El ataque ocurrió este lunes por la tarde, cuando trabajadores y trabajadoras ferroviarias despedidos del Tren Roca, el Belgrano Norte y Sur protestaban realizando un corte de vías a la altura de la Estación Darío y Maxi, en reclamo de la reincorporación a sus puestos laborales. La Polícia Federal, encargada del operativo, se retiró de la zona y dejó vía libre para que fueran atacados con piedrazos por parte de una patota que llegó desde Constitución. Debido al ataque, uno de los trabajadores sufrió un corte en su cabeza por un piedrazo y tuvo que ser trasladado a un hospital, aunque luego fue dado de alta y se encuentra bien. “La respuesta al pedido de reincorporación de 300 familias por parte del gobierno ha sido nuevamente la represión tercerizada al igual que sucedió con el asesinato de Mariano Ferreyra. El gobierno, el Ministerio de Transporte, el Ministerio de Seguridad y la burocracia sindical son responsables”, expresaron en un comunicado desde Ferroviarios/as en Lucha.
Desde fines del año pasado los y las trabajadoras despedidas de la Líneas Roca, el Belgrano Norte y Sur vienen realizando protestas con cortes de vías en la Estación Darío Santillán y Maximiliano Kosteki (por la cual pasan los trenes que parten de Constitución rumbo a La Plata, Ezeiza, Alejandro Korn y Glew de la Línea Roca), en reclamo de la reincorporación a sus puestos laborales y el pase a la planta permanente de la empresa. Fueron despedidos durante la gestión anterior, pero hasta ahora no tienen respuestas a us situación ni de parte de la empresa ni del gobierno nacional.
Las medidas de lucha, que sólo se realizaban fuera de las horas pico y por pocas horas, ante la falta de respuestas de la empresa y del Ministerio de Trabajo de la Nación, se fueron agudizando. Aún así, siempre concluyeron tranquilamente, luego de negociaciones entre la policía y los trabajadores. Incluso, en varias ocasiones, habían solicitado el apoyo de los y las usuarios, explicando que llegaban a esa medida ante la falta de respuestas del gobierno y la empresa ante su amarga situación.
Pero ayer por la tarde, alrededor de las 18, la Policía Federal, a cargo del operativo de seguridad en la zona, decidió alejarse y dejar el espacio para que los y las trabajadoras despedidos sean atacados con golpes y piedras por parte de una patota cuyos integrantes no fueron identificados.
Mientras algunos medios de comunicación, como Clarín, mostraban el episodio como un ataque de “Pasajeros hartos por la espera que corrieron a manifestantes que cortaban las vías del tren por despidos”, los y las trabajadoras denuncian que se trató de una patota, que avanzó y los atacó en medio de un área liberada de la Policía Federal.
“Luego de meses de audiencias y promesas incumplidas los y las Ferroviarios despedidos y despedidas del Roca, el Belgrano Norte y Sur han sufrido un ataque en manos de una patota que actuó con zona liberada por la Policía Federal – denunciaron en un comunicado desde Ferroviarios/as en Lucha – La respuesta al pedido de reincorporación de 300 familias por parte del gobierno ha sido nuevamente la represión tercerizada al igual que sucedió con el asesinato de Mariano Ferreyra”, en referencia al militante del Partido Obrero que en el año 2010 fue asesinado de un tiro en el pecho por un grupo de afiliados a la Unión Ferroviaria en una manifestación de trabajadores tercerizados en la que se exigía el pase a la planta permanente en la Línea Roca.
Los y las trabajadoras sostienen que “el gobierno, el Ministerio de Transporte, el Ministerio de Seguridad y la burocracia sindical son responsables” por lo sucedido. Asimismo, denunciaron: “un compañero ferroviario del Roca ha sido herido y trasladado al hospital más cercano por los propios trabajadores”. Luego, confirmaron que el trabajador, herido por un piedrazo en la cabeza, fue dado de alta y se encuentra bien.
En audios que circularon en las redes sociales, uno de los trabajadores expresó: “Acá lo que pasó es que nos mandaron una patota desde Constitución, compuesta por lúmpenes, que les pagaron para que nos vengan a atacar. Es la primera patota que manda el gobierno contra los trabajadores. Teníamos un compañero herido, la policía no traía la ambulancia, y se luego se lo llevaron semiinconsciente”.
Lejos de dar una solución de fondo al conflicto, el gobierno nacional sólo emitió un comunicado donde se refirió a la”intransigencia de un grupo de autoconvocados que refieren haber sido trabajadores del sector ferroviario y peticionan la incorporación de más de 250 personas”.