Hoy en día todavía hay alrededor de 105 mil familias sin tierra acampadas en todo Brasil, luchando por nuevos asentamientos.
Brasil
MST, políticas de Reforma Agraria y presupuesto del Gobierno Federal
El MST denuncia que la aplicación de estas políticas está estancada y el presupuesto no beneficia a los asentamientos creados antes de 2023; Comprenda cómo se relaciona esto con el desastre en RS.
Por Solange Engelmann
Desde la página del MST
https://mst.org.br/
A lo largo de 40 años de lucha, el Movimiento Sin Tierra ha utilizado la ocupación de grandes propiedades , edificios y espacios públicos improductivos en todo el país como una forma de presión sobre el gobierno federal y los gobiernos estatales para crear asentamientos con fines de Reforma Agraria , pensando en la liquidación de un inmenso pasivo de familias sin tierra que aún existen en el país.
El Movimiento sostiene que la tierra debe cumplir con el principio de función social, tal como lo determina el artículo 186 de la Constitución Federal. Esto determina que las propiedades rurales deben cumplir tres requisitos básicos para cumplir su función social: uso adecuado de los recursos naturales disponibles, preservación del medio ambiente y respeto a la legislación laboral. Ante esto, los trabajadores sin tierra señalan la importancia de un programa de Reforma Agraria en el país como una alternativa urgente y necesaria para la producción de alimentos saludables para la población rural y urbana, en el combate al hambre y en el avance del desarrollo del país.
Estos lineamientos forman parte del Programa Agrario del MST que está siendo actualizado por la base Sem Terra en todo el país, de cara al VII Congreso del MST, previsto para julio de 2025.
Sin embargo, actualmente todavía hay alrededor de 105 mil familias sin tierra acampadas en todo Brasil, viviendo en condiciones precarias y “conviviendo con la violencia de los terratenientes, del agronegocio y de la propia policía en diversos lugares, a la espera de un pedazo de tierra y de promoción agrícola para la producción de alimentos” para la subsistencia y la lucha contra el hambre”, como destacó Ceres Hadich, de la dirección nacional del MST, al denunciar que la Reforma Agraria permanece estancada en el Gobierno Lula , durante la Jornada Nacional de Luchas en Defensa de la Reforma Agraria, en abril pasado. Sólo el MST tiene 70 mil familias acampadas en el país a la espera de una solución y políticas de Reforma Agraria.
Luego de la instalación de un asentamiento por parte del Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria (Incra), que es resultado de un largo proceso de luchas de las familias sin tierra, desde la ocupación de un latifundio hasta la conquista de tierras, algunas familias permanecen por Más de diez años acampados en chozas de lona. El siguiente paso de los trabajadores es continuar nuevos procesos de lucha con el gobierno federal y los gobiernos estatales y municipales en la búsqueda de políticas públicas y créditos, para que estas familias puedan producir y sobrevivir en las zonas conquistadas.
Para ello, en cuatro décadas el MST ha exigido a los gobiernos un conjunto de políticas públicas y créditos agrícolas a bajas tasas de interés para la estructuración de asentamientos, producción de alimentos y condiciones para una vida digna en estas comunidades rurales, buscando avanzar en la construcción de la Reforma Agraria Popular.
Además de la presión constante del Movimiento y de un conjunto de movimientos populares en el país, la Reforma Agraria sólo será posible con el apoyo masivo de la población y con inversiones públicas del Estado brasileño, lo que se ha vuelto cada vez más difícil, como hoy el presupuesto del departamento enfocado en esta política pública se convirtió, por dos años consecutivos, en el más bajo de los últimos 20 años.
Ceres explica que, en abril de este año, el Gobierno Lula anunció que en 2023 había asentado a 50.852 mil familias sin tierra. “Pero al analizar los números, queda claro que sólo 1.450 familias se refieren a la creación de nuevos asentamientos, las demás son al reconocimiento y regularización de áreas consolidadas y previamente creadas”, dice el dirigente.
Durante la Lucha de Abril de este año , el MST denunció que las iniciativas del Gobierno Lula encaminadas a la Reforma Agraria han resultado insuficientes, ya que el gobierno federal no ha comprado tierras para la Reforma Agraria por tercer año consecutivo. Ante esto, el nuevo Gobierno de Lula finalizó su primer año de gestión con tasas cercanas a las de la gestión bolsonarista . Además del bajo presupuesto, otros factores obstaculizan el avance de la Reforma Agraria, como el hecho de que el Incra necesita servidores y estructura.
