El ministro de Salud, Ginés González García, denunció hoy el hallazgo de cuatro millones de dosis de vacunas vencidas en un frigorífico del barrio porteño de Constitución por un costo total de 1.400 millones de pesos, por las cuales se iniciaron “las acciones correspondientes” junto a la Sigen, y que se suman a las más de 12 millones de dosis encontradas en depósitos de la Aduana en el inicio de su gestión.
“Son vacunas vencidas durante el gobierno anterior que no se habían distribuido a las provincias; nunca estuvieron a disposición de los argentinos”, dijo en diálogo con la prensa el titular de la cartera de Salud, que concurrió al frigorífico Oneto y Compañía, en Solís 1958, donde se exhibieron las cajas de las vacunas.
El Ministerio de Salud precisó que se encontraron en ese lugar 4 millones de vacunas, entre las cuales había 600.000 dosis de triple bacteriana y 2,2 millones de antigripales vencidas, entre otras.
“Esto no tiene explicación, es una desaprensión total del Gobierno anterior”, dijo González García, quien se presentó cerca de las 11.30 en el lugar junto a escribanos de Nación.
Asimismo, explicó que se enteraron de la situación por la llegada de una factura de un frigorífico por el estibaje de esas vacunas, algunas de las cuales datan del año 2015.
“Nos llegó la factura por el estibaje de millones de vacunas compradas en 2015 y 2016 y vencidas durante el gobierno anterior”, afirmó al respeto el funcionario, rodeado de unas 20 cajas de diferentes laboratorios cuyas etiquetas indicaban la fecha de compra y vencimientos entre los años 2016 y 2018.
En relación a una posible denuncia judicial, el ministro sostuvo: “Yo no soy un denunciador, testimonio lo que pasa y decidirán los organismo si amerita o no ser judiciable”.
“Hoy es el final de un capítulo y esto no va suceder con nosotros, porque trabajamos para que haya más vacunas”, agregó.
Un comunicado distribuido más tarde por el Ministerio de Salud precisó que ante el hallazgo de las vacunas vencidas “inmediatamentamente se instruyeron las acciones para reactivar la licitación y los trámites necesarios para la destrucción de los insumos vencidos”.
En ese sentido, el texto oficial indicó que la cartera de Salud y la Sindicatura General de la Nación (Sigen) “iniciaron las acciones y sumarios correspondientes” y detalló que “el costo de las dosis se estima en 1.400 millones de pesos mientras que el costo derivado del almacenamiento desde 2015 y la destrucción rondan los 19 millones de pesos”.
En el inicio de su gestión en la cartera de Salud, Gonzalez García “realizó las gestiones pertinentes para eximir de impuestos y liberar de los depósitos de aduana más de 12 millones de dosis de vacunas, algunas de las cuales llevaban más de siete meses en el depósito de frío de la aduana”, agregó el comunicado sobre el operativo realizado meses atrás.
Por su parte, el ministro aseguró que “siempre nos queda un remanente de vacunas” pero dijo que “nunca sucedió tener las vacunas y no distribuirlas”.
“Son muchos millones de pesos o de dólares” perdidos por el vencimiento, destacó el funcionario, a los que se deberán sumar el pago por el tiempo que las dosis estuvieron en el frigorífico y por la destrucción de las mismas, que deberá hacerse en el exterior dado que Argentina no cuenta con la tecnología para ese procedimiento, agregó.
Las vacunas vendidas que se encontraron en el frigorífico Oneto son la Antigripal Adulto, Prevenar 13, Sabin Oral, Antipoliomielítica, Anticólera y DPT-A, entre otras, según detalló la cartera de Salud.
González García recordó que durante 2018 el porcentaje de aplicación de la vacuna triple fue “muy bajo” y advirtió que más adelante se analizarán las consecuencias de los casos que no se vacunaron.
“Recordemos que esa vacuna se le da a las embarazadas y a los niños de 11 años y previene de la tos convulsa, la difteria y tétanos”, aclaró.
Por otro lado, el ministro responsabilizó al Gobierno anterior por las vacunas vencidas encontradas y dijo que eso evidencia que era una administración a la “que no le importa la gente”.
“En el fondo era un gobierno que no le importaba la gente porque esto es plata del Estado”, señaló Ginés y, sin mencionarlo, apuntó contra el exministro de Salud devenido luego en secretario, Adolfo Rubinsntein, quién “está habitualmente en la televisión explicando lo que hay que hacer, dando consejos” sobre el manejo de la pandemia de coronavirus.
El ministro recordó que en diciembre de 2019 se encontró una situación similar en un depósito ubicado en la localidad bonaerense de Ezeiza, por lo que sentenció: “Parece que era un procedimiento”.