El grupo que encaró por el sendero más largo y de mayor dificultad para llegar al lago, conocido como camino de montaña, se comunicó vía teléfono satelital con el resto de la comitiva para informar distintas situaciones de amenazas y ataques durante toda la noche por parte de los empleados que responden a Lewis.
Cobertura: Mario Sadras de Radio Gráfica desde El Bolsón.
La séptima marcha por la soberanía del Lago Escondido en Río Negro continúa y sus participantes exigen que se garantice la seguridad física de las personas que recorrieron cinco días por el camino de montaña para llegar a las orillas del espejo de agua que el magnate británico Joe Lewis mantiene bloqueado.
El grupo que encaró por el camino más largo y de mayor dificultad para llegar al lago se comunicó vía teléfono satelital con el resto de la comitiva para informar distintas situaciones de amenazas y ataques durante toda la noche por parte de los empleados que responden a Lewis.
El pedido de las más de 100 organizaciones que se encuentran en el lugar es que permitan que ese grupo pueda volver del lago por el Camino de Tacuifí, que es de acceso libre y público, porque no cuentan con las condiciones para caminar otros cinco días por el camino de montaña.
“Existe riesgo de vida”, aseguró Julio César Urien, referente de Fipca y uno de los organizadores de la movilización.
“Los compañeros que están en la montaña nos dicen que empezaron a ser agredidos, les rompieron el equipamiento, lo agredieron al Padre Paco, le sacaron la biblia y se la tiraron. Estamos muy preocupados por la vida de ellos”, completó. Por eso, responsabilizan por la integridad física de lxs marchantes a la gobernadora de Río Negro, Arabella Carreras.
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Este viernes, agrupaciones sociales, políticas, sindicales y de derechos humanos marchan en El Bolsón para exigir al gobierno local y provincial que garantice la seguridad de las personas que se encuentran en la montaña.
Julio César Urien contó esta mañana que se vienen realizando distintas gestiones desde el arco político y de la iglesia católica para rescatar a los marchantes que no pueden volver por el Camino de Tacuifí. Según relató, Oscar Ojea, obispo de la Diócesis de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), habló con el ministro del Interior Eduardo de Pedro para que interceda por la situación.
El referente de La Cámpora dialogó con la gobernadora de Rio Negro y ella “se comprometió a enviar una ambulancia para ver el Estado del padre Paco Olveira y del veterano de Malvinas Gustavo Billido”, agregó el presidente de Fipca.
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Esta semana, un grupo peones rurales que responden a Lewis atacó a golpes, gas pimienta, palazos, rebencazos, piedrazos y hasta les tiraron los caballos encima a unos ocho integrantes de la séptima marcha.
A pesar del fallo del juez de feria de Bariloche, las jornadas para las personas que piden por la liberación del Lago son muy complicadas por las constantes amenazas de la patota de Lewis y la pasividad de la Policía de Río Negro.
[…] Pablo y José Puchy explotan las tierras fiscales que les quedaron tras las sucesivas divisiones de las grandes extensiones que sus abuelos ocuparon por la fuerza un siglo atrás. Extraen madera de bosques nativos y crían un puñado de ovejas y vacas, pero jamás pusieron a producir los campos. Pablo Puchy fue la semana pasada la cara visible de las patotas en Tacuifí. […]