Programa Tierra de la Gente
El 15 de abril, Lula anunció el programa Terra da Gente como una nueva estrategia para acelerar la Reforma Agraria en el país. Sin embargo, el programa se centra en destinar “tierras disponibles en el país para asentar familias que quieran vivir y trabajar en el campo”, informa el portal Incra. La propuesta es sistematizar estas áreas disponibles en Brasil para su inclusión en el Programa Nacional de Reforma Agraria (PNRA).
En el Programa Nacional de Reforma Agraria, la estimación del gobierno es que 295 mil familias sin tierra se beneficiarán del asentamiento hasta 2026. Para 2024, está previsto un presupuesto de R$ 520 millones para la adquisición de áreas para la creación de asentamientos, lo que beneficiaría a 73 mil familias. Así, la promesa del gobierno es que entre 2023 y 2026, el PNRA beneficiará a 74 mil familias con asentamiento y 221 mil reconocidas o regularizadas en lotes de asentamiento existentes.
Con motivo del lanzamiento del programa Terra da Gente, según información de Brasil de Fato, el ministro del Ministerio de Desarrollo Agrario y Agricultura Familiar (MDA), Paulo Teixeira, afirmó que en relación al total de 295 mil familias que se beneficiarán del PNRA, 73.200 serán incluidos en el programa este año, 81.000 en 2025 y el resto el año siguiente. Estos números, según el gobierno, representan un aumento del 877% en la política respecto al período comprendido entre 2017 y 2022, cuando las acciones encaminadas a la Reforma Agraria fueron paralizadas y desestructuradas por el gobierno anterior.
Sin embargo, aunque la movilización del Gobierno Lula con el lanzamiento del programa y la creación de nuevas políticas públicas para las áreas de Reforma Agraria es notoria y fundamental, Giselda Coelho, de la coordinación nacional del sector productivo del MST, explica que el principal obstáculo para avanzar en el acceso a políticas públicas de asentamientos ha sido la garantía de un presupuesto para la aplicación e implementación de estas políticas.
¿Cómo garantizar un presupuesto para atender a los asentamientos, a los más antiguos, pero también a los nuevos? El principal límite hoy es tener un presupuesto que garantice lo que el gobierno ha querido poner a disposición de los nuevos asentamientos, creados a partir de 2023”, afirma.
En este sentido, destaca que el otro problema es que, como el Gobierno optó por destinar el presupuesto disponible a nuevos asentamientos, “hay asentamientos consolidados, que llevan diez años, quince años, que nunca han accedido a nada. Fueron creados como asentamientos y no accedieron a ningún tipo de inversión para estructurar a estas familias en el asentamiento”.
Ante el bajo presupuesto del Incra para la Reforma Agraria en 2024, que en la práctica aún no se ha implementado, Débora Nunes, de la dirección nacional del MST, señala que el tema que se plantea es que el gobierno federal optó por destinar recursos sólo a los nuevos asentamientos. unos, que cubrirían con políticas públicas un monto de sólo 6 mil familias asentadas en todo el país.
“Así, las familias que están asentadas, incluso desde hace más de diez años, no son una prioridad para el gobierno, el Incra y el MDA para acceder al crédito habitacional, por ejemplo, y poder tener una vivienda”, destaca Débora. Agrega además que la liberación de estos créditos depende del avance en los procesos de selección y aprobación, lo que ralentiza aún más la implementación de las políticas de Reforma Agraria.
Ante esto, existe un grupo de familias de trabajadores rurales en el país que aparecen en los datos del gobierno federal como asentadas, y están presentes en la Lista de Beneficiarios de la reforma agraria (RB), pero que aún viven en condiciones de campamento, como se encuentran en asentamientos que no tuvieron acceso a créditos iniciales, llamados crédito de instalación. Como explica Débora, estos son precisamente los créditos necesarios para “instalar a la familia, de modo que pueda iniciar un proceso de estructuración y desarrollo de la organización de la unidad productiva” en una zona de asentamiento.
