Italia
Estudiantes de la Universidad de Bolonia ocuparon la Piazza Scaravilli con sus tiendas de campaña.
Franco Berardo Bifo
07 Mayo 2024
Grupos de estudiantes de la Universidad de Bolonia ocuparon la Piazza Scaravilli con sus tiendas de campaña.
¿Por qué lo hacen? No puedo responder por ellos, así que respondo por mí mismo.
¿Por qué hacemos esto?
A veces nuestras acciones pueden parecer inútiles, poco concluyentes. En este caso sabemos muy bien que lo son: no podremos detener el genocidio del Estado sionista con nuestras protestas.
Pero las acciones no concluyentes pueden ayudar a comprender mejor lo que está por suceder, a crear conciencia sobre lo inminente y a prepararse para lo irremediable.
El primer acto de una guerra mundial que el declive del supremacismo blanco ha desatado contra la humanidad está teniendo lugar en Gaza.
En Gaza se repite un genocidio como el que llevaron a cabo los colonos europeos contra las poblaciones de las llanuras norteamericanas. Mataron a mujeres y niños, prendieron fuego a las tiendas de los indígenas de piel roja, destruyeron sus medios de subsistencia, mataron de hambre, violaron, erradicaron la vida hasta sus raíces para que esas tierras pudieran convertirse en lo que se han convertido: la sede de una sociedad estructuralmente Una civilización psicótica, atormentada por la maldición de la violencia de todos contra todos, que sufre una locura incurable que finalmente se vuelve contra sí misma.
Del genocidio colonialista germinó una civilización que multiplicó por mil el poder de las armas de exterminio, pero destruyó a la humanidad y la razón en su interior, precipitando un suicidio que tiende a arrastrar a sus víctimas al abismo.
Un exterminio como el que llevaron a cabo los alemanes contra millones de judíos se repite en Gaza con la complicidad activa de una mayoría de la población europea.
Después de 1945, al final de esa guerra, alguien dijo: nunca más. La Resistencia antifascista, las organizaciones internacionales por la paz, los intelectuales judíos que escaparon del Holocausto dijeron: Nunca más, Nie wieder.
Pero esa promesa ahora está cancelada, pisoteada y olvidada.
Nunca Más está ahora en Gaza. Y esta vez nadie podrá remediarlo, ni prometerlo, porque esta vez el fracaso es definitivo, irreparable.
En 1945, a pesar de la muerte de decenas de millones de personas (nunca sabremos realmente cuántas), existía la energía de una sociedad joven y la confianza en un futuro aún posible, un futuro de democracia, socialismo o paz. y del respeto a los derechos humanos.
Pero hoy la civilización blanca, senil, decadente y moribunda ha olvidado todas sus promesas. Tiene el inmenso poder de las armas de alta tecnología, y con ese poder los exterminadores blancos -israelíes, estadounidenses, rusos, europeos- creen que están posponiendo su propia muerte.
Netanyahu, Macron, Trump, Biden, Putin, Zelenskyy creen que están en una novela de Norman Spinrad llamada Bug Jack Barron , en la que se criaba a niños para robarles la sangre con la que rejuvenecer a los transhumanos. Creen que la sangre de veinte mil niños palestinos puede devolverles para siempre las fuerzas perdidas.
No sucederá, morirán como lobos, pero lamentablemente sus armas son capaces de borrar todo rastro de civilización humana, y quizás incluso de vida, del planeta.
Los estudiantes que ocupan Bolonia como en otros lugares no pueden detener el Holocausto.
Pero pueden indicar que estamos del lado de los colonizados en todo el mundo y que abandonamos la guerra que nos imponen los nuevos Hitler.
fuente: https://francoberardi.substack.com/p/perche-lo-fanno
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Video relacionado : Piazza Maggiore, Bologna
https://x.com/i/status/1790050645677887684
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