que ir a Lomitas, al Chaco… dejando prescribir el delito.
Sus hermanos lo recuerdan cada año como un mártir del Pueblo Pilagá, como un líder sabio y luchador por los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas, que regó con su sangre el Territorio Comunitario en la que actualmente vive su gente. Hoy, se sufriendo el dolor como aquel primer día.
Hoy los familiares están en la nuestra comunidad recordando lo sucedido.
Contactos por información u otras inquietudes:
-Osvaldo Caballero, cel +54 9 3715617814, Comunidad la Esperanza, mail: pilagaqomlase@yahoo.com
– Paula Mercedes Alvarado Mamani, Asesora jurídica, mail alvaradopaulamercedes@gmail.com