En relación al Programa Terra da Gente, Débora destaca que los movimientos populares entienden la importancia del programa, ya que el trabajo realizado por el Incra permite crear un diagnóstico mediante el mapeo de la situación de la tierra en Brasil. Esto contribuye a la estructuración de un Programa de Reforma Agraria en el país, capaz de atender a las familias acampadas y garantizar tierras a millones de brasileños identificados por el IBGE como sin tierra, que necesitan la tierra como medio de trabajo y de vida para sobrevivir.
El programa también avanza en la definición de un conjunto de posibilidades e instrumentos que pueden ser utilizados para la asignación de tierras para la Reforma Agraria. El Decreto 11.995, del 15/04/2024, al crear el Programa Terra da Gente, prevé 17 modalidades de obtención de propiedades rurales, para los efectos de la Reforma Agraria, que van desde la expropiación por interés social, de tierras públicas hasta la compra y venta, permuta , expropiación de propiedades rurales con cultivos ilícitos o explotación de mano de obra en condiciones similares a la esclavitud, entre otras.
Sin embargo, valoramos que el Programa podría tener consecuencias efectivas en el mediano y largo plazo, porque involucra y demanda cuestiones que no son posibles de manera inmediata, o no son compatibles con la urgencia de resolver la situación de las familias que se encuentran acampadas desde hace más de más de 20 años”, dice Débora.
El dirigente nacional también recuerda que lo fundamental para que el Programa sea viable y disponga de tierras para la Reforma Agraria es que cuente con un presupuesto público garantizado, además de los ajustes necesarios a los instrumentos administrativos y legales relacionados con las modalidades presentadas, “ garantizando así operatividad y agilidad, incluyendo la reestructuración y fortalecimiento del Incra, la valoración de los empleados, la modernización de los instrumentos y la garantía de la restauración presupuestaria de la organización. Sin estas condiciones, será difícil tener, en un corto espacio de tiempo, 105 mil familias acampadas como beneficiarias de la Reforma Agraria, mediante la creación de nuevos asentamientos en todo el país”, proyecta.
Nos pusimos en contacto con los asesores del Incra para conocer la posición del gobierno sobre la situación presupuestaria de las zonas de asentamiento, pero hasta el momento no hemos recibido respuesta. Si se envía la información, el texto se actualizará.
Importancia de la Reforma Agraria para evitar inundaciones como en Rio Grande do Sul
Llevar a cabo un programa de Reforma Agraria en el país con apoyo e inversiones del Estado brasileño es fundamental para paliar los efectos de la crisis ambiental, que cada día afecta a más estados y personas con impactos extremos, como las inundaciones en Rio Grande do Sul, que hasta el momento ha alcanzado 157 víctimas mortales. El boletín de la Defensa Civil aún contabiliza 88 desaparecidos .
La estimación es que las tormentas e inundaciones en RS ya afectan la vida de 2,3 millones de habitantes de 463 municipios, alcanzando el 93% del total. Hay más de 581 mil personas afectadas y desplazadas, y casi 77 mil se encuentran en albergues.
Contrario al modelo agroindustrial que devasta la naturaleza, contamina suelos y aguas con pesticidas y ha contribuido sistemáticamente al agravamiento de la crisis ambiental y sus efectos, la masificación de un programa de Reforma Agraria en el país se ha vuelto cada vez más central y estructural para enfrentar la crisis. efectos de la crisis climática como sequías, tormentas e inundaciones, destaca Débora Nunes.
“El proceso de concentración de la tierra, la forma en que el capital ha transformado los bienes de la naturaleza en mercancías, devastando la naturaleza, ocupando espacios que no deberían ser ocupados por la agricultura; en lo que deberían ser áreas de preservación ambiental. Esa para mí es la política principal. Pero también tenemos otras políticas, como el proceso de mecanización, que tiene varias consecuencias”.
Débora señala que a través de la Reforma Agraria, como modelo agrícola, es posible producir alimentos saludables en equilibrio con la naturaleza y recuperar el medio ambiente, a través de la agroecología, al contar con un sistema de mecanización menos agresivo, con el uso de máquinas pequeñas, adecuadas. y útil para la pequeña agricultura y la Reforma Agraria.
Otro ejemplo citado es el amplio programa de reforestación que ha guiado el MST con base en el Plan Nacional Plantar Árboles, Producir Alimentos Saludables , iniciado en 2020, con el objetivo de plantar 100 millones de árboles en diez años. A la fecha, a través del plan se han plantado 25 millones de árboles, se han construido 300 viveros de la Reforma Agraria y se han recuperado 15 mil hectáreas.
Plantación de árboles en Mato Grosso. Foto de : MST in MG
“Tenemos el desafío del Plan Nacional para Plantar Árboles, Producir Alimentos Saludables, pero no puede tener el volumen y la velocidad si tuviera el apoyo del Estado, de las políticas públicas que lo impulsen, desde la construcción de viveros, hasta la capacitación de jóvenes en el proceso desde la recolección de semillas hasta la siembra. La Reforma Agraria permite ir en contra del agronegocio, incluso en todo lo que el agronegocio hace desde el punto de vista de la devastación. Es una cuestión estructural y de modelo que puede abordar esta cuestión”, resume Débora.
La Reforma Agraria se presenta como un proyecto estructural fundamental para el país, ya que combina la producción de alimentos saludables con la preservación del medio ambiente, permitiendo combatir el hambre en el país y, en tiempos de crisis, como durante la pandemia y en estos momentos. con las inundaciones en RS logra dar respuestas concretas, proporcionando alimentos y ofreciendo solidaridad a las familias afectadas.
Desde el inicio de las inundaciones en el estado, el MST participa en la elaboración de loncheras. Sem Terra instaló una cocina solidaria en el asentamiento Filhos de Sepé, en el sector “D”, en el municipio de Viamão, que produce y distribuye alrededor de 1.500 loncheras diarias a las familias afectadas en Eldorado do Sul . Otra cocina solidaria también está en funcionamiento en la ciudad de Pelotas, donde a través de una colaboración entre el MST, Levante da Juventude y Armazém do Campo, se producen 400 comidas por día, con la participación de alrededor de cien voluntarios. Se entregan loncheras solidarias en cinco albergues que acogen a personas sin hogar.
La cocina solidaria del MST en Viamão produce alrededor de 1.500 loncheras diarias para familias sin hogar en RS. Foto de : Tiago Giannichini
La solidaridad es también un elemento central en el proyecto de Reforma Agraria y un principio para el MST, que también ha actuado para rescatar a personas de albergues públicos y otros lugares hacia espacios del Movimiento, donado materiales de higiene y limpieza y buscado apoyo para la prestación de atención médica y psicológica. asistencia a las personas afectadas y entrega de botiquines básicos de salud.
Las inundaciones en RS también han causado daños y pérdidas incalculables a 420 familias asentadas sin tierra , que se vieron afectadas por inundaciones, inundaciones de viviendas, pérdida de producción de alimentos, daños a estructuras, herramientas, maquinaria; más allá de la vida de los animales. En total, seis asentamientos del MST afectados se encuentran en la región metropolitana de Porto Alegre y en la región central del estado, son: Integração Gaúcha (IRGA) y Colônia Nonoaiense (IPZ), en Eldorado do Sul; Santa Rita de Cássia e Sino, en Nova Santa Rita; 19 de septiembre, en Guaíba y Tempo Novo, en Taquari. La evaluación de los Sin Tierra es que con lucha colectiva e inversiones en políticas públicas, la reconstrucción es posible, basada en nuevas matrices sociales, ecológicas y productivas.
Por eso, antes de la lucha por la permanencia en la tierra, después del acuerdo logrado, las familias sin tierra enfrentan la lucha diaria en los campamentos, resistiendo diferentes tipos de violencia y abandono por parte del Estado y sus instituciones hasta conquistar una parcela de tierra. Y al conquistar una zona de asentamiento de la Reforma Agraria, el objetivo principal de las familias es producir alimentos, recuperar el medio ambiente y crear condiciones para generar vida e ingresos en estos territorios, pero esto sólo es posible con la implementación de políticas públicas por parte de los gobiernos, encaminadas a creando nuevos asentamientos e infraestructura para la supervivencia y la producción de alimentos en estos espacios.
*Este es el primer informe sobre la situación de las políticas públicas del gobierno Lula en las áreas de Reforma Agraria. En el próximo texto ampliaremos el debate sobre la situación de estas políticas de estructuración de asentamientos y producción de alimentos.
**Editado por Fernanda Alcántara
Recomendamos ver nota completa, enlaces y fotografías en la fuente: https://mst.org.br/2024/05/20/mst-politicas-para-reforma-agraria-e-orcamento-pelo-governo-federal/?utm_smid=11303935-1-1
Cocina solidaria del MST
